Rockstar | TaeGi

Twelve

La habitación era bastante espaciosa, tenía cortinas en tonos cafés, una colección de discos, una cama enorme en medio, y todo un cuarto aparte para el armario. Taehyung le guió a sentarse en la cama donde se mantuvo en silencio con las manos entre las piernas como si tuviera frío, de hecho estaba nervioso. El idol ahora estaba sentado junto a él pero de repente ninguno sabía qué hacer.

Taehyung echó una pequeña risita, conteniendo las ganas de tomarle la mano a Yoongi y comparar si era más pequeña que la suya. Al final sólo se dedicó a acariciarle el cabello, sabiendo que eso lograba relajarlo.

-Yoongi, ¿te sientes bien? -No respondió-. ¿Yoon?

De repente el menor sólo explotó, dándole una gran sorpresa.

-¡Es genial estar en tu habitación, hyung!

Yoongi ahora miraba hacia todos lados emocionado, con esa mirada brillante queriendo ver a detalle y memorizar todo en ese lugar. No sabía cuántas más oportunidades iba a tener de estar allí.

-Gigi...

Lo atrapó con su brazo y se lanzó junto a él a la cama, riendo mucho cuando quería llenarlo de besos.

Lo amaba, lo amaba, lo amaba muchísimo.

Escuchar la risa de Yoongi era grandioso, un sentimiento casi mágico que no experimentaría en ningún otro momento de su vida. Mientras lo retenía allí en su brazo se dedicó a admirarlo desde su perfil, esa nariz tan chiquita que tenía, sus labios finos, las mejillas suaves, sus pestañas. Cada detalle de él era hermoso.

-¿Taehyung?

No se encargó de resistirse a sus deseos, levantó el rostro y le besó en los labios directamente. Unos segundos saboreó esa sensación tan dulce de tener su boca junto a la suya, luego viajó hacia su labio inferior para retenerlo hasta que ambos cuerpos fueran solo calma.

Yoongi abrió la boca un poco más tímido que la noche anterior y buscó que Taehyung fuera hacia él y le declara con la lengua que era suyo.

El castaño le acaricio la mejilla con su pulgar y siguió besándole como si fueran a desaparecer ante el primer pestañeo. Le acarició la lengua con sus labios, la boca, se llevó sus suspiros, y le quitó la chaqueta que traía en cima para devorarle los hombros.

-Tae...

Subió de nuevo para darle un beso más suave, unos más corto y tierno.

Yoongi se sentía demasiado abochornado por el cariño repentino con el que era mirado por Taehyung.

-Min Yoongi, me gustas.

Yoongi asistió, sin saber qué decir, Taehyung se dio cuenta que quizás necesitaba unos minutos para volver a respirar y en los que pudiera volver a estar relajado. Se apartó de sobre él volviendo a pararse fuera la cama.

-Iré a darme una ducha, no lo hice desde ayer. -Soltó una risita-. Lo siento. Puedes usar la habitación como quieras.

De nuevo asintió, con el aire escaseando en sus pulmones porque Taehyung se los había robado todos. Cuando su hyung despareció de la habitación se quedó unos minutos bastante rendido en la cama hasta escuchar solamente el sonido del agua de la ducha caer. Se tocó los labios, el hombro y los lugares donde las manos de Taehyung habían llegado. Sintió todo un escalofrío que puso sus vellos de punta al soltar un jadeo inesperado.

Se sonrojo y se sentó en la cama con las manos a ambos lados de sus caderas, de nuevo tenía una erección entre sus piernas.

-Espero que Tae no se haya dado cuenta. -Suspiró desde el fondo de sus pulmones-. No quiero que piense que esta saliendo con un tipo hormonal.