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Jimin estaba tan concentrado en su llanto y en su dolor que no se dio cuenta que su hijo había entrado al baño... solo reaccionó cuando se abrió la puerta de la ducha.

-Papá–MinGuk lo quedó mirando.

Jimin se asustó y dejó de llorar, cerró la llave del agua y se acercó a su hijo.

-¿Que pasa mi amor?–Le preguntó Jimin con la voz llorosa. -¿Tienes hambre?.

El pequeño negó y lo abrazó.

-Vamos.. tenemos mucho que hacer cariño–Jimin lo agarró fuerte y se levantó con él. -Papi se fue y no te pudiste despedir de él...

-Pa.. papi–MinGuk balbuceó.

Jimin dejó a su hijo en la cama y se arrodilló para verlo.

-Haré que hables... talvez esto es mi culpa por todo lo que te hago pasar con papá kookie, pero ya no mas.. buscaré ayuda en otro lugar y hablaremos por horas los dos–Jimin le dio un beso en la mejilla y lo hizo sonreír. -Papá Jimin promete que harás que hables...

Jimin se levantó y se decidió que no era tiempo de llorar.. fue al closet y buscó ropa para volver al baño y poder quitarse esa ropa mojada. Una vez se cambió volvió a la habitación y vio a MinGuk acostado sobre las almohadas abrazandolas, suspiró pesado al darse cuenta que eran las que ocupaba Jungkook por las noches.

-Oye cariño ayúdame a recoger tus juguetes y los de tu hermana–Le pidió Jimin con cariño a su hijo.

MinGuk asintió y se bajó de la cama para tomar la mochila que le ofrecía su papá.. se sentó en la alfombra y empezó a meter los juguetes en ella.

Jimin abrió el closet y sacó una maleta que usaba hace mucho para llevar sus cosas hacia sus clases de baile.. pero ahora no iría a bailar... o bueno... si iba a hacerlo, iba a bailar una pieza de baile solo y sin público, con una melodia melancolica y sin saber como será su final.

-Esto es por el bien de mis hijos–Se dijo para sí mismo mientras metía la ropa de sus hijos en la maleta.

Jimin buscó unas pocas prendas suyas y las metió a la maleta, solo fue ropa interior y dos suéteres... fue a la mesa y tomó pañales, crema, talco, losiones y todo lo que utilizaba la bebé.

-Ya papá–MinGuk le dio la mochila.

-Okey, quedate con tu hermana mientras bajó y miró quien está en casa–Jimin se inco y lo acarició. -No salgas de aquí y sólo quedate.. si tu hermana se despierta mesela que yo no me demoro...

MinGuk asintió y Jimin le dio un beso para irse.. tranquilamente bajó y no vio a nadie, fue a la cosina y vio a Momo cosinando.

-Hola–Lo saludó ella.

-Hola, ¿quién está en casa aparte de nosotros y los demás empleados?–Preguntó Jimin haciendose el inocente.

-No creo que nadie más.. los señores Jeon se fueron a despedir al joven Jungkook al aeropuerto y después se irían a la empresa–Le dijo Momo tranquilamente mientras cosinaba. -¿Quiere que le haga una torta ya que no hay nadie en casa?.

-¿Debes salir hoy?–Le preguntó Jimin.

-Shi.. el mercado se acabó–Momo hizo un puchero y Jimin le sonrió, se le acercó y la abrazó. -¿Y esto?–Preguntó ella sorprendida.

-Momo gracias por ser una gran amiga... enserio no hay dos como tu en la vida–Jimin se separó y le sonrió. -Te tengo mucho cariño..

-Yo también, ¿esta bien joven Jimin?–Ella estaba extrañada de esta actitud. -Me habla como si se fuera a ir o a morir...

Jimin le sonrió negando y ella rio suave, el menor le dio un beso en la frente dejándola muy colorada y sólo salió sin decir nada.. subió al segundo piso y se encontró con su hijo mesiendo la cuna de su hija. Se acercó y la vio chupando dedo...

-Le doy de comer a tu hermana y nos vamos–Jimin alzó a MinGuk y lo sentó en la cama, alzó a la pequeña Chae y se sentó para alimentarla.

Jimin aún alimentando a su hija sacó una libreta del cajón de la mesa y la abrió para empezar a escribirle una carta a su marido.. quería que no lo odiara mas adelante por lo que haría pero era lo mejor para sus hijos.

Después de alimentar Chae la metió en el coche y la abrocho muy bien, tomó la maleta y se la cruzó en el cuerpo. Arrancó la hoja y la metió en el cajón de la mesa del otro lado de la cama.. sabía que Jungkook la vería ahí y ademas nadie más la leería.

Sin más espera tomó a sus hijos y se fue de la habitación... con un poco de dificultad bajó el coche, hizo que MinGuk se agarrara de la maleta que tenía colgada y salió de la casa. Le sonrió a los guardias y ellos le hicieron una reverencia.. sin levantar sospechas Jimin se alejó empujando el coche de su hija mientras su hijo mayor daba cortitos pasos.

El Costo De La FamaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora