Cap VIII: Pongamos en marcha

67 6 1
                                    

- Han pasado ocho horas y nada. Gritó el rubio ya empezaba a incomodarte con el dolor incesante de aquel brazo.

- Debes calmarte y no lo nuevas por favor. Solamente lograrás dañarte más. Respondió la muchacha sujetando el brazo del joven.- No te preocupes la inflamación bajará. Le murmuró amablemente.

- Por cierto...Uhmm...Tu me. Nada olvídalo. Se apoyo en la pared.» Mierda ni eso puedes decir«.

- Naruto-kun, crees que apartir de ahora nuestra vida sea así.

- ¿Por qué lo dices?. Rascó su cabeza frunciendo el ceño.- Esto no es un sueño mío. Sonrió.

- Así que pensabas todo este tiempo que estabas en sueño tuyo. Llevo el dedo al mentón.- ¿Entonces no soy real?. Con una mano traviesa presionó el brazo inflamado del rubio.

- ¡Ahhhh!. Eso duele. Gritó el chico de ojos azules.- No eras la que me estaba cuidando. Se quedó con cara de póker un momento.

- Verdad. Sonrió.-Pero creó que este sueño es demasiado real. ¿Y tú qué opinas?.

- Ahora que lo dices es verdad. Se supone que los sueños no duelen. Quedó pensativo unos segundos.- Entonces si no es un sueño. ¿Cómo carajos esta esto lleno de muertos vivientes?. Se exaltó.

- Pues no tengo la respuesta a tu pregunta. Solamente se que no parece ser una ilusión. Se quitó el pellizco que llevaba en el pelo, le echo dentro de su cartera, saco una cinta y se hizo un moño de tal manera que su cabello no entorpezca sus movimientos.- Aún estas ahí. Se acercó un poco al joven, paso la mano por su rostro.- Parece un gatito. Sonrió.- Al parecer se durmió
.
.
.
.
.

- ¡Ahhh!. Dejó salir un gran bostezó, estiró sus manos lo más que pudo. Percatándose que el dolor de su brazo prácticamente había desaparecido.- Jala, me siento mucho mejor. Dió varias vueltas a su mano.- Está como nueva. Pues al final no era un sueño. Un momento, dónde está Hinata. Miró por todo el lugar, no parecía haber rastro de la muchacha.

- No jodas qué fue un sueño. Se quejó. Se puso de pie y camino con cuidado para evitar tropezar entre semejante cantidad de tuberías.-¡Hinata!. Gritó, la única respuesta a su llamado fue su propio eco.

- Shhhh. Sintió un leve murmullo que provenía de una puerta cercana al lugar donde se encontraba.- Naruto-kun, no hagas ruido están por todos lados. Volvió a susurrar la dulce voz de la muchacha.

En rubio se acercó lentamente y entro en aquella pequeña habitación, que tenía una ventanilla que daba a la calle.

- ¿Qué haces?. Preguntó el joven silenciosamente.

- Todo el tiempo que llevas durmiendo, he estado mirando por aquí. Te sorprenderás lo que he descubierto, mira. Tomó una llave de la caja de herramientas, la lanzó tan lejos como pudo contra unos contenedores metálicos de basura. Hizo un gran escándalo el contacto de ambos metales, para la sorpresa del jóven todos los muertos vivientes corrieron como locos encima de los contenedores.

- Entonces que pasa comen metal también. Se rascó la cabellera rubia intentando darle sentido aquel suceso.

- No tonto. No ves que los atrae el ruido. Sonrió la joven agitando un poco la cabeza.

- Esto quiere decir que podemos pasar entre ellos mientras no hagamos ruidos. Chocó uno de sus puños con la palma de su otra mano.- Si es así es prácticamente pan comido.

- No creó que sea así. Por ejemplo si llegáramos a salir nos atacarían instintivamente, pienso incluso que ignorarían el ruido. Cerró los ojos y dió un pequeño suspiro. - Todo lo que te acabó de decir es simplemente un teoría, no sé si realmente pueda ser así. Me entiendes. Agitó su cabeza de un lado a otro buscando al chico rubio de ojos azules. - ¿Dónde estás?. Dijo varias veces con una silenciosa.

Sin lugar a dudas al asomarse por la ventana se encontró con la presencia desafiante de un joven que no parecía temerle a la muerte. Caminaba lentamente cada paso delicado para evitar el mínimo ruido. A Hinata se le pusieron los pelos de punta y el miedo la estaba consumiendo. ¿Quién era lo suficientemente tonto como para jugarse la vida probando una teoría?.

- No puedo mirar-. Tapó sus ojos con sus manos, no quería toparse con una escena aterradora allá fuera.

Naruto parado con una mirada desafiante sin temor alguno, esperaba ser completamente invisible si no producía, ningún sonido. Tomó una piedra y la lanzó contra los contenedores, naturalmente los muertos corrieron hasta dichos contenedores, pero al percatarse de la presencia del joven, el objetivo de los zombis cambió. La sed de carne era el único gesto que se podía notar en su rostro.

- Vengan a por mí. Echó a correr con todas su fuerzas y con el mínimo trabajo logro atravesar una cerca. Sonrió del otro lado, mientras los zombis intentaban tirar abajo la cerca que los separaba del joven.- No son tan malos ahora. Volvió a soltar una carcajada cuando sintió el chirrido de la cerca torciéndose, era bastante resistente pero se estaban acomulando demasiados zombis en el lugar.

- Acaso eres tonto. Gritó Hinata abriendo la puerta.

- Verdad ahora debo dar la vuelta-. Se volvió a trepar por la cerca mientras con varios movimientos audaces llegó a la segunda planta de la terminal dónde lo esperaba la joven.

- ¡Como se te ocurre hacer semejante acto, estas jugando con tú vida!. Acoso sigues creyendo que esto es un sueño. Gritó la muchacha.

- Pero si no paso nada malo-. Sonrió rascando cabello.

- Y si no hubieras podido saltar esa cerca. O si no hubiera aguantado tu peso-. Reclamó Hinata que con cada palabra se ponía cada vez más roja.

- Pero si a la cerca no le pasó nada-. Forzó una sonrisa el rubio, mientras a sus espaldas se iba al piso la dichosa cerca.» Me hizo que dar mal«. Pensó.

- Ves a lo que me refiero, no puedes actuar por instinto-. Volvió a regañarlo la peliazul.

- Por cierto que día es hoy-. Rascó la cabeza el joven intentando aclarar sus ideas.

- Viernes. No ya es sábado-. Se rectificó a si misma.

- ¡Sábado!-. Gritó desesperadamente.- ¿Cómo que Sábado?-. Replicó asustado.

- Creo que es sábado-. Levanto la ceja la joven al desorientada por la reacción de Naruto.- Hay algo malo-. Volvió a preguntar.

- Apresúrate y coje tus cosas tengo una reunión con mis amigos-. Gritó el joven entrando a la sala de máquinas para recoger sus cosas.

- Pero....-. Reclamó la chica que fue completamente ignorada.- Espera-. Se puso frente a Naruto de nuevo.- Vamos a dejar este lugar que es seguro, para ir a una supuesta reunión. Cuando ni siquiera sabes si están con vida-.

- No lo creó-. Cambió completamente su expresión.

- Lo están-.....
•••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••

Disculpen la demora, espero que les guste... Ya saben lo de las estrellitas.

Agradecimientos a:

JanyreMilagrosVeraFa
Eztherar

HunterZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora