I Never Forgot You - Minsung

10

Cuando por fin llegaron a su destino, el peliazul se da cuenta de que es otra fiesta.
Dios ¿Minho no se cansaba de estar en fiestas?

–¿otra vez una fiesta? – dijo el peliazul mirando al pelinegro con una ceja alzada.

–Si, es una fiesta, pero te quiero mostrar algo. – dijo el pelinegro tomándole la mano. – ¿no te molesta que estemos así? Aqui hay mucha gente y prefiero llevarte asi para cuidarte mejor. –

El peliazul se sonroja levemente y niega.

–No me molesta. – dijo sonriendo.

–Genial, vamos entonces. – dijo el pelinegro dirigiendose a la entrada.

Si, Minho tenía razón, habia mucha más gente que en las anteriores fiestas. Lo raro es que no le molestaba, ¿su ansiedad social estaba mejorando? Si es asi, que bien.

Los chicos pasaron por entremedio de muchas personas bailando y bebiendo.
Finalmente llegan a una puerta, la cual Jisung suponía que era la puerta trasera de la casa.

Y asi era, la diferencia es que esta puerta los llevaba a un camino a seguir.
¿No iban a ir por ahí o si?

–Vamos a ir por ahí. – dice el pelinegro mirando al peliazul.

Increíble.

–Esta bien, pero.. ¿a dónde vamos? –

–Solo espera, luego verás. – dijo Minho guiñando un ojo.

Dios, ¿por qué todo lo que el pelinegro hacía era lindo?

Iban siguiendo el camino que estaba en un bosque, sin darse cuenta seguían tomados de la mano.
Aunque después de unos minutos lo notaron, pero no hicieron nada al respecto para soltarse.

De repente llega una brisa fría y Jisung tirita.
Minho notó esto.

–¿tienes frío? Te dije que era más helado acá. –

El pelinegro se sacó su polerón que tenía un gorrito y se lo dió a Jisung.

–Oye, no hace falta, de verdad. –

–Silencio, mejor póntelo. –

Jisung tomó el polerón y se lo puso de inmediato. Estaba calentito y a parte tenía el olor del perfume que usa Minho.

Ya no iban de la mano, pero iban conversando de varias cosas, hasta que llegaron a su destino.

Jisung observa sorprendido el lugar, era hermoso.

En frente de ellos se encontraba una playa realmente hermosa. Tenía un sitio para acampar y el agua era cristalina.

Minho extendió su mano nuevamente y miró al peliazul.

–¿vamos? –

Jisung tomó su mano y sonrió.

–vamos. –

Ambos fueron a un sitio para acampar y se sentaron en las bancas que habian ahí.

–Dios, es todo muy lindo. – dijo Jisung mientras miraba alrededor.

–Hace mucho no veníamos... – dijo el pelinegro dándose cuenta una vez más de lo que habia dicho. – digo, hace mucho no venía. –

Jisung solo rió. Minho es muy lindo.

–Siento que ya he venido antes. – dijo el peliazul.

–¿de verdad? – lo mira soprendido Minho.

¿Estaba logrando de a poco lo que quería hacer?

–Si, o tal vez lo ví en uno de esos sueños raros. –