Jimin y yoongi llevan tres años de relación.
A pesar de los altos y bajos, siempre terminaban juntos de alguna manera.
Aunque Jimin hace lo posible para complacer y hacer feliz a yoongi, este solo lo ignora, lo humilla y lo menosprecia.
-H-hyung...
Una fuerte tormenta había dado paso esa tarde, el alfa de la familia se encontraba fuera de casa por trabajo, el Omega había aprovechado que el alfa no estába para ser el mismo y consentir a los cachorros.
El rubio estaba semi sentado en el sofá, lo único que se oía en la tenue habitación, era el sonido de los cachorros succionando enérgicamente los sensibles pezones del Omega, el cual estaba encantado, no podía dejar de mirar a los cachorritos alimentarse de el, tomado todos los nutrientes que tenía para ofrecerles.
Había decidido no contarle al alfa todavía, no estaba listo, y temía un poco de como fuera a reaccionar, ya que el no era la madre de los cachorros. Tenía miedo que el Yoongi del pasado regrese.
Ya hubieron varias ocasiones en las que tuvo que mentirle al alfa diciéndole que los cachorros ya habían sido alimentados antes, Ya que éste preparaba el biberón y estos ya se veían súper llenos y satisfechos, sus barriguitas extendidas lo confirmaban.
Bajó la mirada y sonrió, parecían dos Terneritos hambrientos, succionaban muy fuerte, lo que causaba que saliera mucha leche y esta se escurra por la comisura de sus labios.
Los primeros días le fue bastante incómodo amamantar, ya que era bastante doloroso, pero el Omega ya se había acostumbrado, incluso sus pectorales le crecieron , por suerte, yoongi no se había dado cuenta aún.
—Parece que los Terneritos ya están llenos— le habló a los pequeños que aún tenían el pezón en su boca pero ya habían dejado de chupar.
Con unas suaves caricias por parte del Omega, se durmieron profundamente. Este con cuidado los llevó a su cuna y apagó la luz de la habitación para que pudieran dormir mejor.
El alfa llegaría en cualquier momento, así que procuró preparar algo liviano para la cena, algo de arroz, kimchi, y carne asada.
Media hora después el alfa llegó a casa, se veía muy cansado, el Omega se acercó rápidamente para ayudarlo con su abrigo.
—Hola mi amor, ¿cómo has estado hoy? —ni bien Jimin se acercó a el, el alfa lo atrapó en sus brazos, enseguida escondió su rostro en el delicado cuello del Omega, Olfateando el delicioso aroma a vainilla que siempre traía, seguramente por alguna loción.
—Bastante bien, los bebés están dormidos, y prepare la cena —dijo con su característica dulce voz.
—Gracias por cuidarlos, amor— agradeció el alfa dejando un dulce beso el la regordeta mejilla del Omega.
—No es nada, s-soy su padre ahora también ¿no? —Miró al alfa, y este sonrió ampliamente.
—Claro que si mi amor, son tan tuyos, como míos. Ahora somos una familia, no voy a arruinarlo, te lo prometo.
—Por favor alfa, n-no vuelvas a tratarme mal—suplicó el Omega con su voz a punto de romperse.
—Jamás. Mi vida, ya no soy el maldito que era antes, no pienso perderte por nada del mundo, ni a ti, ni a nuestros hijos, te prometo que vamos a ser felices a partir de ahora, vamos a criar a los cachorros, y después a darle un par de hermanos más, ¿que te parece? —dijo, acariciando las bonitas mejillas del Omega.
—Me parece un buen plan alfa.
Venían muchas cosas buenas por delante...
Algo corto para actualizar. No tenía ideas de como seguir esta historia por eso pensé en darle fin, ¿que dicen? Gracias por los votos.
Pd: Mañana es el cumpleaños de este guapo de abajo. 💘 ¿cómo no amarlo? Y pensar que cuando entré al fandom, el tenía 19 😭
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