El Costo De La Fama

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Hace unos años atrás dos adolescentes se enamoraron desde el primer momento que se vieron.

Jeon Jungkook tan solo tenía 16 años cuándo conoció a Park Jimin de 17 años, era hermoso.. bueno aún lo es.

Jimin era un chico que le gustaba estar en el teatro, amaba actuar en esas obras de escuela pero lo que más le fascinaba era cantar cada año en las despedidas de los chicos de último curso.. le prometió al director seguir haciéndolo hasta que pudiera.. sus amigos siempre pensaron que Jimin llegaría a ser uno de los mejores cantantes o el mejor actor del país pero no.. hasta allá no llegó.

Jungkook era un chico que desde muy pequeño estaba en la televisión.. era modeló de ropa y calzado, también aparecía en algunos comerciales de bebidas, comidas, juguetes y otras cosas más que le dieron la fama suficiente para entrar en un concurso de canto a sus 16 y en esa audición conoció a Jimin.

El que los viera ahora y en el pasado quedaría sorprendido del drástico cambio de ambos.

-¡Jimin apúrate, Jungkook te espera!–Dijó una chica con afán.

-Ya voy–Jimin le sonrió con su encanto.

-¿Que tanto te miras?–Preguntó una voz masculina. -Eres feo de nacimiento...

-¡Cállate idiota!–Jimin río divertido y le mandó un cojín. -Levantate y llévame...

-Que pereza–El hombre se sentó serio. -Me veo increíble para nada.. nadie me verá..

-Yo también me veo hermoso, pero solo me importa que Jungkookie me vea..

-Pero eso es a ti, pensé que saldría en televisión o en las redes... pero no, de milagro aparecere en las fotos de recuerdo...

-Tae dile a Hobi que deje de renegar y me llevé al altar.. es mi hermano mayor–Jimin se quejó.

Tae se levantó y puso sus manos en su cintura como jarra.

-Park Hoseok, levanta tu apestoso trasero de ese puto sillón y lleva a Minnie al altar–Exigió Tae.

-Te faltó golpearme–Hoseok se levantó y se arregló el traje. -Y no te enojes, le hará daño al bebé..

-Vamos–Tae suspiró con una pequeña sonrisa y salió de la habitación.

Jimin sonrió feliz y salió de la habitación en compañía de Hoseok.

-Enserio Jimin te ves feo, el traje rojo te quedaba mejor–Hoseok frunció el ceño y metió las manos en sus bolsillos.

-Tambien te amo, además no me pondré un traje rojo para mi boda–Jimin se paró en la puerta que daba al jardín. -Ya es hora...

Hoseok dejó que su hermano lo tomará del brazo y salieron.