Gracias al remordimiento que no le había dejado dormir la noche anterior acabó perdiendo casi todas sus clases en lo que intentaba escribir con palabras justas alguna disculpa efectiva que Taehyung pudiera tomar correctamente. Sin embargo, seguía sintiendo que no era suficiente redactar a mano solo una carta que pudiera poner fin o no a su culpa. Después, durante el almuerzo y como magia Jimin le había sugerido que para quedarse más tranquilo podría llevarle la carta en persona. Obviamente, lo había dicho de broma pero Yoongi no lo tomó así e incluso le agradeció quitándole el aliento a su mejor amigo. Seguidamente le pidió ayuda a Seokjin para que lo reemplazara en el trabajo por esa noche. Él había aceptado alegando que lo hacía porque no tenía mejores planes pero aún así le debía un favor. Entendía con eso que debía comprarle algunos videojuegos, porque Seokjin era todo un friki que se la pasaba horas frente a la consola o jugando en línea.
Así que, una vez creyó tener todo resuelto y luego de que sus amigos le advirtieran que debían llamarles por si acaba en prisión, no para ayudar sino para reírse y luego pagar su fianza, salió en camino. Bueno, en lo que el autobús tardase para llevarlo hasta el distrito de Itaewon.
-Vamos, Yoongi, ¿realmente harás esto?
Se piso el pie así mismo y volvió a concentrase en la carta que llevaba en su mano en perfectas condiciones, aunque dudaba que siguiera así si seguían sujetándola con fuerza, miró hacia el buzón de la gran casa y luego hacia el timbre sin decidirse por cuál era mejor, pero él estaba realmente esperando poder entregarla directamente en las manos de Taehyung y luego huir como un gato al que le pisaron la cola.
Estuvo tanto tiempo allí que de repente las rejas se abrieron y comenzó a salir un reluciente automóvil desde el interior, el cual frenó a tan solo tres centímetros a su lado.
El vidrio bajó al igual que su pulso al ver a los mismísimos Kim Namjoon y Jung Hoseok saliendo de la mansión.
-Uhm, ¿vienes a dejar algún paquete? El buzón esta por allí.
Hoseok le habló, ¡el gran golden hyung de Bangtan le estaba dirigiendo la palabra!
-No, no. De hecho esto es... -Se llevó la mano tras la nuca y miró hacia el suelo-. Quería entregar algo si pero...
-¿Qué llevas ahí?
Namjoon extendió un poco el cuello fijándose en el sobre azul que tenía en la mano y le recordó a las mismas cartas que Taehyung buscaba siempre con anhelo recibir.
-Oh, ¿tú eres ese fan? Lo sentimos, no sabíamos.
-No quisiera molestar, solo quiero dejarle esta carta. No tuvimos una buena despedida y esperaba poder disculparme.
Namjoon y Hoseok se miraron entre ellos, de repente esa corta explicación les aclaraba la duda de por qué su joven vocalista había estado tan ansioso pero al volver parecía haber cambiado. Ambos estaban preocupados porque pensaron que se había encontrado con algunos paparazzis que estuvieron molestando el último tiempo. Ahora estaban más aliviados, pero no tanto ya que Taehyung solía ser un poco sensible aunque no lo demostrara.
-Oye, mira -habló Hoseok, que iba al volante en esa oportunidad-. No es bueno que estés aquí afuera esperando, podrías atraer a otras personas, ¿entiendes?
Namjoon sonrió entonces.
-Asi que, ¿porque mejor no pasas? Lo siento, ¿me dices tu nombre?
Estaba casi boquiabierto.
-Min Yoongi. -Inclinó la cabeza hacia ellos-. Mi nombre es Min Yoongi, hyungs.
-¿Hyungs? -preguntó divertido Nam.
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Rockstar | TaeGi
FanfictionDonde Taehyung es vocalista de un famosa banda de Rock, pero en el último tiempo ha recibido críticas al declararse homosexual. Entre tanto daño emocional, comienza a recibir las cartas de un fan que funcionan para alegrarlo. Ahora sólo quiere reci...