Capítulo 23

241 41 7
                                    

Era viernes, bueno para empezar.

Sus amigos, como en los viejos tiempos, se habían reunido esa mañana a desayunar en su departamento.

Recibió sin molestia sus burlas sobre su repentino cambio de ritmo de vida, aceptando los comentarios sobre su alacena llena, las frutas sobre su mesa, el agua caliente saliendo de su grifo y el muy bien visto aumento de peso.

La estaba pasando bien, hasta que todo se puso raro.

Había aprobado administración, claro que sí, ni siquiera se molestó en revisar cuando el profesor le entregó sus notas. Tampoco lo miró a él.

Luego el profesor Jung, a.k.a. amante de Haechan, lo había felicitado cuando le entregó su boleta con una calificación aprobatoria.

Hizo memoria, pero no logró recordar que se hubiese esforzado excepcionalmente por esa clase.

Cuando llegó la hora de contabilidad, se acercó al escritorio para recoger sus resultados y firmar su registro, recibiendo la mirada molesta de John.

"Necesita comenzar a esforzarse, Na", le había dicho.

Por eso le sorprendió encontrar un "92" escrito junto a su nombre, haciéndole tomar su tiempo para releer el resultado una y otra vez.

Luego Sicheng, que puso con brusquedad su nota sobre su pupitre y murmuró "por favor, no vuelva a inscribirse a mi clase" con un tono nada amigable junto a su oído.

El menor miró extrañado su nota apenas aprobatoria y le miró, recibiendo la media sonrisa del chino en respuesta.

Y lo mismo pasó con todas sus materias.

No le tomó importancia, a decir verdad.

Siguió con su día como si nada, regresando a su vieja rutina de ir donde sus amigos a sus entrenamientos, esta vez acompañado por el chico Chenle quien, al parecer, tenía asuntos con su querido amigo Jeno.

Le había caído muy bien.

Se despidió y regresó al edificio para recoger un libro de fantasía que Donghyuck le había prestado, y que en realidad quería comenzar.

En los pasillos vacíos, encontró a Yuta caminando hacia su oficina.

Ambos detuvieron sus pasos pero no dijeron nada, incluso cuando parecía que el japonés quería decirle todo.

Le sonrió al mayor amablemente y siguió con su camino, sintiéndose un poco más ligero que hacía un mes.

Estaba orgulloso de sí mismo.





- Quiero casarme con él – declaró, atrayendo las miradas impresionadas de sus amigos.

Como cada viernes, estaban en el bar.

Había tradiciones que difícilmente morían.

- ¿Qué? – preguntó Sicheng, aturdido.

- Quiero que sea mi esposo –

- ¿Estás escuchándote? – preguntó Yuta casi molesto – mierda, dile algo – pidió al hombre junto a él.

- Creo que es muy apresurado – opinó calmado.

- ¿Por qué? –

- ¡Porque ni siquiera John está pensando en eso! – obvió el chino con impaciencia.

- Pero lo amo – lloriqueó Jaehyun.

- Y yo amo a Jisung, pero no estoy sobre mi rodilla –

- Sicheng tiene razón – concordó John – tal vez debas esperar, no sé, un año –

- Pero quiero estar cerca de él –

- ¿Y no puedes pedirle que viva contigo? – sugirió Yuta.

Jaehyun abrió la boca impresionado.

- Haré eso –

- Por favor – rogó.

- Mierda, contrólate – bramó Sicheng.

- Estás siendo duro con él – regañó el más alto - ¿acaso tú no piensas en eso? –

El chino sonrió.

- Todo el tiempo – admitió – pero en el futuro, no ahora –

- Yo estoy bien por el momento – asintió satisfecho – Sungchan y yo no nos conocíamos tan bien como pensábamos. Al parecer padece alergias de temporada y yo no sabía, pero estamos avanzando bien –

- Felicidades – dijo Yuta sinceramente.

- ¿Qué hay de ti? – interrogó Jaehyun.

- ¿Qué hay de mí? –

- ¿Alguien nuevo en tu vida? – John codeó su brazo.

- No en realidad – se encogió de hombros – seguimos con el sistema de siempre –

- Estás mintiendo – aseguró el chino.

- Lo digo en serio –

- ¿Te sigues acostando con estudiantes? –

- Sí –

- No es cierto – insistió.

- No me creas entonces –

- ¿De verdad todavía haces eso? – preguntó Jaehyun.

- ¡Sí! – manoteó al aire - ¡de verdad todavía hago eso! –

La terna lo miró en silencio.

- Estás mintiendo – dijo Sicheng, convencido.

- Claro que está mintiendo – aseguró John.

¿Verdad?


Así es. Yuta hizo que todos aprobaran a Jaemin.

Y, ¿ustedes le creen que sigue acostándose con sus estudiantes o no?

First lessonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora