10/0ctubre/2014
Caímos en un gran abismo, lleno de dudas y vacío de esperanza.
Nos dejamos de enamorar, se acabó la magia y todo el color se volvió gris.
Las llamadas dejaron de ser constantes, las palabras eran cada vez más distantes.
Y así cómo un día soleado a mitades del verano llegaste a mi vida, una noche helada a inicios del otoño tomaste tus cosas y dijiste "Esta es mi despedida."
Me dijiste que no llorará, que no tenía caso, no cambiarías de parecer. Me quedé en silencio, tragándome el dolor, la tristeza y todos los "te amo" que quería gritar.
"¿Que esperas?" dije solamente.
"¿No dirás nada?" preguntaste.
"No" dije con la voz cortada.
"Pensé que... Que, tal vez tendrías más palabras para mi"
"Haga lo que haga, diga lo que diga, no puedo cambiar nada, vete ya... No quiero seguir viéndote"
La sorpresa se asomo en tus ojos.
"Si quieres irte, hazlo de una vez." Enterré el rostro entre las sabanas de la cama, amortiguando el sonido de mi llanto con la almohada. Escuche la puerta cerrarse y mi cuerpo se congeló.
Ya no había más nosotros, ya estaba hecho... Como siempre suponía que sería.
Y así fue, simplemente término.
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Cartas para ti sin enviar. (1)
Chick-Lit¿Que tanto puede pasar en 194 días?Jamás había pensado en eso, no ha sido hasta hace una semana que me tope con esa incógnita. Pues, en 194 días, que son casi seis meses, puede pasar cosas buenas, muy buenas, malas y muy malas; puede pasarte de todo...