Novios Falsos | ᵗᵃᵉᵍⁱ |

четырнадцать

—¡Es ridículamente sencillo! ¿Cómo diablos no eres capaz entenderlo? —habló con frustración la mujer que estaba del otro lado de la línea, ocasionando una muy notable mueca de disgusto en Jungkook.

—Nunca dije que no entendí lo que me está pidiendo, si no que me parece completamente absurdo lo que usted tiene en mente. —respondió tranquilamente el azabache revisando algunos papeles que le fueron dados hace unos minutos. —Taehyung ya esta aquí para reclamar la empresa y papá está de acuerdo, no se puede hacer nada más. —y nuevamente escuchó un gruñido de su madre.

—¡Claro que se puede! Pero necesitas hacerle saber a Seokjin que está cometiendo un error, es absurdo que él haya cambiado de parecer tan drásticamente, la empresa originalmente sería dadá a ti, ¿y ahora porqué un chiquillo cualquiera llegué y la reclamé dejarás todo de lado?, ¿renunciaras al trabajo que hiciste para que todo sea más fácil para cuando la empresa se te fuera heredada? —Jungkook para este punto ya se sentía mareado por lo que la mujer reclamaba; simplemente tenía ganas de mandarla a la mierda y colgarle, pero era su madre, no era capaz de hacerle eso.

—Madre, quieras creerlo o no, la empresa originalmente y siempre fue para serle heredada a Taehyung; ni siquiera tenía que tener una pareja para reclamarla, simplemente eso fue una mentira que dijeron sólo porque nunca quisiste que Taehyung la heredará y mi padre ciegamente sólo te siguió el juego. —a esté punto Jungkook podía imaginarse a su progenitora con el rostro rojizo debido a la rabia, aún así no le tomaría importancia.

—Ni una palabra de esto a Taehyung. —y colgó.

Con un suspiro Jungkook dejó su celular en la mesa mientras analizaba la conversación que había tenido.

Siempre estuvo consciente del favoritismo que tiene su madre con él, y podía reflejarse en la actitud que tenía la mujer en tan solo pensar en que Taehyung heredará la empresa, alegando que no estaba preparado; cosa que no era cierta, pues el rubio en las pocas semanas que llevaba trabajando en la empresa se había encargado de demostrarle a todos lo calificado que estaba.

Puede que él haya crecido en ese ambiente, pero a comparación de Taehyung, él parecía no saber nada.

Su vista viajó de la pared a la puerta de aquella habitación, de la cual se asomó un sonriente Hoseok; Jungkook le devolvió la sonrisa un poco desconcertado de la presencia del castaño.

—¿En que puedo ayudarte, Hobi hyung? —preguntó sin apartar la mirada del contrario, quien con toda confianza se acercó y se sentó a su lado sobre la mesa.

—Vine a dejar a Yoongi, y de paso quise pasar a saludar. —respondió con una radiante sonrisa.

—¿Estas seguro que sólo vienes a saludar? —Hoseok soltó una risa y le miró con una divertida sonrisa.

—Puede que también haya venido por algunos besos. —confesó acariciando la mejilla del menor, acercándose suavemente a su rostro para unir sus labios en un cálido beso.

((🎐)) 誤り

—Oh, hyung, llegaste. —exclamó Taehyung con una sonrisa al ver a Yoongi entrar a su oficina.

El mayor soltó un sonido de afirmación sentándose en una silla al lado de Taehyung, quien lo abrazó por los hombros regalándole una sonrisa.

—¿Estás bien? —preguntó al ver que Yoongi evitaba su mirada a toda costa.

—Sí, todo bien. —hubo un silencio, pues Taehyung sabía que eso no era lo único que Yoongi tenía que decir. —puede que... durante el viaje hacia acá se me haya escapado nuestro secreto, y puede que el chófer me haya escuchado. —y tras decir eso Taehyung pálidecio.

—¿Q-que hi-hiciste qué?