Capitulo 05.

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Capítulo 5

Nishimura Riki

¿Donde estás, Sun Woo?

Es lo único que repito en mi mente una y otra vez, mientras camino esquivando a todos por los pasillos. Es raro, ni siquiera sé por qué estoy haciendo esto, el por qué me preocupo por él. A lo mejor es porque simplemente quiero ahorarme problemas luego, después de todo, soy su guarda espaldas personal por orden directa de la profesora.

Sí, es por la profesora. No hago esto por Sun Woo. Él no me importa en lo absoluto, después de todo no es mi amigo y no me agrada, ¿no? Es solo un trabajo más de la escuela, como un proyecto. Eso es un proyecto y la profesora me ha puesto a cargo de él. Sólo eso.

Diviso a los idiotas que han estado molestando a Kim. Los mismos idiotas que me han intentado joder a mí también cuando llegué, claro, al enterarse de mi cinturón negro y mis habilidades en cientos de deportes de defensa personal, dejaron su ideita de molestar. Pero Sun Woo no es como yo, él no es como los demás. No puede defenderse, sé hace el fuerte y duro, conmigo, pero su personalidad pasiva es lo único que los demás.

¿Sun Woo?

¿Desde cuándo lo llamo por su nombre de pila?

No somos amigos, ya lo dije antes. Solo hemos el último mes junto, nada especial. Es como cualquier compañero del salon y no me agrada ninguno exepto JungWon. Él no me agrada, no siento empatía por Sun Woo.

Joder, de nuevo ese nombre.

Aprieto los puños a medida que avanzo.

—¡Te encontré!

Detengo mi caminar y retrocedo unos pasos hasta terminar frente al salón.

—¿Me buscaba?

Lee HeeSeung. Tenía que ser Lee HeeSeung.

¿Él si se preocupa por Sun Woo? ¿Le agrada de verdad?

No tiene sentido, Lee no lo conoce. HeeSeung no sabe ni la mitad de cosas que yo sé. El color favorito de Kim es el amarillo, dice no recuerda como se ve, pero que esta seguro que es bello porque el sol parece ser de ese color según todos los demas. Le gusta el helado de chocomenta y también escuchar música extranjera, su padre le ha enseñado inglés. Quiere un perro, no le dejan tener uno porque podría ser peligroso dado su condición. Dicen que es dulce como un melocotón y eso le gusta, pero le da vergüenza a la vez. Y también... Yo le agrado realmente.

Y sigo haciéndolo, sigo pensando en eso más de lo que debería. Él no me importa, tampoco que HeeSeung esté aquí, haciendo lo que yo debería de hacer. No me importa que Lee HeeSeung esté ayudando a Sun Woo.

Sun Woo mantiene su mano sobre el zapato de Lee, quién sonríe levemente de manera estúpida y le mira fijamente. Y no me malentiendan, HeeSeung me agrada. De hecho, es de las pocas personas que me parecen valer la pena en esta mierda de lugar. Es un chico listo, tranquilo, amable. Va directo y no es doble cara. Es agradable. Hay pocas personas así, él podría caerle bien a cualquiera. También a Sun Woo.

Aún así, aunque Lee me agrade, ¿y esa sonrisa de estúpido?

¿Cuál es el sentido de sonreír de esa manera si no puede verle?

—Lo... lo siento.

Kim suelta el pie de HeeSeung y se aleja rápidamente. Desde aquí puedo ver sus mejillas y orejas rojas.

¿Se ha sonrojado?

Joder, es como un niño de preescolar cuando la persona que le gusta le roza la mano. Se ha sonrojado solo por un detalle estúpido. Le estuve dando la mano todo el puto mes para ayudarle, he cargado sus libros y bolso, he comprado su almuerzo, ¿y conmigo no hubo rubor?

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