Shizune volteó abruptamente y se quedó boquiabierta con incredulidad después de que Kakashi pronunció las palabras.
¿No me entendiste? –
¡No! – grito olvidándose de sí misma – ¡No me eche de aquí! – Al fin había logrado entrar después de todo el trabajo que hizo para crear una relación amigable con Akashi, por lo que, en definitiva, no podía irse ahora.
Frunciendo el ceño ante tal respuesta negativa, Kakashi se aproximó hacia ella paso a paso, como si un aura muy imponente se apresurara hacia ella, Shizune se retiró paso a paso hasta que su espalda tocó la fría pared.
Trago salvia antes de expresar – Solo me agrada Akashi, me agradan los niños, no hay malas intenciones de mi parte para él, ni para el Clan Hatake, ni para usted – volteó la cabeza y miró en otra dirección, pues no se atrevía a encontrarse con la mirada de Kakashi.
Después de ver que él no se movía, alzó su mano derecha hacia los cielos dijo – Yo Shizune ¡Juro que moriré si he de atentar contra su familia! – Los latidos de Shizune se aceleraron y su rostro se calentó al sentir cómo las ráfagas del cálido aliento de Kakashi golpeaban su rostro.
Al ver que su pequeño rostro se teñía de rojo y su cabello se soltaba de a poco en sus mejillas por la fricción con la pared, Kakashi sintió como si los rasgos de esta mujer fueran más exquisitos de cerca, tal vez era la luz en ese momento, ella le resultaba incluso un poco atractiva, conforme su mirada bajaba, podía sentir que ella respiraba con más fuerza, cuando de repente, sus pechos se elevaron y entraron en su línea de visión, de pronto la empujó, sus ojos se oscurecieron y pronuncio – Tu promesa de vida o muerte no basta para cambiar mi decisión, solo vete – después se dio la vuelta y no volvió a dirigirle la mirada.
Nunca permitiría que Akashi estuviera en peligro por una mujer.
Shizune se tambaleo, solo logro estabilizar su cuerpo al recargar su mano con firmeza en la pared ¿Cómo podría permitirse ser echada sin más? Añoro por cinco años antes de por fin conocerlo y solo interactuó con él durante poco más de un mes ¿Cómo podía tan solo irse así? ¡No, eso nunca!
Sakura era el médico tratante de mi tía cuando ella enfermó, con frecuencia se encontraba hospitalizada o tenía que ser visitada en casa, Aoba lo conocí en mi pueblo cuando la Quinta Hokage visitaba el lugar yo era ayudante en un orfanato en ese entonces, creo él era parte de la seguridad del Hokage, por eso con el paso del tiempo, los conocí a ambos, no los conozco muy bien solo tenemos una amistad ordinaria, hoy los vi por casualidad en la torre cuando fui a entregar sus medicinas, tampoco quise faltarle al respeto de esa manera en el momento en que me habló, pero. . . de la nada llegó mi periodo y se ensucio mi kimono, fue por eso que cuando lo vi, no me pude poner de pie, ni pude explicarlo frente a tantas personas, no lo hice a propósito –
Shizune explico de manera incongruente su relación con Sakura y Aoba ¿El conocer a Aoba era la causa de que este hombre sospechara de ella? Entonces si ella le contaba todo a detalle ¿la dejaría quedarse?
Kakashi que caminaba alrededor de su escritorio, se sentó en la silla detrás de este, sostuvo una pluma en su mano mientras fijaba su mirada en un documento que tenía en la otra mano, sin embargo, no hizo ningún otro movimiento.
No le sorprendía la relación que Shizune tenía con Aoba y Sakura, puesto que le pidió a Gai que lo investigara, no obstante el hecho que lo sorprendió fue que ella tuviera su periodo, cuando pensó en ella cambiándose de ropa, la molestia en su interior disminuyó.
Después de ver que no estaba dispuesto a cambiar de opinión, el corazón de Shizune se apagó, ella quien se sostenía con una mano contra la pared, se enderezó, lo miró y añadió – Solo me agradan los niños, me agrada Akashi ¿Qué más quiere para que pueda confiar en mí? –