Life goes on (Kookjin)

Capítulo 34 ~

- ¡No me presiones Jungkook! - Seokjin la mayor parte del tiempo era una persona muy paciente, sobretodo cuando se trata de entender a los demás, pero casi no tenía paciencia cuando le preguntaban o lo presionaban directamente con temas que lo involucraban a él mismo.

- Pasé de ser amor a solo Jungkook por una simple pregunta - contra-atacaba el menor lo mas calmado que podía, pero se notaba la frustración en su voz al ver como su novio se cerraba en banda ante la simple cosa que habia dicho.

- No es una simple preguntaba y lo sabes. Es una idea que te viene rondando hace días y me presionas para que te de una respuesta - respondía a la defensiva el mayor y sabia que solo estaba alargando más y más la respuesta porque ya la tenia apenas Jungkook se la pregunto.

- Te insisto en la respuesta porque espero que sea positiva, llegaste llorando hace menos de una semana, siempre te están tratando mal y me estoy cansando de quedarme aquí sentado sin hacer nada - ambos se estaban enojando y Seokjin sabía que era su culpa, pero eso no evitó que siguiera contestando.

-¡Me estas presionando! Si llego llorando es para que me abraces y me des un poco de fuerza para seguir adelante - casi le gritaba Seokjin y se arrepentía al instante ya que sabía que su novio siempre que lo veía o escuchaba mal estaba ahí para él con más paciencia de la que cualquiera podría tener. No era justo que lo estuviera tratando así y lo sabía.

- Dios Seokjin eso hago - habla completamente frustrado Jungkook y se tiraba al sofá - solo te dije que te vinieras a vivir conmigo, no te pedí matrimonio o algo parecido - decía despeinandose el pelo con frustración.

- No puedo - al final respondía Seokjin pudo decir eso mismo hace unos 20 minutos atrás, pero finalmente lo soltaba ahora - me da miedo dejarlos, miedo a que me olviden como lo están haciendo con Taehyung, miedo a darme cuenta que quizás nunca me quisieron, miedo a que venir a vivir acá arruine todo y quede sin padres y sin ti y no quiero ni pensar en esa opción - odiaba ser tan sensible, odia su mente que no lo dejaba tranquilo y que día a día inventaba nuevos escenarios donde quedaba solo.

- Lo siento Hyung- decía Jungkook sonando verdaderamente arrepentido - prometo no insistir más - contestaba su novio y lo traía a sus brazos donde lo acurruba en su pecho y le hacia cariño para lograr tranquilizar su respiración - puedes quedarte cuanto quieras, puedes llorar cuanto quieras, no me voy a ir a ningún lado ¿esta bien? - Seokjin asentía sobre su pecho y respiraba profundo empapandose del suave perfume que usaba su novio, podía estar entre sus brazos por siempre y no cansarse.

-Bésame - decía Seokjin varios minutos mas tarde cuando estaba mucho más tranquilo. Si bien se lo pedía a Jungkook no espero respuestas y el mismo lo beso con pasión y necesidad, fue un beso violento desde el principio dejando casi sin espacio para respirar a ninguno de los dos.

-Hey - lograba decirse entre el violento beso Jungkook que se había, sorprendido por la repentina necesidad de su novio - lento Jinnie - intentaba bajar la intensidad con la que se movían sus labios.

-No quiero ir lento - decía Seokjin decidido parándose del sofá y mirando con necesidad a su novio. Ambos respiraban agitado y mientras el mayor tiraba su sudadera y camiseta a un lado del sillón le decía - hazme el amor ahora mismo Jeon Jungkook - Seokjin siempre se avergonzaba de decir cosas así, estaba vez no pasó así y camino con decisión hacia la pieza de Jungkook.

Sabía que usar el sexo para arreglarse no era la mejor solución, pero después de admitir el miedo que tenía a estar solo, necesita sentir a Jungkook, lo necesitaba junto a su piel, besándola, marcandolo, apretandolo y haciéndolo sentir tan amado como se sentía ahora, pero no sólo él necesitaba eso, también quería que su novio supiera lo importante que era y si bien se lo podía demostrar de otra forma, tampoco era una mala idea demostrárselo a través de gemidos necesitados.

Ambos lo necesitaban y por lo mismo ambos lo estaban disfrutando. Jungkook estaba siendo especialmente rudo y violento, en el sentido que sus estocadas eran más fuertes, más rudas y más descontrolados, sus besos eran más necesitados y contrarrestaban con las lindas palabras de amor que salían de su boca cada ciertas movimientos.

Todo en ellos era violento en estos momentos, rasguños, marcas, mordidas, pero la mirada que se daban además de tener lujuria había cariño que ninguno de los dos habia sentido alguna vez.

-Dios amor - gruñia Jungkook en su oído y podía sentir como palpitaba en su interior, estaba apuntó de correrse - eres perfecto, todo en ti es perfecto - seguía diciendo mientras toma el miembro de Seokjin y comenzaba a masturbarlo con fuerza.

-Un poco más - era todo lo que podía responder Seokjin antes de aferrarse a la sábanas con fuerza y comenzar a gemir su nombre con fuerza.
Menos de dos minutos despues el mayor estaba terminado con un fuerte escalofrio que recorrió todo su cuerpo desde la punta de la cabeza hasta la punta de los pies - correte sobre mi - lograba decir entrecortado luego de que se recuperó un poco de la bruma del orgasmo en la que estaba.

Jungkook que ya había estado controlando su orgasmo hace varios minutos salió del interior del mayor, tiro el preservativo hacia algún lugar, tomó su miembro en sus manos, comenzó a masturbarse y se corrió sobre el cuerpo de su novio lo último que vio fue a Seokjin aún agitado, sudado, despeinado y lleno de su semen, antes de desplomarse a su lado en la cama con la respiración agitada.

Pasaron varios minutos antes de que alguno hablara, el primero fue Seokjin - ¿Estas bien Koo? - preguntaba entrelazandose entre las piernas del menor.

-Me líquidaste - hablaba sonando muy cansado el menor - creo que hasta me desmaye por un segundo - decía con una sonrisa boba en la cara - no tuve energía ni para limpiarte - decía levantando su brazo y colocándolo sobre al abdomen de Jin que aún seguía sucio.

-Deja limpiarme - hablaba el mayor al ver que Jungkook se estaba acomodando para dormir abrazado a su abdomen.

Medio dormido el menor tomaba una de las sábanas que estaba a su lado y lo limpiaba torpemente - no te levantes dejame abrazarte - y Seokjin no podía negarse al menor así que solo se acomodo entre sus brazos sin importarle el sudor, el lubricante, el semen que aún quedaba y que la cama estuviera desordenada.