- Shizune, después de que yo muera, ve a buscar al niño. El papá del niño es. . . Kakashi Hatake. Prométeme que. . . no irás a verlo con tu verdadero rostro. -
Shizune Kato se quedó parada en la sala de la villa de lujo mientras las últimas palabras de su maestra resonaban en su cabeza.
Hace seis años le diagnosticó cáncer a su maestra, por lo que Shizune Kato alquiló su vientre a sus veinticuatro años para juntar el dinero necesario para el tratamiento. Después de gestar por nueve meses, dio a luz a un bebé varón. De cualquier manera antes de que pudiera verlo por primera vez , se lo arrebataron, desde entonces, su maestra le recordaba el tiempo que le quedaba y, de nuevo, que nunca mostrara su verdadero rostro en público.
Ahora que su maestra Tsunade Senju había muerto, su único pariente vivo era ese niño.
-¿Tú eres su nueva niñera?- exclamó una voz masculina, grave y seductora. tomándola por sorpresa.
Sobresaltada y sin pensarlo, Shizune Kato levantó la cabeza para toparse con un par de ojos oscuros, una mirada fría que parecía penetrarle hasta el alma. Este era el padre de su hijo, Kakashi Hatake, bajó las escaleras lentamente, con una actitud gélida y aristocrática, a pesar de que lucía apuesto y encantador, denotaba peligro.
Shizune bajó la cabeza de inmediato, sin atreverse a verlo de nuevo.
- Sí, soy la nueva niñera, me llamo Shizune Kato.
- Shizune Kato , treinta años. Su tío falleció antes de tiempo y su tía murió de cáncer el mes pasado. Lo último que estudió fue. . . abandonó la academia de medicina - Hatake recitó su información de memoria, después frunció el ceño - ¿Por qué solicitas el puesto de niñera?
Sin levantar la cabeza, Shizune lograba percibir un tono de opresión en sus palabras:
- Deje la academia para cuidar de mi tía, no tengo ninguna experiencia, por lo que es difícil encontrar trabajo, entonces cuando vi que el clan Hatake solicitaba una niñera sin requisitos, vine a probar mi suerte.
- ¿Es difícil encontrar trabajo? Entonces ¿Cómo pagaste los gastos médicos de tu tía los últimos años?
Sabiendo de antemano que sospecharían de ella, había preparado una explicación perfecta.
- Les pedí dinero prestado a mis amigos y familiares varias veces, por lo que me urge encontrar un trabajo para pagar mis deudas.
- El Clan Hatake no es el único que solicita una niñera.
- Pero el salario que ofrece, es el más alto y necesito dinero - respondió con calma Shizune.
Con el ceño fruncido, Kakashi miró de arriba abajo a la mujer de apariencia humilde frente a él, a pesar de que su respuesta había sido muy sincera y razonable, aún sentía que había algo raro.
Justo cuando iba a abrir la boca para hacerle otra pregunta, una sirviente interrumpió.
- Sr. el pequeño está despierto y llorando, quiere verlo.
Kakashi se levanto para ir a echar un vistazo rápido, ya que en breve tendría una junta muy importante, levanto la vista y le dijo a Shizune:
- Solo te puedes quedar si mi hijo te acepta. ¿De acuerdo?
- Sí, definitivamente cuidaré muy bien al pequeño.
La voz de Shizune que normalmente era calmada y serena, ahora se escuchaba con un toque de emoción y alegría.
Tan pronto como Kakashi Hatake salió, la sirviente expresó:
- Apúrate y sígueme, el pequeño está haciendo una rabieta y no es fácil calmarlo.
Al oír eso Shizune se apresuro.
- Pequeño debes comer algo, si no lo haces te enfermarás.
- ¡No quiero comer, no me moleste! ¡Quiero ver a mi papá!
Conforme se acercaba al dormitorio, el ruido del alboroto se podía escuchar más fuerte.
La voz era clara, de un niño pequeño, ella sin darse cuenta se apresuro cada vez más notándose un brillo en sus ojos.
Era su hijo, ¡el hijo que ha estado echando de menos por cinco largos años!
>>Finalmente lo voy a ver<< pensaba
Controlo sus emociones pues no quería que estás la delataran, dirigió su mirada al niño adorable que estaba en la cama.
El pequeño estaba envuelto en una sábana, solo con la cabeza descubierta y con su cabello muy enredado, en ese momento tenía la cara toda arrugada y los labios apretados con un dejo sutil de rabia, se veía realmente tierno.
Ella había soñado con su apariencia miles de veces, pero nunca imagino que se veía tan delicado, de no haber sido por sus rasgos masculinos, ella había pensado que se trataba de ella , justo como cuando era pequeña la única diferencia en los dos era el color de cabello, no cabía la menor duda ese niño era su hijo, aquel que no pudo conocer al nacer.
El lazo sanguíneo entre ellos hizo que su corazón latiera de manera violenta, controlándose para evitar el impulso de abrazarlo.
- ¿Akashi? - mencionó
Akashi Hatake volteó a verla y frunció el ceño ligeramente.
- ¿Quién es usted señorita?
- Soy Shizune Kato, su nueva niñera - Shizune intentó sonreír pero su voz temblaba un poco.
De brazos cruzados el pequeño se le quedó viendo fijamente.
- Señorita Shizune ¿Está aquí también para seducir a mi papá?
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¡Hola!
Hace tiempo leí está historia y recientemente la volví a encontrar . . . tome la decisión de adaptarla para un fanfic Kakashizu
Si, se toman el tiempo de leerla, díganme que les parece
Si, le sigo o la dejo por la paz
Saludos!
