Todas las noches tengo el mismo sueño, me encuentro frente a sus ojos verdes parece que puede mirar a través de mi, me siento tan inquieta al estar cerca de el, sin embargo tan cercano, tan mío, nunca he logrado decirle nada, el siempre desaparece n...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
He pasado trabajando en la empresa ya durante un mes, y cada día mi jefe es más insoportable, me deja tareas absurdas, he pasado colocando todos los archivos por orden alfabético desde el año 2010, ya voy un mes y aún no termino a veces siento que me odia, pero no entiendo la razón.
Al despertar me siento extraña, a pesar de levantarme temprano mi cuerpo se siente débil, es posible que tenga algo que ver con el ogro de mi jefe, me indicó que debía sacar copias de unos proyectos debido a lo cual ayer salí tarde y comenzó a llover, creo que tengo algo de fiebre, pero sí de por si me odia no sé qué haría si faltara al trabajo, al ver que no existe escapatoria, entro al baño al mirarme al espejo noto unas grandes ojeras alrededor de mis ojos, estaba consciente que el maquillaje no sería de ayuda este día, así que la mejor opción que tenía en este momento era darme un baño, después de salir me maquillo lo mejor que puedo, me colocó un pantalón de tiro alto color negro, con un top blanco, y una chaqueta tres cuartos, tacos negros para complementar el traje, no desayuno nada porque no tengo hambre, me siento débil, hoy por fin debo terminar con los archivos.
Al llegar a la empresa saludo a los guardias, ellos me devuelven la sonrisa, al llegar subir a la oficina, veo que no ha llegado nadie, así que recuesto mi cabeza en el escritorio, cuando escuchó pasos me levanto enseguida, y veo esos ojos que intentan matarme
- Señorita Clark, tengo que ordenarle que duerma en su casa, mi empresa no es lugar para dormir
- Lo siento Sr. Sanders - trato de pararme, pero me siento muy débil, tanto que mis piernas empiezan a fallar lo que ocasiona que deba sostenerme del escritorio para no perder el equilibrio.
- No me diga que otra vez no desayuno, acaso no puede cuidarse sola- me dice enojado, estoy segura que si las miradas mataran yo estaría tres metros bajo tierra.
- Disculpe, no volverá a pasar
- ¿Abril estás bien?- dice Benjamín acercándose
- Si tranquilo me iré al archivo espero hoy terminar con los documentos
- Espera- se acerca a mí y me toca la frente
- Tranquilo estoy bien, solo no pude descansar- le sonrío levemente, después de todo no era una mentira, solo una verdad a medias.
- Pero tienes- lo interrumpo
- No tranquilo estoy bien
Pude ver que mi jefe marcó su mandíbula cuando Benjamín me toco la frente, es posible que la fiebre me altere mis ideas, parecía estar en cierto modo celoso, rápidamente me digo a mi misma que eso es imposible, me dirijo al archivo, siento que mis ojos comienzan a pesarme, y mis pasos se vuelven lentos, me paso el día arreglando los archivos colocándolos en el sitio correspondiente, como aquí es oscuro, no me di cuenta de lo rápido que pasó el tiempo, cuando estaba por terminar, mire mi celular, y vi que tenía varias llamadas perdidas de Iker, al revisar la hora ya eran las 7pm.
