Simplemente te amo

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Capítulo 11 - Acusaciones

¿El propietario?

"Yo soy la dueña de este restaurante y ella es mi empleada. No voy a seguir observando desde el margen cuando tú y tus amigos están acosando a mi empleada". Nana dijo de una manera tranquila pero firme, "incluso si ustedes son los clientes".

El hombre se puso de pie con rabia.

"¡Tonterías! ¿Cuándo la acosé? ¿Cómo puedes acusarme así?"

La tercera amiga se burló, "¡Je! Sólo porque está llorando, ¿la crees? Iba a tropezar y mi amiga simplemente la tomó de la mano para apoyarla. ¿Eso cuenta como acoso señorita dueña?"

He Xiaoli se sintió muy conmovido al ver a su jefe defenderla. ¡Quería decirme que eso no fue lo que pasó! Pero no quería implicar el nombre del restaurante por eso.

"Mamá, está bien ..."

Nana le dio unas palmaditas en los hombros para tranquilizarla. Entonces ella lo miró.

"Puedo mostrarte la evidencia de que no fue ningún gesto amable de tu parte para ayudarla. Una vez que le eches un buen vistazo, prepárate para disculparte".

"¡Tú! ¡En tus sueños! Te demandaré por esto. No puedes simplemente manchar mi nombre así."

En ese momento llegaron Yukito y Yukira.

"Nee-chan, aquí está el metraje."

Nana les quitó la ficha y les dijo a los tres hombres: "Aquí está la evidencia. Esta es la grabación de seguridad. Donde se puede ver claramente que estaba sosteniendo y agarrando la mano de Xiaoli contra su voluntad y no la estaba dejando ir".

Estaban atónitos. Nunca pensaron que todo estaba grabado. Antes de que pudieran decir algo más, Nana reprodujo el clip.

Mostró cómo Xiaoli llegó a su mesa con su comida, y cuando mantuvo la bandeja abajo, se pudo ver un movimiento sutil donde el hombre estiró un poco el pie y ella tropezó. Él sostuvo su mano para sostenerla, pero luego comenzó a apretarla. Ella se disculpó y le dio las gracias al principio, pero luego se sintió un poco incómoda cuando él todavía no se apartó de su mano. Estaba claro que ella trató de quitárselo de encima, pero él lo agarró con más fuerza. Sus otros dos amigos sonreían con asco.

Silencio.

Los otros clientes también empezaron a mirarlos mal. "Pobre chica."

"¡Qué asco!"

"Debido a hombres como estos, las niñas no pueden trabajar libremente".

"Los pervertidos como ustedes tres deberían ser encarcelados".

Los tres estaban horrorizados. Ellos entraron en pánico. Especialmente cuando escucharon a alguien decir 'cárcel'.

"¡Cállate!" Todos se callaron.

"¡Y tú! Estás tratando de difamarme. Esto es evidencia falsa. ¿Sabes siquiera quién soy? De lo contrario, ¡no te habrías atrevido a tratar de incriminarme así!"

Nana lo miró confundida.

"¡Je! Mi padre es Sun Yifeng."

Sun Yifeng era el jefe del departamento de policía de su localidad. Algunas personas opinaron que utilizó métodos clandestinos para obtener dinero extra de políticos corruptos y retirar los cargos en su contra. Pero no había pruebas, por lo que la gente se quedó callada.

Los otros clientes se asustaron. No querían implicarse en un caso policial en el que estaba involucrado Sun Yifeng. Seguramente protegería a su hijo. Inmediatamente dejaron de hablar.