Dí mi nombre.
Si me amas, dí mi nombre.
Porque todo dejé,
pero a ti no quiero dejarte ir.
Me llamas por mi apellido,
porque te recuerda
a aquella persona con la que tengo parecido.
Dí mi nombre.
Si me amas, dí mi nombre.
Porque aquí me encuentro sentado,
esperando por tu llamado.
No mi apellido, no digas mi apellido;
porque aquello me recuerda
a la persona de la que he nacido.
Dí mi nombre.
Si me amas, dí mi nombre.
Porque a quiero creer
que todo este tiempo, que todos esos momentos
me mirabas a mí,
no a la persona gravada en tus recuerdos.
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50 poemas que delatan
PoesíaDiversos poemas, que he escrito sin ninguna experiencia, espero que aún así puedan disfrtutarlos.
