VENGANZA ©

13. ESPOSAS

Pequeños rayos de sol entran por las grietas y los huecos en las paredes de la vieja y asquerosa nave. Escucho ruidos de animales, probablemente sean ratas y algún que otro insecto.

- Vanessa.

Escucho mi nombre detrás nuestros. Dereck se pone delante mío para protegerme. Hace boxeo así que es capaz de defenderse perfectamente. Pero no quiero que se meta en problemas. Sé de quién es esa voz. La reconocería en cualquier parte. Salgo de detrás de Dereck y me pongo delante suyo con los brazos cruzados en dirección a la voz procedente de la oscuridad. Aunque no vea la silueta, digo su nombre.

- Lucas.

Sale de la penumbra y veo su sonrisa malévola.

- Foster.

- Miller.

¿Cómo es posible que sepan sus respectivos apellidos? ¿Acaso se conocen?

- Si te lo preguntas, sí. Nos conocemos. - me dice Lucas con arrogancia.

- ¿De qué va esto? - le pregunto.

- Nada.

- Dereck.

- No te preocupes, querida. - empieza Lucas. - Yo te lo explico.

- Diga lo que diga, va a ser mentira. Si confías en mí, te lo contaré cuando estemos en un lugar seguro. Me quedaré en tu casa hasta que todo vuelva a la normalidad. Entonces lo contaré. Te lo prometo.

Le miro a los ojos y veo la confianza, en calor y la seguridad que desprende, además de una pizca de miedo.

- Está bien. - le digo. - Tranquilo. Confío en ti.

- Tu querido Dereck y yo somos viejos amigos.

- Tú y yo no somos nada, Miller.

- Venga. No seas bobo. - Lucas se acerca a nosotros y se queda frente a Dereck. - No podías vivir sin mí. Era tu mejor amigo.

- Eras, Lucas.

- Tienes que dejar atrás el pasado. Ya no somos unos críos.

- No tenías derecho.

- Oh, claro que lo tenía. Hice lo que debía hacer, pero hubo un... inconveniente relacionado con el "amor". Entonces te pusiste tinto y cabezón y cierta persona terminó cediendo. Ya sabes a qué me refiero.

- ¡CÁLLATE!

Lucas no se sorprende de su respuesta.

- Lucas. - le digo llamando su atención. - Mi madre. Dónde está.

- ¿Cómo se piden las cosas, preciosa? - dice acercándose a mí y levantando mi barbilla con su asquerosa mano. - Me gusta el look de hoy. Toda entera de negro. - dice examinándome con lujuria. Miro a Dereck y veo que se está poniendo rojo de ira. Si no hago que se calme, le saltará al cuello en cualquier momento. Le agarro entonces la mano sin que Lucas me vea. Yo sigo mirando a los ojos al imbécil que tengo delante para que no se de cuenta de lo que voy a hacer ahora.

Lucas me coloca la mano en la cadera y mira a Dereck. Éste camina hacia atrás, dejándome indefensa con Lucas. O eso es lo que él cree. Cuando se acerca para besarme, le doy una patada en sus partes íntimas y cae de rodillas. Es entonces cuando le doy un rodillazo en la cara, escuchando un "crash". Creo que le he roto la nariz. Mejor. Dereck se acerca a mí dándome un beso en la sien y luego poniéndose detrás de Lucas levantándole la cabeza por el pelo y agarrándole las manos con una sola para que no le pueda hacer nada. Está inmovilizado.

- Bien, Lucas. - Empiezo. - Creo que nos has subestimado. Ahora si no te importa, dinos dónde está mi madre. Por las buenas... - y es entonces cuando saco mi arma de mi pantalón y se la pongo en la frente. - o por las malas.