Abrí los ojos y me encontré con una sombra negra y enorme, lo que me asustó tanto que salté de la cama, doblándome el pie al caer. La persona que me había despertado soltó una carcajada.
—¿Tan feo soy? —dijo una voz masculina.
Me froté los ojos y allí estaba Ron, despeinado y recién levantado. Me quedé observándolo, pero volví a la realidad cuando él sacudió su mano frente a mi cara.
—Vamos, que vas a llegar tarde, pequeña —me despeinó el cabello con una sonrisa, y sentí mis mejillas ruborizarse.
Asentí, dándome vuelta en busca de un atuendo rápido y sencillo, pero esta vez quería sorprender a Ron, así que decidí arriesgarme un poco más. Me puse una falda a cuadros negra, una camiseta negra que metí dentro de la falda, y unas botas negras. Recogí mi cabello en un moño, me apliqué un poco de máscara de pestañas y gloss, y salí de mi habitación.
Bajé las escaleras y encontré a todos desayunando mientras Molly regañaba a los gemelos por usar magia.
—Buenos días... —saludé tímida.
—¡Buenos días, ____! —me respondió Molly con entusiasmo—. ¿Lista? ¡Hoy será tu primer viaje a Hogwarts!
—Y nuestro último, mamá —se quejaron los gemelos en tono burlón.
—No me lo recuerden, o empezaré a llorar —respondió Molly con un suspiro.
Fred y George se levantaron para abrazarla, y ella, aunque los regañó suavemente, los abrazó de vuelta. Ver esa escena me hizo extrañar mucho a mi propia madre.
—Siéntate, ____, y come lo que quieras —me invitó Ron, que llenaba su plato sin escatimar.
Me senté junto a Hermione y Ginny. La mañana pasó volando, y antes de darme cuenta, ya estábamos rumbo a King's Cross.
[...]
—____, ¡no olvides tu maleta! No cometas el mismo error que yo en mi primer día —me gritó mi padre mientras corría tras de mí para no perder el expreso.
—Tranquilo, papá, creo que soy más organizada que tú —respondí riendo.
Él logró alcanzarme y me abrazó con fuerza.
—Cuídate mucho, ¿sí?
Asentí, le di un beso en la mejilla y seguí mi camino. Subí al tren junto a Fred y George, siguiéndolos hasta el compartimiento donde estaban Hermione, Harry y Ron. Al entrar, los tres me sonrieron. Justo cuando me disponía a sentarme junto a Hermione, Harry se apresuró a ocupar el asiento, dejando el espacio junto a Ron libre para mí. Avergonzada, me senté junto a Ron, sintiendo mis mejillas ponerse tan rojas como el cabello de los Weasley.
—Ponte cómoda, ____, este va a ser un largo viaje —dijo Harry con una sonrisa.
—¿No hacen nada para que el viaje no se haga tan largo? —pregunté, imitando su tono al pronunciar la última palabra.
—Bueno, a veces charlamos de nuestras vacaciones o nos quedamos dormidos —respondió Ron.
—¿Y eso es todo? —pregunté, esperando algo más emocionante. Ellos se miraron y asintieron al unísono.
Suspiré, saqué papel y lápices, y les propuse jugar "tutti frutti".
—¿Conocen el juego "tutti frutti"? —pregunté. Hermione y Harry asintieron, pero Ron me miró con confusión.
Después de explicarle las reglas a Ron, repartí los materiales.
—Primero nombres, luego... ¿Apellidos? ¿O sería demasiado difícil?
—Nah, juguemos con todas las categorías —dijo Ron con entusiasmo, ansioso por empezar y ganarle a Harry.
—Perfecto. Animales, países, colores, F o V... —Ron me interrumpió.
—¿F o V?
—Frutas o verduras, cabeza de chorlito —respondió Hermione, exasperada—. Y por último, objetos y... puntos.
—Los puntos, Ron, por si te preguntas, sirven para llevar la cuenta de cuántos puntos ganas por letra, así que podrás ver quién gana al final —aclaré.
Él asintió, y empezamos a jugar. La primera letra fue la H.
—¡Tutti frutti! —gritó Ron, interrumpiendo el turno de Harry, quien se quejó.
Ron comenzó a decir sus respuestas.
—Nombre: Hanna.
—Harry —dijo Harry.
—Hermione —respondí yo.
—Harry —contestó Hermione.
—Harry y Hermione, cinco puntos cada uno. Ron y yo, diez —dije, anotando en la hoja—. Siguiente.
—Apellido: Harrison. ¿Y ustedes?
—Hermione —dijo Harry.
—Hermione es un nombre, no un apellido.
—No, lo es, mi vecino se apellida así —Harry insistió, seguro de lo que decía.
—Sí, claro —dijo Ron, sonriendo.
—Yo puse Hagrid —dijo Hermione, suspirando y lanzando una mirada de reproche a los chicos.
—Y yo, Harris —agregué, y le indiqué a Ron que continuara.
—Ah, sí... Animal: hocicorto sueco.
—¿Qué es eso? —pregunté, confundida.
—¡Cómo no se me ocurrió! No respondí nada —dijo Harry, golpeándose la frente.
—Yo puse hipogrifo —respondió Hermione.
—Y yo, hipopótamo —dije, un poco avergonzada.
Noté que mientras ellos respondían con palabras del mundo mágico, yo seguía en el mundo muggle. A veces, me sentía completamente fuera de lugar. Seguimos anotando los puntos y avanzamos.
—País: Hogwarts —dijo Ron.
—Hogwarts no es un país, Ron —reí—. Yo puse Honduras.
—Yo iba a poner Haití, pero Ron no me dejó tiempo —respondió Harry, rodando los ojos.
—Sí, claro, lo dices porque me acabas de ver la hoja —rió Hermione.
En colores, ninguno de nosotros encontró opciones con la letra H, aunque Ron intentó poner "hueso". Para frutas o verduras, todos coincidimos en "higo". Y en objetos, Ron puso "hacha", Hermione optó por "huelga", y Harry y yo, "hoja".
Seguimos jugando hasta que agotamos el abecedario. Después, los cuatro comenzamos a quedarnos dormidos. Harry y Hermione se acomodaron para estar cómodos, y Ron se quedó dormido en mi hombro. Lo observé por un momento antes de quedarme dormida también.[...]
Hermione me sacudió para despertarme, avisándome que ya casi llegábamos a Hogwarts. Sentía mariposas en el estómago, no sabía si por el nuevo comienzo o por tener a Ron tan cerca de mí. Me levanté, lista para cambiarme, pero al salir, un chico salió de su compartimiento sin mirar y chocamos.
—¡Mira por dónde caminas, idi...! —se detuvo al verme y me dedicó una mirada evaluadora—. Preciosa —dijo con un silbido mirándome de arriba hacia abajo.
Rodé los ojos, lo ignoré y seguí caminando, pero antes de entrar al baño, me giré y él seguía mirándome.
—Es Draco Malfoy, MI Draco Malfoy, así que aléjate de él —dijo una chica castaña, mirándome con desprecio.
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Actualizado 30/08/24
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Amigos, pero algo más -Ron Weasley-
Fiksi Penggemar____ es hija de un amorío viejo de Remus Lupin. A sus 16 años, a un año de la guerra, su madre decide abandonarla. Por lo cual, sólo lo queda su padre, a quien no ha visto ni hablado nunca en toda la vida. N.