Ojos de miel.

Capitulo 20

Mo se levantó porque un fuerte aroma llegó a sus fosas nasales haciendo que su cuerpo reaccionara al olor y se calentara pero rápidamente abrió el cajón de su mesita de noche y cogió los supresores que tenía ahí para reprimir todo lo que le pudiera afectar el celo del alfa.

Mientras tanto He Tian estaba en su cama retorciéndose de dolor e incomodidad destrozando la cama, desnudándose y sudando a mares.

- ¡DALAI! ¡DALAI!- Llamaba He Tian a su mayordomo desesperado.

Dalai entró a su habitación con supresores dándoselos al alfa a la fuerza haciendo que se llevará una mordida en la mano.

- ¡LLÁMALE! ¡LLÁMALE!- Gritaba el pelinegro.

Dalai salió de la habitación, cogió el móvil y llamó a alguien que éste enseguida llegó a la casa.

Cuando Mo decidió salir a desayunar vio a un omega rubio, con un collar en el cuello para evitar que le mordieran, que estaba entrando en la habitación de He Tian.

- Ahora le preparo el desayuno señorito Mo Guan Shan.- Le habló de repente el mayordomo haciendo que el pelirrojo apartara la mirada del omega.

- Avisame cuando esté.- Dijo Mo metiéndose otra vez en su habitación.

El pelirrojo estuvo esperando a su desayuno escuchaba al omega gemir.

Cuando bajó a desayunar escuchaba también a He Tian gruñir, suspirar y gemir fuertemente y eso a Mo le desagradaba bastante.

Cuando los ruidos cesaron el omega salió de la habitación del moreno y bajando abajo para sentarse en la mesa junto al pelirrojo y esperando también un desayuno.

Mo le miró con mala cara por como olía a He Tian, pero el omega ni siquiera lo miró.

- Toma.- Dijo Dalai sirviéndole el desayuno y dándole unos cuantos billetes.- ¿Puedes venir esta tarde?

- Vale, pero pagarme más, He Tian lo hace muy fuerte y hace daño.- Contestó el omega.

- Está bien.- Respondió el mayordomo sin ninguna objeción.

El pelirrojo le seguía mirando con mala cara.

- Hola.- Le saludó el omega con una sonrisa.- ¿Quién eres?

- ¿Y a ti que coño te importa?- Respondió el pelirrojo con otra pregunta.

- Es Mo Guan Shan.- Contestó Dalai por Mo.- El hijo de la nueva mujer de He Joon.

- ¿No vas al instituto?- Volvió a preguntar el omega al pelirrojo.

- Vuelvo a repetir ¿Que cojones te importa?- Respondió Mo cada vez más molesto por la presencia del omega.

- No, nuca va.- Volvió a contestar por él el mayordomo cosa que molestó mucho al pelirrojo.

- Deberías ir, luego te arrepentirás.- Le volvió a sonreír con cierta ternura.

- Te voy a partir la cara gilipollas.- Le amenazó el pelirrojo.

El omega le dejó en paz y se concentró en acabarse el desayuno en silencio mientras miraba su móvil.

El omega era muy diferente a Mo, éste tenía una cara muy femenina, era delgado, sumiso, bajito, y de delicado al igual que casi todos los omegas pero Mo era alto, musculado, con una actitud de mierda haciendo que mucha gente lo confundiera con un alfa.

Cuando el omega terminó de desayunar se levantó en silencio hasta la salida, pero antes de salir se giró y miró al pelirrojo.

- Deberías ponerte un collar mientras convives con un alfa en celo.- Dijo el omega.