Salí de casa después de “arreglarme” para ir a la escuela, estaba tan ida en mi mundo que no me lleve a mis hermanos a la escuela.
Al salir mire a Finn, quien me saludo, yo solo le respondí secamente y me fui. No quería entablar una conversación, no ahora.
Caminé hacia las escaleras pero me detuvo Wyatt quien iba pasando. Este me sonrió, tuve que sonreír.
— ¿Que paso?¿Que tienes?.
Sus preguntas hicieron que sollozara, entre mis planes jamás estuvo llorar en el hombro de Wyatt mientras él acariciaba mi cabello consolandome.
— Fue Finn, ¿Cierto? — pregunto. Asentí — Podemos hablar, si quieres...
Negué separandome de él — No, debo ir a la escuela. Tal vez luego — limpie mi mejilla — Nos vemos.
— ___________...
Escuché su voz pero la ignore y solo salí del edificio. Caminé por las llenas calles de San Diego, mientras miraba mis zapatos negros. Después de algunos minutos llegué al instituto y entre al salón de clases sin mirar a nadie, me senté en el fondo. Mire mis dedos y mordí mis labios para no llorar.
Levanté la mirada al escuchar pasos acercarse, era Carol, ella me miro y solo se sentó frente a mi. Levanté las cejas e iba a tocar tu hombro pero ella se inclino hacia enfrente.
Debe estar molesta.
Lo entiendo, fui una mala amiga, una egoísta. Con un chico –que ahora– se que no me hará caso.
— Carol — Susurré. Me ignoro — Carol, lo siento...
— Está bien.
— No, no lo está. ¿Podríamos hablar a la salida?.
Me miro — ¿Por qué debería tener tiempo para ti si tú no lo tuviste para mí?.
Esa pregunta me hizo caer en cuenta que no quería hablar, debo dejar que pase un poco de tiempo para que podamos hablar. Las clases comenzaron y fue un día bastante aburrido, Carol no me dirijo la palabra el resto del día... Me lo merecía.
...
Al llegar a casa mi padre estaba mirado la televisión, este me miro con una sonrisa deslumbrante, este estiró su brazo para que fuera con él.
Me acerque y lo abrace.
— ¿Hablaste con Carol?.
— Lo intente, pero ella no quiere hablarme.
— Dale tiempo, pero no lo vuelvas a hacer — sonrió — Los Parker somos fuertes, se fuerte... Todo pasará.
— Lo intentaré.
— Eso. ¿Y tus hermanos?.
Abrí los ojos, fui corriendo a su habitación y ahí estaban ellos acostados a medio día. Con sus tabletas jugando.
— ¡Están vivos! — grite.
— ¡Bien! — grito mi padre.
Entre en mi habitación y me cambié. Salí de mi habitación e hice un poco de comida para mí, tenía demasiada hambre. Mi padre seguía viendo la televisión, así que me senté a su lado y la vimos juntos.
...
Las horas habían pasado muy rápido, mi padre ya se había dormido, y mi madre igual. Apague la televisión y lleve el tazón al lava platos. Estaba por ir a mi habitación pero la puerta sonó, alcé la ceja confundida y camine hacia ella. Al abrirla me quedé boquiabierta, era Finn.
— ___________, lo siento, mentí. No me gusta Mía, ella es solo mi amiga. Solo... — respiro — De verdad quiero que haya un límite. Tu me agradas, en serio... Pero no soporto que me vigiles día y noche. Yo, lo siento, espero puedas perdonarme.
Cerré la puerta.
Me quedé callada mirado la puerta por unos segundos hasta que la voz de Finn volvió a sonar.
— Se que no me quieres hablar, lo entiendo, fui un patán. Pero de verdad lo siento.
Abrí la puerta y lo abrace fuertemente, lo que más necesitaba era un abrazo, el correspondió al instante y puso su barbilla en mi cabeza. Era claramente más alto que yo. Al separarnos me miro a los ojos y sonrió.
— ___________, jamás quise lastimarte...
Lo interrumpí — Lo entiendo, tranquilo.
— Me alegra que lo entiendas — sonrió — Tengo una idea...
Entro a su departamento y después de unos segundos saco su guitarra y se sentó en frente a su puerta. Comenzó a armar algunas melodías, ¡Iba a cantarme! Era mi sueño. Me iba a sentar pero abrieron la puerta haciendo que cayera de espaldas.
Era Michael, este comenzó a reír. Me levanté y sacudí mi pantalón, Finn se levantó igual.
— Creo que será en otro momento — menciono Finn con una mueca.
— No,no... Michael, a tu cuarto — ordene.
— No eres mi mamá.
— ____________, tranquila. Otro día con más calma — sonrió.
Termine por darme por vencida, y Asentí. Ya estaba tan cerca de cumplir mi sueño más grande.
Finn me sonrió y entro a su departamento, y yo entre al mío un poco enojada. Estaba decepcionada ¿Por qué cuando pasa algo que quiero siempre es interrumpido?.
— Tu... — apunte a Michael.
— ¿Debo correr? — Asentí — ¡Adiós!.
Lo perseguí hasta su habitación. Pero no lo alcance, así que entre a la mía y mire la gran foto de Finn frente a mi.
— Tengo otra oportunidad contigo, debo aprovecharla. Ahora no haré nada tonto — sonreí — Serás mío.
Maratón 3/3
¡Rayis intensa! Lo eso Finn no te quiere, bueno, espero les haya gustado los capítulos. Esto es solo una probada de lo que va a pasar en realidad(;
Arios🖇️
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OBSESIÓN || Finn Wolfhard Y Tú ||©🔚
Fanfic¿Que harías si Finn Wolfhard viviera en el mismo edificio que tú? Más específicamente frente a tu departamento. TERMINADA