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En medio de la fría y espesa noche, caminando tambaleante hasta llegar a su casa, tomando torpemente las llaves para abrir la puerta y entrar en la oscuridad de su hogar, desprendiendo un olor muy fuerte a alcohol y con una botella en la mano cerró la puerta de tras suyo y al no poder ver nada tropezó en el corredor , provocando que una infante de tan solo 8 años se despertara, alertandola de que había vuelto.

Con cuidado y sin hacer mucho ruido se levantó de su cama y quitó el seguro de su puerta el cual la protegía de sus posibles golpes.

Llendo de puntitas para no ser descubierta hasta llegar a la sala para ver a aquel hombre con título de padre tirado con una botella rota a lado y con aquel hedor tan repugnante, aunque a pesar de todo no pudo dejarlo ahí, pues bien o mal era su padre.

Yashiro: papá... Vamos levántate (dijo la pequeña quien a duras penas podía levantar su brazo)

Fue un gran error, de inmediato fue jalada de sus cabellos crema y azotada hacia una pared cercana mientras aquel hombre se levantaba.

Padre de Yashiro: escoria... Deja de molestar (pronunció mientras se aproximaba a la menor)

La pequeña solo podía correr del miedo y pavor que sentía, ¿Acaso había hecho algo malo? ¿De que era culpable?¿Acaso era un delito haber nacido?¿Era un delito vivir?¿O era porque se parecía mucho a su madre?, Se pregunto mientras corría hacia su cuarto, pero a causa de la espesa oscuridad que la rodeaba no pudo evitar chocar con algo y caer, ahora estaba a merced de aquel hombre que alguna vez fue su padre el cual se había convertido en su peor pesadilla. Con un bote extraño en la mano y caminando a paso lento y tambaleante llegó hasta la pequeña ojirubí.

Padre de Yashiro: ojalá hubieras muerto... (Y con fuerza arrojó el líquido de aquel bote sobre la pequeña)

Yashiro: ¡¡NO!! (Grito de repente y observando a su alrededor que estaba en su cuarto) fue... Solo una pesadilla.

Pesadilla o recuerdo, la mente juega sucio con los de corazón débil y está no era excepción, faltando solo tres días para su operación y estando teniendo la misma pesadilla desde entonces, ¿Acaso le aterra tanto la idea?¿O siente temor el volverlo a ver?, Aquel hombre indigno de ese derecho que por desgracia era legítimo, podría llegar en cualquier momento y cuando él lo querase, pero jamás volvería a ser su padre.

/// En la mañana ///

Yashiro: Etto... ¿Porque estás aquí? (Pregunto con molestia mientras veía a un joven de cabellos castaños frente a su puerta)

Amane: que no puedo visitar a una amiga...? (Pregunto con picardía)

Yashiro: en primera no somos amigos y segundo no hace falta que vengas todos los días!! (Dijo irritada, pero a la vez aliviada de tener compañía)

Amane: compremiso... (Musitó ya que estaba por sentarse en el sofá)

Yashiro: lo dices ya que entrantes... (💢) Eres imposible (dijo cerrando la puerta y llendo hacia el sofá)

Amane: en fin... Que haremos hoy... Yashiro? (pregunto mientras se ponia comodo)

Yashiro: ire al super a comparar algunas cosas que hacen falta en la casa (respondio mientras se hacia unas trenzas)

Amane: enserio? pero sabes que no deberias salir ¿no?, después de todo tu no estas en la ciudad en estos momentos (dijo susurrante en el oídoe contrario, provocando que a cierta joven se le erizara la piel)

Yashiro: deja de hacer eso!! (dijo mientras intentaba darle un golpe el cual fue evitado por el contrario)

Amane: fallaste! (Dijo burlón provocando que la joven lo atacara más)

El Misterio de La DoncellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora