Hasta que nos volvamos a ver [Eyeless Jack X Jeff the killer]

Abandono(?)

PUBLICADO:18/01/2020

2:24 pm

Cuando la mañana apenas el sol se asomaba por la ventana, Jeff apenas se digno a levantarse, es que hacia tanto tiempo que no disfrutaba de esto, siempre escapando de los oficiales, en serio que necesitaba relajarse y de olvidarse de que era un asesino.

¡Va! ¡Pero qué está diciendo? ¡El es Jeff The Killer! ¡El mejor asesino de la historia! A penas unos días desde que recibió el jodido disparo, el dolor aún era fuerte, pero más tolerable... La cojera le jodía todo. Como detestaba eso.

"Toc- Toc" se escucha en la puerta, Jeff mira en su dirección desganado. No quieres pararse y abrir, seguro es esa anciana de la mierda. Claro, desde que se la pasa con Jack ha descubierto que es un ser imprudente, y un jodido fantasma frustrado.

-Muchacho, ábreme la puerta te he traído el desayuno-

Los ánimos de Jeff se subieron fugazmente, enseguida se levanto a abrirle.

La mujer tenía el plato en mano, tocino y huevos y una taza de café, tenía una sonrisa amable. "Si le adorno una de mis sonrisas sería más que perfecto" Pensó.

-Mi nieto me hablo de ti... Me dijo que estás herido de una pierna, espero te mejores, puedes quedarte tanto desees- Habló la mujer, Jeff estuvo a punto de cerrar de un portazo para dejar de ver a la anciana, pero no lo hizo.

Esas palabras lo transportaban a un recuerdo lejano de los cuidados de su madre, quién realmente fue una mujer muy cariñosa.

La anciana al no escuchar respuesta desvaneció su sonrisa y comenzó a caminar con una lentitud que parecía no avanzar en su andar, quizá para evitar tropezar dado a su ceguera. Jeff cerró la puerta con cuidado y volvió a la cama.

El día entero se lo gasto estando acostado ahí, a la espera de que el espectro 'ciego' llegase. Pero no se apareció ese día, ni el día siguiente a ese, ni el día después de ese...

Durante los siguientes días Jeff se mantuvo de los cuidados de la señora de edad, siempre trato de ser esquivo y descontrolar su impuesto de saltar sobre ella y enterrar su cuchillo repetidas veces en su cuerpo hasta que ya no pudiera moverse más.

-Sácame de aquí- Ladro hacia Jack, iracundo, el fantasma recién ingreso por la ventana, estaba bañado en sangre y en su manos un órgano que masticaba. Jeff estaba sentado en la cama con un lápiz y un papel, lo único que lo entretenía.

-¡Me dejaste al cuidado de esta vieja! Yo sólo quiero que me enseñes a disparar.-Habló, soltando el lápiz y frotándose sus sienes, Jeff estaba cansado mentalmente, abrumado, sus sueños cada vez más extraños que los otros. El garabato recién hecho en el papel, era el dibujo mal realizado de lo que parecía ser un chico.