Capítulo 32.

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Nadie sabía al principio como habían llegado a esa situación, simplemente habían estado comiendo malvaviscos frente a la fogata y Niall ofreció trozos del queque que había preparado hoy, nada fuera de lo normal.

Pero luego de un par de minutos Louis comenzó a sentirse somnoliento y un poco más lento de lo normal.

Harry rápidamente había intuido lo que había pasado.

Niall había horneado queques mágicos, reconocía esa sensacion recorriendo su cuerpo, recordaba lo filosófico que se ponía cuando consumía marihuana.

El nunca quiso ser de esos chicos que se dejan llevar por las masas, pero siempre se dijo “prueba y luego descartas” así que fué fácil para él conseguir un par de porros en la Universidad.

¿Saben que era lo más impactante? Que había un patio específicamente para fumar marihuana, todos lo llamaban “Jamaica.”

Si te invitaban a Jamaica era un pase libre para compartir con tus amigos y fumar.

Absolutamente todos sabían de ese lugar, hasta los profesores.

Zayn y Harry tenían amigos por todos lados, así que de vez en cuando pasaban sus breaks en ese lugar.

El ojiverde mira sus manos y entrecierra sus ojos, se ponía torpe como la miérda, pero sus pensamientos se atenuaban y olvidaba todo con facilidad.

Recuerda perfectamente esa vez que debía ir a votar si la Universidad se iría a paro o no, estuvo durante diez minutos viendo el papel para votar entre sus manos.

Incluso había dejado su carnet de identidad olvidado.

Había ignorado a conocidos porque no los había visto, joder ese día fué realmente un fiasco.

Tomó muchísima agua y de a poco el efecto fué disminuyendo.

Harry pone la mirada en Louis, el cual estaba a su costado.

El castaño se levanta de su asiento y va directo a tomar otro trozo de queque, el ojiverde se levanta y lo toma por la cintura alejándolo de esa bandeja.

—¿Qué haces?

—Sé que estás consciente y entenderás esto, Niall les puso marihuana, si comes  mucho te puede hacer mal— Louis se queda quieto en su lugar y luego se voltea, lo veía con sus grandes ojos azules de forma expectante.

—Oh, con razón estoy torpe— Harry ríe y asiente, el estaba de la misma forma.

Ambos ponen sus ojos sobre Zayn el cual estaba bebiendo cerveza, Harry rueda sus ojos.

El ojimiel sabía que si bebía y consumía marihuana a la vez, su estómago estaría revuelto al día siguiente.

Hace un tiempo atrás ellos habían hecho esa combinación, luego de pasar año nuevo con sus familias se juntaron para ir a un club nocturno.

En el camino compartieron un porro y ni hablar que ambos bebieron alcohol en sus respectivos hogares.

A penas llegaron a “Silent Paradise” bebieron una copa de champán que era cortesía del lugar y sólo bastó eso para que ambos cayeran en una oscuridad sin retorno.

Harry tenía pocos recuerdos de esa noche, sólo recuerda como había volteado el tequila que se había comprado, los cañones de espuma y la piscina.

Se habían lanzado a la jodida piscina estando borrachos.

Ambos luego se fueron a sus hogares totalmente empapados y cubiertos de espuma, sus zapatillas resonaban a cada paso.

Recuerda como abrió la puerta con torpeza y subió las escaleras con dificultad, entró directamente a bañarse y luego se acostó a dormir como un bebé.

A la mañana siguiente devolvió todo lo que había consumido la noche anterior, desde ese momento dejó de fumar.

Mezclar distintos tipos de alcohol y cannabis no era la mejor opción, aúnque claro a veces celebraban el 4;20 como correspondía.

Ya saben, fumar marihuana el día veinte de abril a las 4:20.

El ojiverde sale de sus pensamientos cuando siente un suave beso en su mandíbula.

Sus ojos se vuelven a enfocar en el castaño el cual tenía una adorable sonrisa en sus labios.

Harry se olvida de regañar a su mejor amigo y se inclina hacia Louis, dejando varios besos sobre los cálidos labios ajenos.

Pasaría todo el día besándolo si fuera posible.

El ojiazul ríe sobre los labios de Harry y esta vez él lo llena de besos, vamos el ojiverde sólo se dejaba amar.

—¿Louis?— el castaño se aleja al oír si nombre.

—Dime.

—Te quiero, te quiero muchísimo— la sonrisa del castaño se desvanece de a poco y no piensen que fué debido a algún pensamiento negativo.

Sólo pensaba que debía estar serio ante eso, que Harry le dijera que lo quería significaba mucho para él.

—¿No me lo estás diciendo porque estás drogado?

—No, la marihuana funciona en mi de la misma manera que el alcohol, logro expresarme fácilmente pero a veces hago el ridículo en el intento.

—No haces el ridículo, cuando uno es vulnerable jamás será ridículo.

—Siempre sabes que decir ¿no?— Harry se sienta otra vez en su lugar, pero la diferencia ahora era que Louis se había sentado sobre sus piernas.

—Sólo soy sincero, pero no todo el tiempo sé que decir y cuándo decirlo— Harry alza su rostro hacia a Louis y lo mira atentamente.

—¿En serio? ¿hay algo que quieres decir y no sabes cómo?

Louis asiente con lentitud y simplemente lo suelta.

—Me gustas— Harry sonríe ampliamente y estira sus labios, pidiendo un beso, el castaño no se hace de rogar y se inclina para besar al ojiverde.

El beso es suave, lento y sin prisas, no como el de la mañana.

—Tu también me gustas, pensé que eso ya estaba claro desde hace un tiempo— Louis ignora lo que dice a Harry y vuelve a besarlo.

Abre sus labios para darle más profundidad y una vez que Harry corresponde, desliza su lengua.

No era invasivo, pero le gustaba besar de esa forma.

Quizás simplemente estaba tomando valor.

—Eso no es lo único que quiero decir.

—¿Entonces?— Louis muerde su labio inferior y pone la mirada sobre el fuego, veía atentamente las chispas que desaparecían en medio de la oscuridad— ¿Louis...?

—Me gustas Harry— repite con suavidad y vuelve a poner sus ojos sobre el ojiverde— y me estoy enamorando de ti.

Me estoy enamorando de ti.

Lo dijo, finalmente lo soltó.

Wow.

Rise Up |Larry Stylinson|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora