Rise Up |Larry Stylinson|

Capítulo 3.

Durante la primera noche todos decidieron no hacer nada, el viaje había sigo agotador así que fueron directamente a la cama para poder descansar como debían.

Pero claro, Harry es el primero en despertar, estaba acostumbrado a madrugar ya que trabajaba en una panadería durante el fin de semana para poder ayudar a su madre a pagar el arancel de su carrera.

El ojiverde se incorpora de la cálida cama y lo primero que hace es ver su celular, revisa las notificaciones y luego frunce ligeramente su ceño ante el número de llamadas perdidas que había en su móvil.

No sabía hasta cuanto tiempo más aguantaría.

Decide responderle brevemente para no desaparecer por completo y luego apaga su celular para poder pensar en otra cosa.

Sus pies descalzos chocan con el frío suelo de madera y camina rápidamente hacia la ventana para poder mirar hacia afuera.

La mañana estaba perfecta, así que abre un poco esta para dejar que el aire puro choque con su rostro.

Amaba la mañanas frías.

Lame sus labios y camina hacia el closet de la habitación, abre uno de los cajones de este y saca una de sus toallas.

La pone sobre su hombro mientras rebuscaba en los cajones su cepillo de dientes junto a su pasta dental.

Abre un poco la puerta de su habitación para que el oxígeno circulara por toda la casa y mientras tararea una canción se mete al baño de su habitación, joder, era increíble como cada habitación tenía un propio baño.

Sabiendo que tenía todo el tiempo del mundo antes de que Zayn, Niall o i incluso Louis despertaran decide relajarse y no estar tan frenético.

Abre la llave del agua caliente y con su mano verifica que el agua sí saliera cálida, se mete bajo la lluvia artificial y cierra brevemente sus ojos para dejar que su cuerpo se desestensara.

Harry jamás derrochaba agua, así que sus duchas eran demasiado breves, cada vez que se alejaba del agua para poder lavar su cabello con calma o enjabonar su cuerpo, cerraba la llave del agua.

No le gustaba sobre explotar ese recurso natural.

El ojiverde suelta un suspiro ante lo relajado que había quedado, toma la toalla que había llevado y seca su cuerpo para luego amarrar dicha toalla en su cadera.

Pone pasta dental sobre su cepillo de dientes y apoya una de sus manos en el borde del lava manos, se mira fijamente en el espejo mientras lavaba sus dientes.

Extrañaba escuchar música, Zayn le había prohibido llevar audífonos con la excusa de que no quería que quedara sordo tan joven.

La situación era que Louis era un madrugador innato, estaba acostumbrado ante sus clases en la Universidad, solía elegir las que comenzaban más temprano para luego tener el resto del día libre.

Así que el hábito de levantarse temprano se había quedado con él, estaba recién levantado y solía lavar sus dientes para luego ducharse, era un poco extraño porque él hacia todo al revés y ahora que estaba rebuscando en su pequeño bolso de útiles de aseo, pudo notar que no había traído una pasta dental consigo.

Le preguntaría a Niall, pero desde su habitación podía escuchar los ronquidos del irlandés, así que se asoma por el pasillo.

La puerta de la habitación de Zayn estaba cerrada en cambio la de Harry estaba entreabierta así que suponía que ya estaba despierto.

Suelta un suspiro aliviado y toca la puerta un par de veces con su puño.

—Pasa— a penas oye la confirmación de que Harry estaba despierto entra a la habitación de este y ve que la ventana estaba entreabierta— ¿te pasó algo?

Louis quita la mirada de la preciosa vista que había tenido Harry al elegir esa habitación y pone su mirada sobre el ojiverde.

Louis entre abre sus labios para poder decir algo, pero lo único que hace es parpadear un par de veces y mantener su boca abierta.

Harry tenía una mariposa tatuada en su pecho y también tenía hojas de laureles en su abdomen, cerca de sus clavículas tenía dos golondrinas y miérda, Louis no podía apartar la mirada.

Louis estaba ahí con unos pantalones holgados y una polera blanca sin diseños que también le quedaba ancha y Harry sólo estaba en una maldita toalla frente a él y obviamente no tenía nada de malo.

Pero eran cerca de las 8:30 de la mañana y Louis aún no se había duchado, por lo cual procesaba todo de una forma más lenta.

El ojiverde carraspea y finalmente el ojiazul sale de su trance, cierra su boca y baja la mirada a su cepillo de dientes el cual estaba en su mano derecha.

—Venía a preguntar si tenías un poco de pasta dental que me pudieras dar— alza su cepillo celeste para mostrárselo a Harry y este asiente, abre la pasta dental que traía en una de sus manos y pone un poco de esta en el cepillo de Louis.

—Listo— Louis asiente un par de veces y muerde su labio inferior.

—Gracias— comenta en un hilo de voz y abandona la habitación rápidamente, Harry ríe ante eso y cierra la puerta.

Tenía que vestirse.

En cambio Louis cierra la puerta de su habitación detrás de sí y no puede evitar reprenderse por haber actuado de esa forma, esperaba no haberle causado incomodidad, pero miérda, jamás pensó que Harry tuviera tatuajes en su piel y menos que le quedaran tan bien.

Suelta un quejido bajo, por lo estúpido que había sido y camina hacia el baño para lavarse los dientes y ducharse de una maldita vez.

Sentía tanta vergüenza que evita mirarse en el espejo, porque sabía que sus mejillas estaban sonrojadas.

No podía mirar a Harry de esa forma, por lo que sabía gracias a Niall, el ojiverde estaba en una relación -tóxica- pero al fin y al cabo era una relación.

Louis lava rápidamente sus dientes y luego se mete a bañar, quería alejar todos esos pensamientos de su mente.

Es que de verdad, se sentía mal por haber mirado a Harry de esa forma, lo admitía, el chico era precioso y su personalidad hipnotizaba, pero ya tenía una pareja y Louis jamás se metería en medio de una relación.

Ni siquiera sabía porqué tenía esos pensamientos, no es como si Harry fuera a sentir algo por él.

Pero ambos ignoraban que la vida daba mil vueltas antes de detenerse en el momento, lugar y persona indicada.