Life goes on (Kookjin)

Capítulo 24 ~

-Me voy en dos días, no te lo había contado porque no tenia razón para decírtelo, no somos nada - Jungkook vivía en un constante bucle.
Ese bucle se llamaba Park Jimin, era un lindo bucle de 1.74 centímetros, una sonrisa encantadora que te atrapaba a la primera y una personalidad dulce y exigente que pedía atención 24/7.

Ese bucle tenía la manía de aparecer cuando menos lo esperaba. Podía estar en su mejor momento y de la nada Jimin llamaba y le pedía un favor, Jungkook como un cachorrito que busca atención corría y le decía que si a todo lo que le pedía.

Era un ciclo tóxico que le tomó mucho tiempo darse cuenta que estaba en él y que seguía cayendo ahí aunque no lo quisiera.

Jungkook siempre podria excusarse que conocío a Jimin en un mal momento de su vida, que quizás era más joven e inexperto y varias excusas más. La verdad era que apenas entró a la universidad algo de desató dentro de él. Se vio con una libertad que no tenía cuando vivía con sus padres, tenía control de sus horarios, del dinero y de un departamento. Lo que todo joven de su edad quería simple y llanamente libertad.

Vivió este alocamiento de primer año junto a Taehyung. Iban de fiesta, faltaba a clases y coqueteaban con toda aquella persona que le llamaba la atención.

Pero había una gran diferencia, Taehyung era heterosexual y Jungkook era homosexual.

¿En que radicaba la diferencia? En que los rumores de que Taehyung salía con muchas chicas - aunque muchas veces fueran falsos- hacían que su reputación como "galán" crecieran como espuma. Todos creían que el tener más conquista lo hacían un campeón frente a los demás. Mucha gente se le acercaba solo para preguntarle si había follado con tal persona.
Taehyung tenía grandes defectos como todos, pero nunca respondía a esas idiotas preguntas.

Por otro lado Jungkook nunca se convirtió en campeón por involucrarse con chicos de su mismo sexo, los rumores lo hacían ver como un degenerado, necesitado de sexo que buscaba a cualquiera para saciarse.
Un pervertido gay que convertía a todos los chicos con los que estaban a su alrededor.

Por eso, encontrar a Jimin fue como caído del cielo... Hasta que se entero que tenía un novio hace muchos años. La primera vez que llegó el novio de Jimin y le grito frente a todos los de su clase que era una zorra roba novios fue lo más humillante que pensó que le pasaría. No quiso saber nada de él por semanas, pero siempre terminaba cayendo en sus brazos y tristemente o felizmente con la muerte de su mejor amigo todo se había terminado así de rápido como había comenzado.

Por eso ahora se arrepentía tanto de llamarlo aquella vez. Ahora estaba intentando que Jimin comprendiera la razón de que no le quisiera dar la nueva dirección de su departamento, quería partir de nuevo, quería estar bien consigo mismo y sabía que si seguía viendo a Jimin eso jamás pasaría.

-Vamos Jungkook sabes que somos el uno para el otro ¿cuántas veces me lo dijiste? ¿Cuánto te enseñe? ¿Te acuerdas que dijiste que los mejores orgasmos los tenías solo conmigo? ¿Como nos complementabamos? - se sentía completamente humillado el había dicho cada una de esas cosas y más, pero no era algo que se debía sacar a colación tan a la ligera.

-No todo el follar Jimin, por supuesto que lo pasábamos bien, pero en un futuro puedo encontrar a alguien incluso mejor, alguien con quien tenga una verdadera conexión- decir todo eso le salio extrañamente convincente para el mismo, Jimin no era el único hombre del mundo y el solo pensar en eso apareció la imagen de una de las sonrisas más bonitas que conocía, unos gruesos y suaves labios y un amplio pecho que siempre lo tranquilizaba con su calor y suavidad.

- ¿Desde cuando estas en modo amor para siempre? Nunca creíste en esa estupidez - se reía Jimin para luego agregar - tu mismo decías que eras una zorra que solo quería follar a veces hasta creo que te gustaban los rumores que corrían sobre ti en la universidad - Jungkook estaba boquiabierto ¿siempre habia sido tan hiriente con él? O sólo se comportaba así porque no hacía lo que quería.

-Vamos entendí que estuvieras distinto por la muerte de Taehyung, pero ya es hora de que vuelvas y seas el mismo - Jungkook solo tenía la mirada en el piso, encontrando mucho más interesarme sus calcetines negros.

-Deberias irte - habló una tercera voz y Jungkook levantó su mirada y se encontró con su Hyung entrando por la puerta, que él mismo había dejado a medio cerrar luego que se diera cuenta que era Jimin el que golpeaba - te lo estoy sugeriendo, pero me estoy aguantando el insultarte y agarrarte de pelo para sacarte de aquí - Jin nunca se enojaba de hecho retenía siempre las cosas y después explotaba, pero ahora se veía malditamente enojado y Jimin debió darse cuenta ya que comenzó a salir del departamento en silencio.

Iba pasando por el lado de Seokjin cuando esté lo agarro del brazo deteniendo su caminata - no quiero que vuelvas a repetir el nombre de mi hermano en tu puta vida y si te veo de nuevo al lado de Jungkook te denunciare por hostigamiento y acoso - era una amenaza con todas sus letras y Jimin no se dejaría intimidar tan facilmente se soltó del agarre con un movimiento brusco y se giro para mirar a Jungkook.

-No quiero que me vuelvas a llamar llorando implorandome que te folle - despues de eso cerraba dando un portazo y todo quedaba en silencio.

Ambos se quedaron parados en medio de la sala, ninguno sabía que decir y Jungkook sólo intentaba controlar su respiración para no llorar frente a Jin ya se sentía lo suficientemente humillado ¿que creeria Jin de él ahora? Probablemente lo peor de lo peor.

-No era así antes - fue lo primero que se le ocurrió decir al menor aún mirando sus manos temblorosas - nunca me había dicho cosas tan feas, yo... Yo, no lo entiendo Hyung - el mayor avanzó los pocos pasos que lo separaban y le limpio las lágrimas que habían comenzado a salir sin que se diera cuenta.

-Respira - le susurro Jin haciéndole suaves caricias en la cara - me aseguraré que no vuelva ¿esta bien? - y extrañamente esa simple oración le dio tranquilidad y confianza.
Nada indicaba que Jin tuviera en lo cierto, pero Jungkook decidió confiar en que no volvería y también decidió que no dejaría que nadie lo volviera a tratar así de mal algún vez.