Hasta que nos volvamos a ver [Eyeless Jack X Jeff the killer]

Escucha con atención

Publicado:12/02/2021

1:16 A.M (Colombia)

Cuando regresa el aura es pesada. Aún es de noche, lo primero que oye son los pasos lerdos de la anciana mientras tararea una canción de cuna, se oye el traqueteo de sus pasos contra la madera desde arriba. La señora Jones debe estar en su habitación cuidando de su colección de muñecas.

Todas las luces estaban apagadas, la mujer no las necesita siendo ciega después de todo. Jack camina despacio, no tiene ningún afán, entre sus manos hay un órgano a medio masticar, lo destroza a enormes mordiscos deleitándose como si fuera un manjar.

Va directo a la habitación de Jeff, es lo único que a él le importa. Él abre y entra, Jeff está recostado contra la cama, rodeado por la luz de la luna que se escabulle por la ventana y los árboles afuera, el aire es denso y frío como lo será en la madrugada. El "silencio" lejos de llenarlo de paz le aterraba. Jack oía como un ronroneo el canto de la mujer dado a la lejanía al estar ella en el segundo piso; también se oían los roedores esconderse entre las sombras por los huecos en el concreto y el croar de las ranas no muy lejos... Incluso podía oír al viento silbando monótono y casi lúgubre.

Jack está congelado en su lugar, su rostro parece mirar a Jeff, pero sin lugar a dudas no lo puede precisamente ver. 

Hay un zumbido... 

Es una mosca.

Camina, se sienta en la esquina de la cama, acaricia la mejilla de Jeff con sus guantes negros aún puestos.

Jack lo besa de forma casta, y la mancha negra que de sus ojos brota comienza a descender a borbotones de sus cuencas. Jeff se quejaría con asco si tan sólo estuviera despierto en este momento. 

En su pecho florece la necesidad del querer volver a ver, sólo para ver los ojos de Jeff. aunque probablemente si los viese únicamente percibiría el dolor que está sufriendo en un rincón cerrado de su cerebro.

Jeff lo había dicho varias veces que hubiese deseado morir a manos de su hermano, en lugar de seguir con vida agonizando por la infección de una bala en el abdomen... Siempre en un modo de burla o broma, sus palabras varias veces llegaron a molestar a Jack, pero nunca fue algo serio.  

 Con sus manos enguantados sostiene de ambas mejillas a Jeff, y lo besa otra vez, ahora como si se muriera de hambre, tanto metafórico como literal, sus dientes no midieron su trato, llegó a rasgar un poco la piel de los labios agrietados de Jeff haciéndolo sangrar. 

Jeff The Killer no le devuelve el beso porque está muerto...

La ausencia en su respiración fue lo primero que Eyeless Jack había notado una vez entró a la habitación.

Jack no puede llorar, sus manos magullan el rostro pálido de Jeff, anhela que despierta, está esperando a que despierte y como es costumbre se queje de sus tratos. Sólo se fue por una horas y ahora el cuerpo de su amado está tan frío como el aire allá fuera. 

Se aparta,  se ha comido toda la piel entre los labios y la mandíbula del asesino. Jack olfatea el olor acre de la sangre, quiere gritar pero su cuerdas vocales tiran con fuerza evitando que emita sonidos correctamente. 

No lo entiende.

No lo hace.

¿Por qué?

¿Por qué?

Hay un zumbido...

Es una mosca. La mosca se posa sobre el parpado cicatrizado de Jeff, frota sus patas e intenta colocarse por sus pestañas negras para llenar sus ojos de larvas. 

Jack  vuelve a besar el cadáver como si fuera a reanimarlo, como si entre sus suspiros pútridos por el mal aliento pudiera darle un poco de aire a sus pulmones para que Jeff volviera vivir. Pero no tiene ese don. 

Jeffrey Woods no murió a causa de la infección o del disparo eso es seguro... Si tan sólo pudiera ver quizá habría notado los evidentes hematomas y el color aún morado con signos de asfixia en su cuello, quizá Liu le visito o quizá y más probable la señora Jones se encargó del asunto. Pero este es un detalle que Jack no podía percibir dentro de su campo de "visión".

Eyeless presiona su rostro contra su pecho, no hay latido, su corazón está inerte dentro de su pecho, Jack quiere sacarlo y volverlo a bombear, se contiene.

El castaño no puede llevar un cuerpo sin vida a Su Dimensión, no puede, aunque quiere. Se queda ahí un rato más, con un poco de fuerza reposiciona el cuerpo frío del contrario, finge acogerlo como antes cuando juntos dormían en cucharita.

Se quedó así durante lo que fueron horas, la voz de la señora Jones jamás paró de cantar, se escuchaba lejos. Jack susurró suave.

-G-Go to... Sleep-

Jeff no despertó ese día, ni el día después de ese... Y queda decir que nunca lo va a hacer...