OBSESIÓN || Finn Wolfhard Y Tú ||©🔚

CAPÍTULO 19

Lya se había encargado de arruinar mi vida, y junto con ella yo también ayude un poco. Ella me explico con tal arrogancia que uno de los papeles había salido volando cuando choque con aquel hombre mayor, y ella lo tomo.

Estoy tan destrozada que mi cabeza a estado en otro lugar desde ese momento, Finn es acosado las veinticuatro siete, es solo cuestión de tiempo para que se vaya. Pero por mientras tienen a un guardia de seguridad en el pasillo cuidando que ninguna chica quiera llegar y entrar sin avisar. Él se encargo de mantenerme lejos a toda costa, má de una vez intente hablar con él. Pero comprendo que era mejor alejarme

Suspire pesadamente mirando el papel en mis manos, la obra se estrenaba en una semana y he estado tan distraída que ya no se si quiera actuar. Mis padres aún no saben y eso hace que todo vaya peor, ya que siempre me preguntan por él o lo quieren invitar a cenar.

Apreté la mandíbula al mirar que unas de mis lágrimas cayó en el papel.

— ___________...

Levanté la mirada para encontrarme con Matthew, quite mis lágrimas y trate de sonreír.

— ¿Necesitas hablar? — preguntó. Negue y se sentó junto a mi.

Nos mantuvimos callados unos segundos, mientras mirábamos a las personas ensayar lo que les tocaba, mi extra estaba ocupando temporalmente mi lugar.

Matthew soltó una risita cuando paso algo gracioso en una escena, no pude evitarlo y sonreí de lado. Una de mis lágrimas escapó por mi mejilla, Matthew volteo a verme y levantó su mano para quitar aquella lágrima, lo mire por un instante. Sus ojos me controlaban por completo, el verde tan profundo y aquella manchas azules gracias a la heterocromía me tenían totalmente asombrada.

Sonrió dejando mostrar un poco su dentadura que aun que no fuera perfecta eran perlas blancas, y su sonrisa era hermosa. Se levantó y bajo los escalones lanzándome una pequeña mirada, sabía que lo debía hacer.

«Debo... Olvidarme de Finn».

Suspire mientras me levantaba y bajaba los escalones con algo de lentitud.

— ¡Muy bien chicos!— exclamó Matthew — Ahora le toca a los actores principales hacer su papel, y es lo último que haremos el día de hoy.

Leí por algunos minutos mi guion hasta que lo memorice.

La actuación comenzó, dije algunas de mis líneas con sonrisas en mis labios, tratando de sentirme más relajada. Y lo estaba logrando, el chico frente a mi –el que era Romeo– era bastante tímido, pero un genial actor.

La parte del beso llegó, ambos estábamos nerviosos pero, reitero, solo es actuación.

— ¡Genial! — grito Matthew poniendo su cuerpo en medio de nosotros — Se acabó el tiempo, fue genial. Lo hicieron increíble.

— Todavía faltan cinco minu...

— ¡Nos vemos mañana! — bajo del escenario.

Todos se esparcieron por el lugar hasta que salieron y baje del escenario intentando irme, quería solo entrar en mi habitación y encerrarme –como lo he hecho por la última semana–.

— __________ — me habló Matthew llegando a mi lado — ¿Quieres ir al café?.

...

— Quisiera conocerte más, no se mucho de ti — mencioné tomando un poco de mi late.

— Bueno, no hay mucho que saber. Me encanta actuar, actualmente deje la universidad para dedicarme a esto... Y es algo difícil conseguir trabajo a mis veinte años — rió — ¿Y tú?...

— No hay mucho que contar — bufé — Soy una chica de San Diego que vive en un edificio con sus tres hermanos y sus padres, mi vida es un desastre y bueno... Últimamente eso a empeorado.

— ¿Puedo hacerte una pregunta? — lo mire y Asentí — ¿Quién es Finn Wolfhard?.

Abrí un poco los ojos — Creí que lo conocías...

— No, ni siquiera me suena... Y bueno, tu amiga llegó gritando su nombre.

— Es... Era, un amigo — me encogí de hombros tratando de olvidar el asunto.

— ¿Es por eso que has estado así?. Tan, triste.

Jugué con mi vaso que aún estaba medio lleno e intente no llorar, pero al momento de sentir el nudo en mi garganta supe que no podría contenerme.

— Oye — menciono — Lo siento, no creí...

— No es tu culpa — Sonreí ya con los ojos cristalizados — Solo, él era alguien importante para mí... Lástima que yo nunca lo fui para él.

Este me miro fijamente, tomo mi mano y la apretó. No era algún tipo de coqueteo, lo mire como algo más... Consolador. Quite mis lágrimas y me levanté.

— ¿Te acompaño? — pregunto.

Ni siquiera me dejó hablar ya que se adelantó a pagar los cafés y me hizo señas para que lo siguiese. Vaya, esto sería incómodo...

...

Llegamos a casa, parecía que mis hermanos tenían un desastre adentro ya que se escuchan risas y un poco de gritos.

— Nos vemos ¿Mañana? — cuestione.

Asintió — Ahí estaré.

Se acercó para despedirse, besando mi mejilla y se separó para después pasar su mano por su cabello castaño medio largo. Se fue.

Suspire pesadamente. Pero mi respiración se detuvo al ver qué abrieron la puerta, era Finn, este al parecer iba a salir ya que traía una gorra y lentes en mano, su mirada choco con la mía. Intente decirle algo, alguna palabra... Pero nada salió.

Igual no iba a hacer mucha diferencia ya que solo me ignoro y se fue dejándome sola en el pasillo.