Rutina

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Era un día soleado, el cielo era azul, los pájaros disfrutaban del clima, lastima que él clima era lo único "bueno" en años.
Abajo, en la gran ciudad de Tokio, entre los edificios que se caían a pedazos y las personas infectadas, en una pequeña tienda de convivencia se encontraban un chico peliverde con unas singulares pecas que cautivaban a cualquiera, junto a un peligris igual de encantador, ambos jóvenes buscaban entre los pasillos algo que pudiera rescatarse para la cena, él lugar era un desastre, había sangre e incluso un cuerpo sobre el mostrador sin cabeza y con algunos ¿Gusanos? devorando lo poco que quedaba de su cerebro, pensarán ¿Porque lo dejan pasar? ¿No les da asco?, La verdad era que llevaban 7 años acostumbrados a encontrarse con cosas peores que estás, vivir en un mundo apocalíptico como este era muy cruel.
Él peligris iba adelante asegurándose que él lugar estuviera solo mientras el peliverde vigilaba afuera, trataban de no hacer mucho ruido, ya que los zombies eran muy sensibles al sonido, cuando revisaron que todo estuviera en orden ambos chicos comenzaron a revisar los pasillos en busca de alimentos.

---- Suga Senpai aquí hay varios paquetes de ramen, podría alcanzarnos para algunos días!.... ----

Dijo él peliverde mientras metía los paquetes a su mochila pero no terminó de hacerlo cuando el mayor lo detuvo con una mano.

---- Yamaguchi... Devuelvelos, no necesitamos tantos, sólo toma los suficientes para hoy, sabes nuestras reglas..... ----

Él peliverde hizo caso y devolvió la mayor parte, casi olvidaba una de las reglas importantes que los han hecho sobrevivir tanto tiempo, aveces era muy distraído.
"No importa si hay demasiada comida, sólo tomaremos lo que necesitamos, por si algún otro sobreviviente pasa por aquí y necesita comida también encuentre, compartir es primordial".
Era algo que siempre se repetían, esto les hacía sentir más humanos.
Cuando terminaron de recoger lo necesario para la cena ambos chicos se dirigieron a la salida, él peligris iba adelante nuevamente con un arma al lado.

--- Yamaguchi...---

--- Si..---

Yamaguchi retrocedió y puso una pequeña manta en el cuerpo de la persona fallecida, específicamente tapando su cabeza.
Ambos se entendían y tenían varias costumbres que no les podían faltar en cada salida, está era una de esas.

--- Descansa...---

Fue lo último que dijeron para luego salir del lugar, aunque estaban acostumbrados eso no significaba que no les doliera ver esa clase de situaciones, más para Suga quien todas las noches oraba con las personas que se encontraban en el camino, quizás era tonto pero no podían evitar sentir su pena.
No tardaron demasiado en llegar a su "refugio" que era una pequeña casa no muy lejos de la tienda de convivencia, no sé toparon con zombies ya que él lugar estaba algo escondido en una colonia tranquila, al llegar fueron bienvenidos por un chico ligeramente más alto que ambos y un porte algo intimidante, aunque sólo era por fuera, ya que su personalidad era totalmente opuesta.

--- ¡Suga!... ¿Porque tardaron tanto?...... ¿Encontraron algo bueno? Pasen pasen, antes de que vengan ---

Dijo algo temeroso haciéndose a un lado para que ambos pudieran pasar, luego cerró la puerta de inmediato, esté sujeto era especialmente más temeroso a los zombies que todos los que habitaban allí, pero nadie lo culpaba, todos eran temerosos en el interior solo que no lo demostraban tan abiertamente como Asahi.

--- Tardamos lo necesario Asahi, los chicos no se equivocaron, esté lugar es tranquilo.... ---

Decía el peligris para tranquilizarle.

--- Oh Asahi encontramos ramen, y lo mejor de todo es que es picante!... ---

--- ¿Encerio?, Oh dios, se sacaron la lotería! ---

Ambos chicos se encontraban celebrando, la verdad llevaban una semana comiendo atún enlatado, él ramen era la gloria misma.
Suga sólo reía, eran unos exagerados, deberían ser agradecidos con tener aunque sea atún para comer, pero que más da, al menos estaban emocionados por algo.
Terminaron haciendo la cena Suga y Yamaguchi, ellos siempre estaban a cargo de las comidas, dado que esas eran sus tareas principales, cada persona en esta casa estaba a cargo de algo importante, era como si se hubieran dividido en equipos, no era algo malo, sino que este sistema los ayudaba a convivir y sobrevivir en paz.
Y ahí estaban, justo cuando terminaron la cena llegaron aquellos "exploradores", cuatro chicos bien armados y hasta cierto punto intimidantes, sin ellos no estarían seguros.
Entre ellos estaba su líder Daichi quien portaba algunos cuchillos, los cuales chorreaban sangre.
Kageyama un chico serio quien siempre se la pasaba discutiendo y compitiendo con uno más bajito llamado Hinata, aunque estuvieran en el mismo equipo eran casi imposibles de controlar.

--- ¡Tsukki!!!.....---

Y claro no podría faltar Tsukishima, él mejor amigo de Yamaguchi, o al menos para Yamaguchi así lo era.
Habían estado juntos desde antes del apocalipsis.

--- Cállate Yamaguchi, estás siendo ruidoso......---

--- Ha... Lo siento... Tsukki...---

Todos se sentaron en la mesa a descansar dado que ser "exploradores" era un trabajo cansado, debían ir afuera y asegurarse de que los alrededores fueran tranquilos, además de encontrar posibles lugares de escape en caso de emergencia, y claro también eran ellos quienes interactuaban con otros sobrevivientes, sin olvidar el constante riesgo a ser infectados por zombies.
Luego de unos minutos sirvieron la comida, a Yamaguchi le tocaba llevarles la comida a Tanaka, Nishinoya y Asahi, quienes eran parte de "la guardia", eran quienes vigilaban 24/7 la casa, obviamente entre ellos cambiaban sus turnos para dormir y así, como no podían parar la vigilancia siempre les llevaban la comida al balcón.

--- Chicos hoy hubo ramen! Disfruten! ---

Los chicos quedaron asombrados, era como si salieran brillitos de ellos, todos hicieron una reverencia en agradecimiento y se pusieron a comer felices.

--- ¡Es delicioso! ---

--- Si! Suga tiene un sazón increíble! Estoy seguro que si fuera una mujer ya la estuviera cortejando!---

Mencionó él chico rapado mientras comía satisfecho, hasta que su compañero le dio una palmada en la espalda para que se callara.

--- Tanaka, Daichi te escuchará! No quieres verlo molestó!---

Dijo Nishinoya para luego seguir comiendo.

--- Cierto, no quiero...---

Respondió Tanaka, mientras recordaba aquella vez en que mencionó que Suga era muy atractivo, Daichi casi lo mató con la mirada, sintió un escalofrío de recordar.
Asahi y Yamaguchi sólo reían.
Yamaguchi se despidió y bajó a el comedor para sentarse a un lado de Tsukishima, luego de servirse comenzó a comer.

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