enemies of the heir

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Llegó octubre y un frío húmedo se extendió por los campos y penetró en el castillo. La señora Pomfrey, la enfermera, estaba atareadísima debido a una repentina epidemia de catarro entre profesores y alumnos. Su poción Pepperuptenía efectos instantáneos, aunque dejaba al que la tomaba echando humo por las orejas durante varias horas. Los de Slytherin y Hufflepuffs fueron de los pocos que no se enfermaron, probablemente por que estaban acostumbrados a los cambios de temperatura entre dormir en las mazmorras y el resto del gran castillo.

Eryx agarraba con fuerza su diario mientras caminaba entre los alumnos y la mirada baja, estaba pensando en que tareas le faltaban por entregar, se atraso con varios trabajos y eso no le agradaba mucho, siempre a sido muy cumplido y le molestaba faltar en algo por primera vez. 

Entra a la librería apurado buscando con la mirada la sección que necesitaba, cuando encuentra la sección de plantas, camina velozmente hacía ella, mientras su pelo cambia color rojo. Estaba molesto por dejar que Draco y Theodore lo distrajeran lo suficiente como para olvidar de entregar unas cuantas tareas.

Su amistad con Draco había mejorado, Malfoy ya no lo trataba como si fuera alguien inferior todo el tiempo, los dos encontraron una zona de confort comiendo dulces en la torre de astronomía junto a Luna hablando sobre cualquier cosa, aun que Draco a veces no entendía a la perfección de lo que hablaban los otros dos rubios, siempre intentaba unirse a la conversación. Eryx seguía molesto por lo que paso con Hermione semanas pasadas, esperaba que Draco entendiera el significado exacto de la palabra y el por que no debería de usarla.

Toma el libro que necesita y camina a una mesa completamente vacía cerca de la sección de poesía, normalmente nadie se acercaba a ella, y con el poco autocontrol que Eryx tenía de sus emociones, no era bueno que alguien lo molestara. 

Cuando termino su tarea escucho uno risa femenina, volteo a ver el lugar por donde provenía la risa y se encontró con una chica rubia sin uniforme, solo usando un pantalón de mezclilla azul claro y un top con el logo de Green Day. Eryx frunció el ceño extrañado, no conocía a la chica y se veía mayor, Eryx aposto que podría ser de al menos quinto año. La chica ni se inmuto de su presencia, pues luego llego Percy Weasley sonriéndole a la chica, Eryx frunció el ceño y pensó si esa era la persona con la que se envía cartas de la cual Ron habla tanto de.

Eryx decide retirarse de ahí pues tenía que comer aun y alimentar a sus mascotas. Fred y George le lograron conseguir aquel puffskein que Theo y el tanto querían y lo terminaron llamando Apolo para no perder la costumbre de ponerle nombres de mitología griega a las mascotas.

Al llegar al comedor, muchas chicas de Ravenclaw se le acercan a preguntarle sobre su color favorito, hechizo favorito entre otras cosas que el no entendía, Eryx se disculpo y salió de aquel grupo caminando hacía la mesa completamente desorientado, nunca le había pasado algo parecido y en cierto modo le daba miedo.

Se sienta a un lado de Theodore, el chico lo ve con una mueca divertida, Eryx lo ve con el ceño fruncido y empieza a tomar comida para comerla. Dalia se sienta abruptamente frente a los dos Slytherin con una mueca divertida, Theo la ve de arriba a abajo confundido pues nunca la había visto.

—¿Qué pasa?—Pregunta Eryx empezando a comer de su sopa.

—Las de Ravenclaw de tercer año están obsesionadas contigo, dicen que cambiaste mucho en el verano y todas esperan a que las invites a salir—Dice Dalia riendo mientras le roba comida a Theodore el cual intentaba apartar su plato sin éxito.

—¿Dónde planean que las invite? ¿Al baño de Myrtle la llorona?—Dice Eryx pasándose la comida divertido. 

— Yo creo que quieren salir contigo por que eres amigo de Harry Potter—Dice Theodore finalmente.

—¿Crees? Pensé que era por que soy lindo—Dice haciendo un puchero exagerado para luego reír.

—También...eres lindo—Dice Theo tímido. Dalia deja caer la papa que estaba en su boca a la mesa.

—Oh por dios—Dice Dalia.

—¿Qué cosa?—Pregunta Eryx confundido viendo a su amiga.

—¡Le tengo que contar a Bea Haywood!—Dice la chica antes de irse.

—¿Contarle que?—Pregunta Eryx confundido al verla irse tan rápido.

—Ni idea—Dice Theodore fingiendo confusión, pues el también había notado de que hablaba Dalia y temía lo peor.



Estaba regresando a las mazmorras junto a Theodore y Draco, Eryx no estaba muy seguro de que hablaban, la mayor parte del tiempo hablaban de los bailes que sus respectivos padres habían hecho. Los Slytherin  se encontraron con una multitud, Draco los jalo hacia el frente para ver lo que sucedía y se encontraron con la gata de Filch. Draco a su lado grito:

—¡Teman, enemigos del heredero! ¡Los próximos serán los sangre sucia! — Tenía una expresión alegre en los ojos, y la cara, habitualmente pálida, se le enrojeció al sonreír ante el espectáculo de la gata que colgaba inmóvil. Eryx lo vio con el ceño fruncido.

—¿Qué pasa aquí? ¿Qué pasa? — Atraído sin duda por el grito de Malfoy, Argus Filch se abría paso a empujones. Vio a la Señora Norris y se echó atrás, llevándose horrorizado las manos a la cara.—¡Mi gata! ¡Mi gata! ¿Qué le ha pasado a la Señora Norris? —chilló. Con los ojos fuera de las órbitas, se fijó en Harry—. ¡Tú! —chilló—. ¡Tú! ¡Tú has matado a mi gata! ¡Tú la has matado! ¡Y yo te mataré a ti! ¡Te...! 

—¡Argus!— Había llegado Dumbledore, seguido de otros profesores. En unos segundos, pasó por delante de Harry, Ron y Hermione y sacó a la Señora Norris de la argolla. —Ven conmigo, Argus —dijo a Filch—. Ustedes también, Potter, Weasley y Granger. 

Lockhart se adelantó algo asustado.—Mi despacho es el más próximo, director, nada más subir las escaleras. Puede disponer de él. 

—Gracias, Gilderoy —respondió Dumbledore. La silenciosa multitud se apartó para dejarles paso. Lockhart, nervioso y dándose importancia, siguió a Dumbledore a paso rápido; lo mismo hicieron la profesora McGonagall y el profesor Snape.

Se fueron y Eryx se quedo viendo a la dirección por la que se fueron para luego voltear a ver la inscripción en la pared con curiosidad, preguntándose si la sangre era real, si era de la gata, o solo salsa de tomate. Theodore lo arrastra para irse al  dormitorio, Malfoy camina hacía Goyle y Crabbe.

Colors - Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora