"Son dos mentiras, dos mentirijillas destinadas a tranquilizarse mutuamente.
Pero asi empiezan algunas mentiras. Simples mentirijillas. Bienintencionadas. Hasta que se vuelven demasiado gordas y ya no hay modo de manejarlas."
-Jane Corry
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—Un poco de maquillaje lo tapara— Se dijo a su misma la chica, mientras tapaba la marca de su mejilla —Perfecto...—
Ese dia hacía mucho calor, la joven ansiaba sacarse el suéter, pero sus marcas se lo impedían.
Al llegar a la escuela, las clases transcurrieron normal, bueno, normalmente calurosas, por lo menos para nuestra protagonista.
—No te sacaste el suéter en todo el dia, ¿No tienes calor?— Le pregunto su amigo ojiverde.
—¿Calor? Para nada...— Dijo la pelinegra tratando de sonar creíble.
Repito, tratando, porque el azabache se dio cuenta de que la chica le estaba mintiendo.
—Vamos... Te conozco demasiado para saber cuánto me estás mintiendo— El pelinegro miro a la joven alzando una ceja —Sacate el suéter, estas muriendo de calor—
La joven se resigno, de verdad quería sacarse ese suéter, así que, se sacó el suéter, pero escondió sus brazos bajo este.
De igual forma, gracias a su torpeza, el suéter se le cayó al suelo, causando que se tropiece con este, cuando el azabache fue a ayudarla, fue imposible impedir que viera las marcas de sus brazos.
—¿Que mierda te paso en los brazos?— Hablo horrorizado el azabache.
—No es nada...— Susurró la joven, volviendo a ponerse su suéter.
—¡No! ¡Quiero que me expliques esto! ¿Por qué tienes esas marcas?—
—No importa Miya—
—¡Claro que importa! Eso se ve doloroso, dime, ¿Quién te hizo eso?—
—No es de tu incumbencia—
—Dime—
—¡No te importa!—
—¡Si me importa! ¡Porqué tu me importas! Y mucho...—
Es silencio los inundó, la joven de ojos carmesí se puso igual de roja que sus ojos, y, esa sensación extraña en su estómago volvió a aparecer.
—No te preocupes Miya, solo, me caí, no es nada— Trató de evadir el tema la pelinegra.
—Esta bien, ___, si necesitas hablar, voy a estar aquí— El azabache soltó la muñeca de la chica, y le sonrió reconfortoriamente.
