Carta 43 (ultima)

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14 de Febrero del 2015 

11:12 pm

J, R, M, B, se preguntaran: ¿Porque jamas dijiste todo esto?

Pues fue por las siguientes razones:

R, mi poeta roto, no quería lastimarte cariño, no quería que lo que teníamos se fuera al demonio por un error como este, perdóname, perdóname por dejarte diciendo que necesitaba tiempo, lo único que necesitaba era a alguien, y ese alguien ya no eras tú, pero si me lo permites, espero me des otra oportunidad, una para hacer las cosas bien.

M, soldadito, perdóname por todo, las mentiras, los besos y abrazos fingidos, el tiempo perdido y todo el daño que te hice. Por eso te deje marchar, para que encuentres tu felicidad con alguien que de verdad te merezca, que no te haga llorar y no te haga sentir mal contigo mismo.

B, mi caballero sin armadura, recuerda: aun tenemos la posibilidad de una vida juntos, solo espero que sepas tomar la decisión correcta en el momento correcto.

Y J, mi flaquito, mi ángel, mi vida, mi amor, mi todo;  te lo he dicho miles de veces, eres y seras siempre lo que mas he querido en esta vida, el dolor que me causaste ha sido la cosa más horrible de mi existencia, pero también me regalaste los mejores recuerdos de la vida, jamás olvidaré la primera vez que dijiste "te quiero", la primera pelea, el primer "te amo", nuestras promesas, nuestros planes, nuestros sueños, nuestros "algún día", todas esas llamadas, todo eso se quedara guardado en mi mente, en mi corazón y en mi alma. Nunca te lo había contado, pero aún sueño con verte llegar, aún sueño con Ian, aún sueño con aquel 14 de julio, ese día es el día en que me di cuenta que pertenecía a un lugar, ese día me di cuenta que sí soy capaz de amar, de entregarle mi vida a alguien sin temor a ser lastimada o a ser rechazada.

Te doy gracias por todo y estoy lista para dejarte ir, para dejarte ser libre, porque yo también busco mi libertad, eso no significa que dejaré de pensar en ti, pero si significa que mi mundo dejara de girar al rededor de ti. Ya no quiero llorarte, ya no quiero sentir que te pierdo, porque es mas que obvio que eso paso hace mucho. Quiero recordarte sin que duela. 

Pero recuerda, que siempre estaré para ti cuando lo necesites, solo házmelo saber.

El tiempo entre nosotros se acabo, solo estoy alargando la despedida, para poder gozar de ese retrato mental que tengo de ti; alguna vez escribí:

"Quiero que cuando alguien mencione su nombre lo primero que venga a mi mente sea: ojos color miel, cafés o negros, dependiendo el clima; cabello largo y negro, dedos largos y delgados deslizándose por las cuerdas de una guitarra, una horrible y desesperante voz que me encanta, un hoyuelo muy lindo, comedias románticas, "maybe someday", una banda que nadie conoce (solo el), un gorro que odio, la playa, una historia de zombies, mensajes por la margada, llamadas eternas, mordidas, el color negro, la runa del poder angelical, un perfume que me encanta, un cuello irresistible, el amor de mi vida, todo eso, entre otras cosas."
Porque todas esas cosas me recuerdan a ti, me recuerdan quien eres y a donde pertenecí...

"Y así terminó la historia. Sin la palabra FIN, solo con tres puntos suspensivos. Los de la rabia, la paciencia y la indiferencia."


Cartas para ti sin enviar. (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora