Again You | Choi Soobin (2)

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Dadas las tres treinta de la madrugada, luego de haber finalizado tal celebración, Soobin y yo habíamos decidido detenernos en la orilla del mar y así lo hicimos. Él se encontraba a mi lado con una postura relajada con el sonido de las olas chocando como nuestra compañía..

—Hay veces que me pongo a pensar en el futuro..— Habló Soobin a mi lado sujetando suavemente de mi mano mientras sonreía con sus ojos clavándose sobre la arena, lo miré con atención sintiendo el mismo cosquilleo de siempre recorrer mi estómago y sólo me mantuve en silencio esperando a que dijera algo.

—¿Y qué quieres para el futuro?— Pregunté tras notar que no agregaba algo a lo que antes había dicho, en silencio esperaba por su respuesta, está vez manteniendo mi vista fija en el horizonte mientras flexionaba mis rodillas.

—No lo sé..— Se encogió de hombros resplando sonoramente.— Últimamente lo he pensado y llegué al punto de creer que he elegido la carrera equivocada..—Soltó acompañando sus palabras con una risa nasal que venía más con ironía.— Pero no puedo cambiar nada, estamos en el último año. Se me terminó el tiempo..

—Siempre llegan oportunidades, Soo.

—Lo sé, Boyoung.— Respondió.— Pero mi punto es que últimamente no sé que quiero para mí y mi futuro.

—¿De qué hablas?

—He estado pensando mucho y últimamente estoy muy inseguro con todo, con mi vida, con nuestra relación..— Confesó.— Quizás sólo le tengo miedo al futuro y lo que pueda pasar.

Tragué saliva en seco al darme cuenta del punto al que quería llegar, en un par de veces también lo pensé y le dí mil vueltas al asunto, y aunque aún no tenía planificado que haría en un futuro había algo de lo que estaba segura, tarde o temprano perdería lo que tengo con Soobin porque nada es para siempre y aunque trataba de alejar esos pensamientos de mi cabeza no podía, en cualquier momento de mi día mi cabeza sólo decía: “Sólo están postergando lo inevitable” y sabía que era cierto, era tan jodidamente cierto que me dolía el pecho tan sólo volver a recordar esas cinco cortas palabras. Apreté los ojos con fuerza desvaneciendo una vez más aquellos pensamientos y relamí mis labios observandólo en silencio ideando algo que agregar al respecto.

—Entonces deberías dejar de pensar en eso, va pasar lo que tenga que pasar ¿de acuerdo?

Pareció procesar mis palabras por un par de segundos para terminar asintiendo con los labios apretados y apenas logró dibujar una sonrisa sobre sus labios, en ese justo instante no supe que más agregar al respecto pero mi cabeza sólo pensaba en decirle lo que mi cabeza tanto repetía, sabía que jodería todo si lograba abrir la boca.

En respuesta, sonrió con dulzura asintiendo.

—De acuerdo.

—¿Tienes hambre?— Dije en cuanto sentí un extraño ruido de mi estómago que él no notó.

—Es muy tarde para comida, yo no..— Respondió y sus ojos de inmediato buscaron a los míos.— ¿Tienes hambre?

—Uhm, si.

Apretó sus labios haciendo lucir sus llamativos hoyuelos y sacó su celular tecleando algo en la pantalla con suma rapidez, luego de revisar un par de cosas en el aparato sobre sus dedos, se aclaró la garganta y guardó su celular poniéndose de pie para extender su mano frente a mi, mis ojos se enfocaron sobre sus largos dedos y no dudé ni un segundo en posar mi mano sobre la suya con suavidad. Levantándome de un tirón, me sonrió deslizando su dedo índice por mi mejilla dejando un pequeño beso sobre ella.

—¿Quieres algo de ramen? Es algo tarde y creo que es la mejor opción..

—Ramen está bien.— Sonreí.