Rockstar | TaeGi

Three

¿Cómo es que dio el gran salto de escribir cartas casi anónimas a estar viajando en automóvil junto a quien iban dirigidas?

Mientras Yoongi estaba en un shock temporal Taehyung, por su lado, se tomó el tiempo de verlo un poco más. En las cartas por obvias razones no tenía la oportunidad de imaginar tan siquiera su cabello, pero ahora que lo tenía tan cerca le resultaba casi claro. Era él, el chico que las cartas que siempre llegaban a salvar sus días. Más pequeño y tímido de lo que pensó seguramente, pero estaba más feliz de lo que en realidad era consciente.

Ya no quiso esperar más, estaban cada vez más cerca de la universidad a la que asistía él así que en cualquier momento tendrían que despedirse y ni siquiera habían cruzado palabras suficientes para irse satisfecho a esperar la siguiente carta. Si es que, en todo caso, seguían llegando después de eso.

-¿Quieres decirme tu nombre?

Yoongi volvió a enfocar su mirada en Taehyung algo atontado y mareado por la sensación inesperada de tenerlo tan cerca.

A la ves que quería bajarse pronto del auto también deseaba que este jamás llegara a su destino y su tiempo con Taehyung durara más.

-Min... Min Yoongi.

El cantante, famoso últimamente por las noticias que no dejaban de dispararse, asintió y se relamio los labios.

-¿Qué estudias, Yoongi?

-Uhm... música.

Taehyung se rascó la nuca, aún no lograba que el ambiente sea ligero y cada vez tenía menos tiempo.

-Yoongi, eres más callado de lo que aparentas por cartas.

¿Estuvo correcto mencionarlo?

-Es que se me da mejor escribir que hablar, lo siento.

Le sonrió, quizás era mejor idea hablar sobre las cartas. Al menos sentía que ese era el mejor camino.

-Taehyung, ¿por qué querías conocerme?

Lo pensó, y a pesar de que quiso dar alguna respuesta que sería más bien recibida no podía darla. La noche anterior se pasó dando vueltas en su habitación, practicado las cosas que haría y diría al tenerlo de frente, pero sentía a Yoon y Min Yoongi más lejano que el otro.

-Porque no dejabas de escribirme, así que quise ver el rostro del autor de tantas cartas.

-¿Fue molesto recibirlas?

De nuevo guardó silencio, era muy difícil buscar la forma correcta de expresarse.

-No, acostumbro a recibir cartas de mis fans.

Pero ninguno me ha escrito con tanta regularidad como tú, pensó y no lo dijo.

El peliazul asintió, claramente decepcionado de esa respuesta tan simple y carente de interés. El auto se detuvo luego, siendo informado por el chófer que ya habían llegado a la universidad de Min Yoongi. El muchacho delgado abrió la puerta sin tardar un segundo más y le agradeció inclinando la cabeza.

Taehyung le sujetó la mano antes de que saliera.

-Espera, no fue eso lo que quise decir... -entonces se miraron de manera más personal, los ojos que ambos veían brillaban de rara manera y los atraían más-. Disfruté leyendo cada carta, Min Yoongi, al punto en que solo buscaba las que tú enviabas. Nadie más importaba en ese momento. Gracias por escribirme, Yoon.

El peliazul le sonrió con las mejillas relucientes y asintió murmurando un "de nada, Tae." Sólo en ese momento pudo soltarlo para verlo alejarse a toda prisa hacia su clase, sin tratar de considerar demasiado importantes los desenfrenados latidos que repentinamente tenía su corazón. Se atrevió a ver a su derecha, donde antes estaba sentado Yoongi, y notó que se había dejado la mochila allí.

-Espera, Jeongsan.

-Sí, señor.

El chófer detuvo el auto apenas una cuadra después donde Taehyung alcanzó a cubrir su rostro con una mascarilla y un gorro saliendo con extraña prisa por llegar a Yoongi sostenido en su mano la mochila de él.

Cuando llegó a la universidad no se detuvo a mirar si alguien estaba viéndolo o si es que llamaba mucho la atención, siguió corriendo hasta estar dentro y disminuyó la velocidad. Recordaba que Yoongi le mencionó que estudiaba música, así que intentó buscar el área preguntado a un par que se encontraba allí, al mismo tiempo que reía en sus adentros por lo que estaba haciendo pero ¿cómo alguien podía ser tan distraído de seguir sin darse cuenta que había dejado sus pertenencias olvidadas?

-¡Min Yoongi!

Cuando lo vio finalmente no pasó ni dos segundos, estaba demasiado próximo porque él venía en su dirección, así que sintió la cabeza de Yoongi golpeando su pecho. Soltó una risa demasiado escandalosa en ese momento.

-Oye, oye, ¿no se te olvidaba algo?

Yoongi alzó la mirada hacia sus ojos, intimidado por la cercanía aún más próxima y sintiéndose tonto al ver que Taehyung levantaba con la mano derecha su mochila.

Cosas como esas jamás le ocurrían, y no sabía si hablaba necesariamente de dejar olvidadas sus pertenencias o que tu cantante favorito fuera sin corriera por toda tu universidad para devolverlo.

Taehyung tomó su mano, dejando ir una buena bocanada de aire, y le dejó la mochila que aún estaba en medio de ellos.

-Eso fue demasiado divertido, pero debo irme. Creo que estoy llamando la atención.

-Gracias, Taehyung. Yo no suelo ser...

-¿Distraído? Uhm, parece lo contrario ahora.

Es que Yoongi iba caminando prácticamente en las nubes, así que cualquier cosa podría olvidarsele.

-Min Yoongi. -Taehyung aproximó su rostro a él y le sonrió bajando un poco su barbijo-. ¿No crees que merezco una recompensa?

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