Anorexic Love

''Matthew Beats''

¿Dónde se supone que estabas? –

Escuché desde lejos, ignoré las conversaciones ajenas en los pasillos de la escuela. Sentí pisadas pesadas detrás de mí. Tragué saliva y seguí caminando hasta mi clase, saludé a un compañero e intenté entablar una conversación amistosa con él. Ignorando lo que pasaría.

Te estoy hablando –

Colocó un brazo entre nosotros, puse los ojos en blanco. El chico se despidió de mí, nervioso, seguidamente entró a nuestra siguiente clase.

No puedes hacer eso –Dije y él frunció su ceño– Interrumpir las conversaciones de los demás… –Hablé obvia–

¿En serio? –Río sarcásticamente– Tú no puedes hacer eso.

Mis mejillas se calentaron.

¿Hacer qué? –Respondí–

Jasson bufó y se jaló unos cuantos mechones de su cabello, luego sus manos bajaron hasta su cuello. Sus ojos verdosos me carcomieron, y, por un momento, me sentí pequeña ante él.

Dejarme semi-desnudo en tu cuarto con tu madre en el primer piso –Susurró Jasson– Y tu hermanito al lado.

No sabía si susurraba para que quede entre nosotros o por lo vergonzoso que había sido esa situación. Hay que admitirlo, lo que había hecho era una prostitución para él.

Tuve que pedirle ayuda a Dylan –Continuó– Y, digamos que él no hace favores sin algo a cambio.

–Asentí– ¿Qué hiciste?

Recuerdo haber recibido la llamada de mi madre más de una vez y un millón de mensajes de Dylan, algo así como:

«Mira, hermanita. Sé que somos familia, pero… ¡Ag, ven aquí a solucionar tus propios problemas!»

«Tu novio me está pidiendo un favor y, exactamente, no puedo decir que es un favor no-gay»

«¡¡Quiero que muevas ese culo flácido hasta aquí!!»

«¿Amy?, ya se fue»

Sonreí por Dylan.

Tu hermano me ayudó –Negó con la cabeza– No quiero entrar en detalles.

Claro… –

El timbre tocó, todos los alumnos se dispersaron a sus respectivas clases. Jasson me miró desesperado, no entendí. Entré al curso ignorando todas las miradas e ignorando el hecho que él aún estuviera ahí afuera, en el pasillo. Ignorando el hecho que me tomó una hora fuera de casa para no enfrentar a Jasson, al menos su cariño familiar. Ignorando el hecho que mi hermanito considera a Jasson, posiblemente, gay. Ignorando el hecho que Samantha Lesgins estuviera interesada en el chico que me atraía. Me senté al lado de aquel chico, lo miré, recordaba su nombre vagamente. Noté que se removió de su asiento incómodamente, luego su mirada se entrelazó con la mía. Al parecer, Jasson no era el único acosador con miradas aquí.

Lo siento –Dije– Intentaba recordar tu nombre…

¿Tres meses de escuela y aún no sabes los nombres de tus compañeros? –Preguntó burlón–

–Reí– Soy muy mala para los nombres.

En ese momento, varios estudiantes entraron corriendo al curso. Seguro alarmados porque vieron al profesor de camino.

Soy Matthew Beats –

¿Cómo la marca de audífonos? –Pregunté burlona–

–Asintió– Sería irónico que trabajara en una tienda de accesorios y me gritaran «¡Hey, Beats! –Levantó un brazo– ¡Trae en par de Beats aquí!» Y yo vaya sonriente sin los audífonos hacia el cliente…

No había plantado un chiste de tu apellido aún –

¿No? –

–Negué– Solo te conocí hace dos minutos. Amigo, no soy tan rápidamente malvada.

¿Así que amigo? –Asintió– Me agradas, no solo por tu lento razonamiento, pero me agradas.

¿Debería sentirme alagada? –

Sí –Río– Acabas de recibir la aprobación del futuro heredero de la mega empresa Beats.

No jodas –Hice una seña con la mano para que parara de hablar– ¿Eres hijo del dueño de Beats?

¡Claro que no! –Chilló– Lo seré, solo porque sería irónico.

¿Cuánto tiempo te toma hacer malos chistes de tu apellido irónico? –Pregunté–

El mismo tiempo que se tarda el profesor en llegar –

Miré el reloj del curso, ya habían pasado veinte minutos desde el toque.

¿Crees que se haya caído por las escaleras? –Cuestioné–

La última vez, eso le había pasado al profesor de biología. Tuvimos un reemplazo de inmediato, al cual mi nivel, le hizo su materia imposible de explicar. En otras palabras, bullying.

Creo que ha tenido una emergencia en el baño –

Lo miré confundida.

Es que… –Continuó– Lo vi comerse un burrito antes de venir, es mi vecino.

El profesor entró a la clase, todo mi nivel guardó silencio. Aquel profesor parecía ser más de deportes, el miedo ya lo emitía naturalmente como uno. Miró a Matthew y luego asintió. Fue como si hubiera comprobado que él estuviera aquí y que no se había dado a la fuga colegial. Entonces pensé: ¿Será algo más que su vecino? La pregunta me llevó a pensar cómo Jasson me acompañaba de retorno a mi casa. Y, es que todo se volvió así desde que lo conocí. Todos mis pensamientos terminaban en él. Él, él era algo más que un simple pronombre. Digo: Él es él.

Estuviste perdida toda la clase –Dijo Matthew– ¿Qué pasó? ¿Ya te has enamorado de mí?

¿Por qué tendrían que enamorarme de ti? –

Soy Matthew Beats –Dijo obvio–

–Negué– Estoy empezando a creer que eres algo egocéntrico, Matt. ¿Te puedo llamar Matt?

Ya lo estás haciendo, ¿no? –Habló–

Caminé hasta llegar a la puerta final de la escuela que daba al patio, varios metros de pasto fresco llegaron a mi campo visual. Sentí su presencia detrás de mí.

–Asentí– Hablas como si el nombre dijera todo sobre ti.

Lo hace –Contra-atacó– Amy Monroe. ¿Te puedo hacer una pregunta?

Ya la estás haciendo –Dije mirando a los niños y niñas correr–

Estábamos en el receso de quince minutos.

Entonces… –Dijo pensativo– Te haré un pregunta.

Asentí.

¿Quieres salir conmigo a comer por ahí? –