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El pequeño chico rubio tarareaba una canción mientras esparcía glaseado alrededor del  pequeño pastel.

Hoy era su cumpleaños número veintiuno y queria —al menos— tener un pastel, uno pequeño.

Cuando despertó, yoongi no estaba, tenía la esperanza de que su Hyung haya ido a comprarle un regalo o un pastel. Probablemente lo había olvidado, auque  lo que jimin no sabía, es que yoongi si sabía que hoy era su cumpleaños, pero simplemente no quería estar con el, en este día especial para el.

Era un día muy lluvioso, parecía que el tiempo se ponía acorde a  la situación, ya que el menor no se encontraba feliz. Le hubiese encantada recibir un dulce beso de su novio felicitándolo, y talvez unos mimos, pero todo lo que obtuvo fue una cama fría y una sensación de soledad y tristeza.

Había recibido unos mensajes de su mamá y un par de amigos diciendo que este año no podrían festejar juntos y que el próximo será , pero eso no hacia que su tristeza fuera menor.

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Ya eran las nueve de la noche y yoongi todavía no aparecía, jimin paso un largo tiempo preparando una deliciosa cena para los dos, preparo la comida favorita de yoongi, no la de el, de yoongi, ya que, por alguna razón, quería complacer al pelinegro, y no a si mismo en su día.

Se sento en el sofá y puso algo para ver, mientras esperaba a su novio, así hasta que dieron las once, y luego las doce, ya no era su cumpleaños, pero igual esperaría un poco más.

Tenía esperanza.

Cuando el reloj marcaba la una de la madrugada, finalmente se rindió, y se dirigió a la cocina,  la cena yacía sin tocar y completamente fría en la mesa, abrio el refrigerador y observo su pequeño y  pastel con glaseado Rosa y celeste, que no pudo degustar o siquiera cortar como el hubiera querido.

Con un nudo en la garganta y sus ojos y nariz picando por el llanto que se avecinaba, se fue a su habitación.

Se puso un pijama y se recosto, no había terminado de cubrirse con la manta cuando ya estaba hipando por el llanto, abrazaba su almohada con todas sus fuerzas y apretaba los dientes, las pesadas y abundantes lágrimas bañaban sus mejillas, labios,  mentón, para finalmente quedar en la almohada.

—T-talvez l-lo ol-olvido —intento convencerse a si mismo, pero por otro lado sabía que el pelinegro jamás llegaba tarde y no lo haría justo ese día a menos que sea a propósito.

Y lo era.

....

La puerta fue abierta y dejó ver a yoongi completamente mojado por la lluvia y con un ligero olor a alcohol.

Si, había vuelto a beber.

su visita dió a la Sala, las luces estaban apagadas por lo tanto estaba oscuro. Excepto La cocina,  Que estaba Tenuemente iluminada, se encaminó hacia ahi y divisó la mesa, que estaba hermosamente decorada con  flores y servilletas bordadas, al parecer, Jimin había sacado la vajilla que solo usaban para ocasiones especiales.

Cierto que era el cumpleaños de Jimin.

La comida se veía deliciosa, y estaba sin tocar.

Se dirigió a el refrigerador a sacar algo de agua ya que después de beber, le daba sed. Y ahí vio el pequeño pastel que Jimin había preparado con tanto esmero y amor.

Feliz cumpleaños Jiminie

Estaba escrito con glaseado, sintió una presión en su pecho.  Jimin había hecho eso para ellos, pero el simplemente se fue con sus amigos a beber.

Se sentía como un puto monstruo.

Lo era.

Al entrar a su habitación  pudo ver un pequeño bulto en la cama, Jimin estaba completamente tapado y solo sobresalían sus rizos dorados.

Se Quito la chaqueta de cuero y el pantalón, se puso un pijama y se dirigió a la cama.

se sento cuidadosamente para no despertar a Jimin, destapó el rostro del menor que se encontraba con una expresión triste, al parecer se durmió llorando, sus mejillas aún estaban Rojas y calientes y sus pestañas algo húmedas.

Se levantó y tomó algo de su chaqueta, fue nuevamente a su cama y se recosto,  cuidadosamente se acercó a Jimin y le dio un suave beso es los labios.

Miro el objeto en su mano. Una pulsera que le había comprado a jimin. Si, lo ignoro en su cumpleaños y no quiso  estar con el, pero le compró una pulsera, era un puto estúpido.

Tomó la pequeña mano de jimin y se la puso, pego al rubio a su pecho y beso su cabellera.

Ambos durmieron en lo que quedaba de la noche.

































Acabo de escribirlo y no lo corregi así que si hay errores, díganme.

Este capítulo es más largo que los otros.

Besos [😘]

Me encanta lastimarte •|YOONMIN|• PausedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora