Últimamente no se solían ver, sólo se miraban y se saludaban cuando se cruzaban por la aldea. No volvieron a entablar una conversación y solo cruzaban un par de palabras.Sólo formalismos.
Era una rutina cada vez que se veían, la Senju se preguntaba por qué tanta distancia, ¿Había hecho algo al? ¿Dijo algo que le molestó? ¿Ya no quería saber de ella? La castaña revisaba entre sus recuerdos que pudo haber hecho mal, pero no encontraba alguna respuesta lógica.
Mientras ésta se preocupaba en esto, la rubia trataba de ordenar su mente, sabía que si le habían hecho daño una vez, podían volver a hacerlo, pero ella seguían sintiendo algo por la pelirrosa, no lo negaba, pero empezaba a sentir algo también por la Senju, lo que le tomo muy poco tiempo.
La Senju dentro de muy poco se iría de misión durante un par de meses, así que días antes, quiso aclarar las cosas, dejo una pequeña nota en debajo de la puerta, hubiera querido hacerlo de frente, pero las cosas estaban tan extrañas entre ellas, esperaba una respuesta, se fue a su casa, y pronto tendría su mochila lista para el viaje.
La rubia llegaba de un entrenamiento exhaustivo, tan cansada estaba, que sus ojos empezaban a cerrarse mientras caminaba a abrir la puerta de su casa, su madre rápidamente le abrió al darse cuenta de la presencia de su hija a afueras de la casa.
—¡Cielos, hija, estás herida y tienes un poco de fiebre!— exclamó la mujer preocupada por la apariencia de su hija. —Ven a la cama, recuéstate, traeré una toalla húmeda para tu frente— la llevó hasta su cuarto y le ayudó a acostarse.
Rápidamente hizo lo que había dicho, puso en su frente la toalla húmeda para que su temperatura bajara y trajo medicamentos junto con una sopa.
La chica comió y cayó rendida, su madre cada tanto revisaba su temperatura, no quería que se enfermara, últimamente la veía muy perdida, creía que era por el entrenamiento, pero cuando leyó la nota que habían dejado debajo de su puerta, lo había entendido todo.
[...]
La chica había despertado, estaba totalmente reparada, se estiró y bostezo, aún con los ojos entrecerrados se dirigió a la ducha y se bañó.
Salió de la ducha con una toalla en su cabeza, envolviendo su cabello, y otra envuelta en su tronco, se dirigió a su cama, donde se encontró con un sobre encima de su mueble, curiosa lo abrió, y leyó la nota, la cual estaba escrita por una letra muy fina y delicada.
"Hola Ino, soy _____ Senju, últimamente he notado que las cosas se han puesto demasiado extrañas entre nosotras, la última cita estuvo bien, o eso creo, no sé si dije algo que te molestará, si es así, mis más sinceras disculpas, te escribo esto por que dentro de poco me marcharé de la aldea, tal vez por 1 o 2 meses, sólo quería decir que si quieres que hablemos, puedes decirme, cuídate.
Con mucho cariño:
_________"La rubia estaba sorprendida, rápidamente se cambió, y fue a donde la quinta, no sabía dónde encontrar a la chica.
Golpeó la puerta y una voz pronunció autoritaria habló "Siga".
Rápidamente hizo una reverencia.
—Hokage-sama ¿Sabe dónde podría encontrar a su hija?— ésta despegó la mirada de su escritorio por un momento y dejó la pluma en la mesa.
—¿Por qué tanto interés, Ino?¿Acaso mi hija tiene algo contigo de lo que yo no me he enterado?— Tsunade insinuó algún romance entre ambas.
La rubia con nerviosismo rió, rápidamente negó con la cabeza.
La Hokage sonrió. —Está entrenando— indicó la mujer mientras volvía a su trabajo.
—Gracias-— rápidamente hizo una reverencia y se alejó de allí en busca de la Senju menor.
Llegó al patio de la academia ninja, donde muchos solían ir a entrenar cuando los estudiantes no estaban, pero en el lugar no se veía a nadie.
—Maldición ¿dónde estás?— se preguntaba a si misma tratando de encontrar a la castaña.
Un estruendo se escuchó en el fondo del lugar, acelerada se dirigió al lugar.
Allí estaba la castaña, levantándose del suelo.
—¡____________! Dios mío ¿Te encuentras bien?— se aproximó preocupada Ino.
La castaña se sorprendió al escuchar la voz de alguien más en el lugar. —¿Ino?¿Pero qué haces aquí?— habló la ojimiel mientras limpiaba algunas gotas de sudor que se deslizaban por su frente. —Estoy bien, no hay problema. Digamos que aún no puedo manejar mi nueva técnica por completo— rió algo nerviosa y avergonzada.
A la rubia se le escapó una sonrisa —Pronto lograrás controlarla por completo— se acercó al rostro de la castaña y quitó algunos mechones que cubrían su rostro. La temperatura de la Senju subió.
—Leí tú carta— sonrió la rubia alejándose del rostro de la castaña. —Oh…— la Senju no sabía que decir —Disculpa si me he completado extraño, tuve que organizar y comprender muchos de mis sentimientos...— la castaña sonrió. —No te preocupes, entiendo.
Ino sintió un pequeño alivio en su pecho —¿Qué te parece si antes de que te vayas tengamos una segunda cita? Quiero compensarte— la ojimiel sonrió.
—Me encantaría estar contigo antes de irme— confesó la castaña.
—Entonces mañana nos vemos. Mucha suerte— con delicadeza la rubia beso la mejilla de la Senju, quien casi moría de emoción.
Ambas esperabas con ansias su encuentro.
¿Todo resultaría bien?
[...]
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Enamorada de una Flor | Ino Yamanaka y Tú [Yuri +18]
Fanfic"Si me guardas en tu corazón, yo te guardaré en mi alma" HISTORIA 100% ORIGINAL PORTADA 100% ORIGINAL Escenas +18, se pide discreción por parte del lector No se aceptan adaptaciones sin permiso del autor, todos los derechos reservados. Inició: 20/01...