Again You | Choi Soobin (2)

60.

Había salido a correr a una unos deportiva que se encontraba a unas cuantas cuadras del departamento, desde que Hyejin me había obligado a ir con ella, ir a ese lugar me había gustado tanto que le había tomado un gusto bastante exagerado a salir a correr. Sin quitar el hecho de que había notado un cambio en mi cuerpo, estaba volviendo a subir de peso y nuevamente me importaban las medidas de mi cuerpo, y eso me era preocupante. Por eso había tomado el hábito de salir a correr todos los días. De regreso a casa recibí una llamada, la cual no tarde en contestar. Minutos después, luego de haber discutido con la persona tras la línea seguía en la llamada y en el mismo tema de discusión en cuanto llegué al departamento.

—Mamá, yo..— Cerré los ojos con fuerza tras cerrar la puerta de entrada con mi espalda, recargandóme sobre la superficie.— No sé si tengo ganas de ir a Corea éste año.

—¿Qué dices Boyoung?— En efecto mi respuesta había sido la razón por la que me había condenado a muerte. La mujer habló indignada y enojadisíma.— ¿Cómo crees? Boyoung, es año nuevo como piensas quedarte allá en Italia, ¿sola? ¿qué tienes? ¿sucedió algo?

—No mamá, sólo prefiero quedarme aquí..— Murmuré despacio.— No tengo ganas de nada, ni viajar, ni fiestas, nada.

—Te mandaré un boleto de avión.— Dijo, haciendo caso omiso a lo que dije anteriormente y comenzó a ordenarme. Luego de eso, la mujer terminó colgando dejándome en claro que me mandaría ese boleto de avión y me haría ir a Corea para año nuevo de alguna u otra manera.

Dejé el celular sobre la mesa de la cocina y deslicé mis manos por mi rostro frustrada, respiré hondo y me dejé caer sobre una de las sillas de la cocina. En silencio, tomé mi celular revisando unos cuantos mensajes y alguna que otra red social. Había pasado navidad junto con Hueningkai, Suzy, Hyejin, Beomgyu, Taehyun, Young, Chungmin, Yeonjun y Soobin. Que había sido un buen día, pero con la fecha en Italia marcando el veintinueve de diciembre y en Corea siendo el treinta, todos habían tomado su vuelo el día de ayer. Hueningkai conocería a los padres de Suzy y pasaría con ella el año nuevo, por lo que viajaron a Corea. Taehyun, Beomgyu y Hyejin se iban ésta noche, Young y Chungmin se habían ido de Italia dos días después de navidad y por la llamada de Soobin por la madrugada, él había dicho que su vuelo a Corea había salido por la madrugada y en efecto, se terminó yendo con su mejor amigo también. Y sólo yo quedaba, sentada en la mesa sola con mis ojos alejándose de la pantalla de mi celular y mis labios apretados pensando en qué debería hacer. A nadie le gustaba pasar año nuevo solo sin su familia, pero desde que me había encontrado con Beca había caído en una extraña depresión y las épocas de diciembre siempre me traían melancólica en exceso.

Suspiré tratando de controlar la extraña sensación del pecho y me levanté de la silla sacando la mermelada de la alacena y bajé de encima del frigorífico la bolsa con panes para sandwich. Miré el reloj analógica de la cocina, marcaban las seis de la tarde y deslicé mi mirada hacía la pequeña ventana de la cocina, el sol comenzaba a ocultarse. Me encontraba desesperada, no sabía que hacer y eso sólo me frustraba, todos se habían ido a Corea y yo me quedaría sola en Italia..

No sería una buena forma de empezar un nuevo año, pensé.

Regresé todo a su lugar de inicio y terminé en mi habitación tirada en la cama minutos más tarde. Tomé mi celular que se encontraba a un lado de mi y decidí reproducir un poco de música, la playlist en cuanto se comenzó a reproducir me hizo viajar tiempo atrás.

Ése viaje a Busan.

Soobin ahí, en el mismo lugar.

Beca y Soobin.

Todo fluía como si de una película en mi memoria comenzara a correr con velocidad, las lágrimas ya se deslizaban por mis sienes hasta bajar por mi cabello debido a la posición en la que me encontraba. Cada parte de mi cuerpo recordaba cada sensación tanto internamente como externa, y aunque eso era parte del pasado aún dolía. Cerré mis ojos recordando todo lo que hice, el conocer a la hermana de Soobin, mi primer beso robado por él...