POV SOPHIE
Quería estar sola, mi corazón se sentía roto.
Sabía que no debía confiar en él, pero me comenzó a gustar demasiado rápido.
No debí confiar en alguien como él, es un playboy, no cambian.
Estaba en una pequeña cabaña a las afueras de la ciudad, la encontré muy tarde ya que solo corrí, apenas la vi, entre por una ventana y resulta que daba algo de miedo, no era una nueva, estaba algo así como abandonada.
Busque un cuarto, cuando lo encontré, no era muy bonito, pero al menos había una pequeña cama.
A la mañana siguiente me levante súper cansada, vi la hora y eras las 2:37 pm. Dormí toda la mañana.
Vi las llamadas perdidas y era muchas, todas de Emiliano, y unas pocas de Becky y Mariano.
Y así mismo con los mensajes.
No entiendo ¿porque insiste tanto si esta con la otra? Se veía tan sincero, cuando me dijo que me amaba.
Se merece un premio, al mejor actor de todos.
Me levantó y no sé si ir a mi casa, no tengo ganas de verle la cara a ese idio**.
Pero de todas formas tengo que ir, tengo que cambiarme de ropa, ya que la maratón que di anoche me iso sudar como nunca.
Camino, ningún bendito auto me quiere llevar, no ando con dinero como para ir en taxi.
Cuando ya llevo unas horas caminando me doy cuenta de que estoy cerca de donde vivo.
Cuando a lo lejos puedo ver como Yael se baja de su motocicleta.
Me acercó para poder saludarlo y decirle que me acerque a mi casa. Pero algo me detiene, lo veo entrar en una cafetería, pero eso no es lo mejor.
Se sentó junto a una chica, la cual reconocí como la ex de Emi. ¿Pero qué hacía con ella?
Soy curiosa así que me adentre y disimuladamente me senté cerca de ellos para escuchar lo que hablaban, y eso fue la gota que rebalsó el vaso.
Salí de ahí corriendo, no me lo puedo creer, fui a casa y cuando entro busco a Emi, y lo encuentro, en el sofá abrasando un cuadro, no lo veo bien ya que él lo tapa con sus brazos, pareciera que no lo quisiera soltar, se be muy tierno, busco mi celular y le tomo una foto.
Pero como todo me sale mal, el flash y el sonido de la cámara lo despertaron. Solo lo mire, pero el en cambio, apenas me vio se paró y el cuadro voló, y lo siguiente fue que caí de culo al piso y un Emi abrasándome.
-¿estás bien? ¿Tienes frío? ¿Te hiciste daño? ¿Dónde dormiste? ¿Porque no me contestabas mis llamadas? CONTESTA MUJER QUE ME PONGO NERVIOSO- grito lo último mientras me abrasaba, y se pegaba a mí como un koala.
-no... Me dejas... Res.. Respirar- exagere, si podía respirar y todo. El enseguida se paró y me le bando y sentó en el sillón. -perdón- fue lo primero que dije.
-¿porque?- me dijo el extrañado.
-por no a verte creído antes-
-¿que? Espera no entiendo, ¿ya no estas enojada?- negué.
-supe algo que me iso sentir mal- Emi se acomodó y me tomo las manos.
-¿qué es, puedes contarme? Además no sé qué tiene que ver con el problema de Talia- suspire y comencé.
Flashback
Soy curiosa así que me adentre y disimuladamente me senté cerca de ellos para escuchar lo que hablaban,
-tenías que ser un poco más delicada, y ahora quien sabe dónde está Sophie- dijo algo enojado Yael.
-eso a mí no me importa, ella se largó a correr, me debes la mitad, ahora dámelo, y me largo- ellos tuvieron que ver en eso.
-no te olvides que el lunes en la universidad tienes que ir y besarlo en los baños y yo llevare a Sophie y así se querrá divorciar y claro yo la ayudare- me sentí estúp***, había confiado en él, se supone que era mi amigo, y resulta que ahora le está pagando a una per** para que nos separe, mis ojos picaron y salí de ahí corriendo.
Fin Flashback
-hijo de put*, sabía que no se iba a quedar tranquilo- dijo enojado Emi.
-me siento tonta, por no haberte creído- baje mi cabeza.
-tranquila nena, yo también me lo hubiera creído si Mariano viniera y todo eso-
-perdón- el me abrazo.
-tranquila, ya paso princesa- se separó de mí, y se paró frente a mí. -ven vamos a la cama, mañana es lunes y hay que estar preparados- yo asentí y nos encaminamos a las escaleras.
Ya en el cuarto de él, yo me fui al mío, tenía mi ropa ahí y necesitó un baño.
(...)
Estaba con mi pijama, pero cuando salí de mi cuarto en mi cama estaba Emi.
-pensé que dormiríamos en tu cuarto-
-si pero quería ahorrarte el camino a mi cuarto- Sonreí y me acomode a su lado. -¿dónde estuviste anoche?-
-no me di cuenta lo que corrí, que llegue a las afueras de la cuidad y había una cabaña y hay pase la noche- de un movimiento se puso arriba mío.
-¿cómo es eso de que estuviste en una jod*** cabaña sola, y caminaste más de... De... No sé cuánto, pero es mucho, te pudo haber pasado algo? Además ¿cómo estas segura de en ese lugar no vivía un pedófilo un asesino?- yo Sonreí
-tranquilo Emi, la cabaña estaba abandonada estaba llena de polvo y todo el rollo- pero él seguía con su rostro serio.
-te estoy hablando de algo serio y tú te ríes mejor duermo solo- iso el ademán de salirse de arriba mío, pero yo rápidamente enrolle mis piernas en su cintura y mis brazos los pase por su cuello y lo apreté a mí.
-perdón perdón, pero es que te ves muy lindo preocupado- sentí como sonrió y escondió su cara en mi cuello, y me abrazo.
-te amo nena, no lo dudes- sentí de todo en mi estómago, un put* zoológico.
-yo también te amo Emi- y me beso.
Fue el mejor beso, porque en él me decía cuando me amaba y cuanto me extraño.
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Hasta ahí.
