Una Respuesta

Escena 19

Aquí otra actualización de esta primera historia.

Boun entra a trabajar en la misma agencia que su esposo.

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Prem POV

Teníamos una cena con nuestros compañeros de trabajo, quedé en regresar con Boun pero al parecer, él lo olvidó. En cuanto contesté la llamada entrante en mi móvil, supe que no vendría. No me habría importado mucho de no ser porque ha estado así durante varios días, quiero preguntarle qué sucede pero, es como si dijese abiertamente que desconfío de él. Realmente, que me deje es la última cosa que quiero en la vida. Sé que lo hará en algún momento, cuando el amor se le acabe por completo pero, duele pensar en ello cada segundo que sale corriendo tras atender una llamada desconocida para mí, ni siquiera me deja ver el nombre del contacto. En cuanto su móvil suena, se lanza a correr para contestarlo. Una aventura...
A estas alturas, pensé que a nunca me llegaría el tema de la traición, supongo que ninguna pareja se salva cuando todo está a punto de terminar. Lo mejor siempre es, cortar de raíz antes de que las cosas acaben en riñas y sufrimiento.
Esta situación me lleva a pensar en muchas inutilidades, las típicas preguntas, ¿se cansó de mí? ¿me dejó de amar? ¿tiene a otra persona?
No quiero actuar como novio celoso psicópata, no quiero que se aleje porque lo controlo demasiado. Últimamente, soy yo quien ha demostrado enojo cuando se le acercan algunas personas o nuestros compañeros de trabajo, tanto hombres como mujeres modelos, con piernas largas, piel bien cuidada y de rostros bonitos, eso me lleva a recordar, él es bisexual. Nadie más que nuestros amigos cercanos del trabajo, saben de nuestra relación de esposos, al principio decidimos mantenerlo en secreto para que no hubiesen discrepancias en cuanto a la cantidad de trabajos que le den. Sin embargo, esto comenzó a molestarme, las personas se le acercan, coquetean y lo invitan a salir delante de mí y yo tengo que quedarme callado con un nido en la garganta. Sé que rechazó muchas pero no estoy seguro de que se haya mantenido firme en esa decisión, después de todo, solo soy un fotógrafo que no tiene nada que ofrecerle.
Esta noche, la mejor manera de olvidar era la presencia del alcohol, mientras todos se divertían, me dediqué a forzar sonrisas y a mantenerme ebrio, así no pensaría constantemente en cuándo me va a dejar y qué será de mí cuando lo haga.

En la mañana siguiente...

Desperté en un apartamento que conocía bastante bien porque había cenado aquí con mi nuevo amigo en la agencia, Nikki. Es un chico súper entretenido y agradable, realiza la misma profesión así que los temas de conversación fluyen como río. Instantes después entró Nikki a la habitación con una sonrisa de victoria.
-Buenos días.
-¿Qué hago aquí?- Pregunté al verme cubriendo mi cuerpo semidesnudo en su cama. 'Oh, no, no, no... dime que es pesadilla'. Espero no haber hecho tonterías con él. Soy un adulto Prem, yo puedo tomar la situación con madurez.
Frenté a él sí, pero cuando Boun se entere, no será tan bonita la discusión. Yo ayer pensando en que mi esposo me es infiel y vengo a caer en el mismo charco sin fondo.
-Tomaste tanto que te traje para que descansaras.- Me entregó mi ropa lavada.
-Sabes dónde queda mi casa ¿por qué no me llevaste? Estaré en problemas hoy así que prepara tu sofá, por lo que hicimos es probable que tenga que dormir fuera de casa.
-Y según tú ¿qué hicimos?- Dijo riendo.
-Hace falta explicarlo? No eres tonto ni adolescente, este sutil acto, me costará mi relación.- Dije ya entrando en terror, mis ojos aguándose y mis manos temblando.
-Espera, espera Prem. ¿De qué hablas? Si sintieras dolor, lo entendería pero... como sea, tu novio te entenderá si te ama, sino puedes venir a mí.
-No lo haré y Bo... mi pareja no me escuchará después de esto. Solo me queda preguntarte ¿por qué lo hiciste tú?- Casi la embarro, él no sabe el nombre de mi esposo, demonios, ni siquiera sabe que soy casado.
-Por satisfacción propia y por esto.- Bramó levantando su mano, mi móvil sonando con el nombre ''Hia''. Contestó saliendo de la habitación riendo. Me coloqué el pantalón como pude sin cerrarlo, salí corriendo detrás de él pero ya había colgado. Le arrebaté el móvil de la mano y fui a recoger mis cosas y terminar de vestirme. En menos de cinco minutos estaba Boun entrando a la habitación como si fuese el dueño de la casa. Me paralicé, temblé, sentí miedo porque sabía que me esperaba una separación, aún amándolo, la tristeza nos invadió a ambos, pero solo en él la noté mezclada con algo más. Me sentí tonto por no anticipar esa escena, solo pensaba en lo que le pasaría por la mente al verme en estas condiciones, asco quizás. Terminé de recoger rápidamente, me tomó de la muñeca y me guió a la salida, no sin antes darle una mirada furiosa a Nikki. Me acerqué más para detenerlo, sus ojos se oscurecían, pensé que iba a lanzarlo contra la pared. Nikki alzó las manos como rindiéndose, confundido y preguntando 'si este era mi novio'. No obtuvo respuestas.
Boun estuvo todo el viaje en el auto serio, pensativo y enojado, eso deduje al ver como apretaba el volante y no miraba hacia mí ni siquiera para gritarme. Llegamos a un departamento diferente al nuestro, uno mucho mas grande y lujoso, dejándome en la puerta de este con un simple ''quédate aquí por ahora, tus cosas están en la habitación principal''. Arruiné las cosas, no puede ser, esta sería una sorpresa de su parte, esto era lo que tenía escondido y yo cometiendo errores por imbécl. Errores... reí para mis adentros con ironía. Infiel, le fui infiel a mi esposo. Y ahora eso es algo de lo que tengo dudas. ¿Por qué siento que no es verdad?
Por mucho que me duela una discusión entre nosotros o una pelea, jamás he sentido la necesidad de estar con otro, al contrario, siempre terminamos disculpándonos, por hacerlo dormir fuera de nuestra cama o por él irse para evitar pelear más. No podemos dormir bien si no estamos juntos, si no dormimos en posición de cucharita, si no nos damos cariño mutuamente. Creo que mi cuerpo no se adaptará jamás a otro calor que no sea el suyo, a otras manos que se amolden completamente a mí como las suyas lo hacen.
-Hia, espera.- Dije cuando se daba la vuelta para irse tiré de su brazo, no quería que se fuese así, no me dijo nada desde que me vio, ni siquiera se enojó.
-Hoy no Prem.- Ya no soy su Pao y lo entiendo. Respiró sonoramente, soltando el aire de los pulmones de forma tosca.
-Es tonto que lo diga ahora pero, no estuvimos juntos. No pasó nada entre nosotros. Lo prometo.- Se giró a verme a los ojos, había dolor, se soltó de mi agarre.
-¿Cómo lo sabes? Ni siquiera debes recordar nada después de beber tanto.- Su tono era áspero y lleno de ira. -Te conozco Prem, tú bebes y reseteas la memoria, haces cosas locas pero no pensé que serían cosas que luego arrinarían todo.
-Mi cuerpo lo recordaría, habrían marcas internas o que sé yo, solo lo sé. Además, no importa que tan mal esté, solo existe una persona que puede tocarme, no le permitiría a nadie más tocarme.
-¿Cóm estás tan seguro si no recuerdas?- Dijo esperando mi respuesta, que nunca llegó. Mi boca no se movía. Se fue y yo me quedé arrepintiéndome de todo, el día apenas comenzaba y ya estaba cayendo en el abismo.
Pasaron días en que no supe nada de él, no iba a trabajar ni llamaba. No había señales suyas. Supuse que no me perdonaría y que no quería verme más.

Siempre que preguntaba por él me decían lo mismo 'Tiene un problema en casa y no puede asistir hoy'. ¿Hoy? ¡Pero si lleva faltando casi dos semanas!
-¿Por qué no llamas y le preguntas dónde está?-Dijo P'Kit mientras yo continuaba vigilando mi móvil, me imaginaba que saldría corriendo tras él si solo me timbraba, aunque fuera por equivocación.
-Porque no me contestará, debe estar odiándome o mucho peor, desquitándose en cama ajena. Ya no puedo exigirle nada que no pueda prometer. Desmoroné nuestros planes y nuestra relación, será cuestión de tiempo para que me pida el divorcio.
-En serio ¿no te arrepentirás de darlo todo hasta el final? ¿No te detienes a pensar en cómo debe estar? Puede estar esperando por ti.- Dijo Ai'Sally. Ella es una amiga del trabajo, es la maquillista más divertida y sinceramente directa que conozco. -A él no le servirá de nada el apoyo si no estás tú. Necesita saber que estarás rogándole para que te perdone, que no te detendrás hasta que dé una respuesta positiva, y sobre todo, debes decirle lo mucho que lo quieres junto a ti.
Seguí mirando fijamente mi móvil, sentía la necesidad de llamarlo pero no delante de otros. Es un pensamiento orgulloso pero soy así, desmoronarme delante de mis compañeros, es algo inaudito, imposible para mí. Aunque la verdad sea que lo he estado buscando entre cielo y tierra aquí en Tailandia, en Francia donde vivimos, con nuestros amigos de la Universidad, pero no hay noticias. Esperé a llegar a mi departamento y le marqué varias veces, unas veinte hasta que contestó.
-Prem ¿Qué sucede?
-Esa es mi frase. ¿Por qué no has ido a trabajar? ¿Por qué no contestas? ¿No me perdonas aún? Lo entiendo pero no puedes dejar tirado el trabajo por mi culpa, no puedes desaparecer si dar señales de vida. ¿Cómo puedes ser así de cruel y desconectarte del mundo? Prometiste que hablaríamos y no te encuentro por ningún lado. ¿Dónde estás, has comido, estás enfermo? ¿Tienes idea de lo preocupado que estoy? Estoy intentado parecer fuerte delante de todos pero me vuelvo loco buscándote, me he quedado frente a la puerta del departamento esperando verte pero nada ¿Tanto así me odias que no me darás la oportunidad de explicarme?- Reclamé atropellando mis palabras por las lágrimas rodando por mis mejillas sin descanso. Eran muchas preguntas sin respuestas durante el tiempo que estuvimos sin contacto.
-Pao ¿Qué quieres que responda primero?- Sentí su risa al otro lado. Me llamó Pao. ¿Pao? Eso me alivió un poco, pero no dejaba de pensar en cosas terribles, cada una más grave que la otra. Es el adiós ¿cierto? -Estoy bien, solo tuve que visitar a mi madre para pedirle ayuda con algo. Sabes que ella está de vacasiones con su nueva pareja así que a donde fui, tenía mala señal.
Suspiré. Sequé un poco mi cara pero mis sollozos no se detenían. -Deja de darle vueltas a las cosas, no te estoy evitando. Te creí cuando dijiste que solo a mí me dejarías tocarte.
Mi cara comenzaba a arder como cafetera. - ¡Yo nunca dije que fueras tú!- Mentí. No hacía falta la aclaración, estaba claro que me refería a él.
-Puedes preguntarle a Nikki, él solo lo hizo para saber quién era mi pareja, solo se estaba divirtiendo, es un niño, él...- Me interrumpió.
-Pao, pronto hablaremos, dame unas horas y estarás en mis brazos. Quiero contarte sobre una decisión importante y no sé cómo reaccionarás. ¡Y tienes prohibido el alcohol y quedarte a solas con él!- Suspiró luego de gritarlo.
-Recuerda que te amo con locura.- Él reía y eso me encantaba aunque no pudiera verlo. Era la mejor música en mis oídos. ¿Habrá hablado ya con Nikki? Él lo sabía, esto era venganza para abrirme los ojos.
-Yo también Boun. Hasta pronto.
-Espera, ¿Boun? ¿tú también qué?- Rodé los ojos aún sabiendo que él no me vería. Es un perfeccionista infantil y terco cuando quiere.
-Yo también te amo demasiado, Hia. Eres todo mi aire, mi vida depende de ti. Te amo tanto...

Síganme en mi nuevo insta fe escritora: JF_clichewriter. Estaré actualizando otras cosas que no es tan en mis historias, curiosidades de las ships y avances, etc.

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