¿Me amas?

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Ilustración de @memento1113 cuenta de Twitter.

La mirada inquieta de Nines se paseaba por la amplia sala, había un técnico que revisaba una computadora y anotaba en una libreta mientras el androide bajaba la mirada para ver su cuerpo desnudo y carente de piel.

-Al fin despertaste.

El androide siguió la voz encontrándose con Elijah quien sonreía con amabilidad.

-¿Sabes por qué estás aquí? –Preguntó a lo que Nines negó con la cabeza, ya que sólo podía observar como algo de información se estafa transfiriendo a su memoria- Te estropeaste, tenías un error de fábrica en la zona de adaptación, además de haber sufrido un accidente en el que perforaron tu procesador.

-Eso lo recuerdo –Respondió con voz fría y metálica por lo que arrugó la frente subiendo su mano hacia su propio cuello, tocando ahí con sus dedos.

-Acomoda su voz –Ordenó Elijah al técnico, quien comenzó a teclear la computadora.

-¿Hice algo? –Preguntó Nines aun teniendo la mirada en el CEO quien volvió a verlo.

-Eres muy intuitivo –Respondió y acomodó sus manos tras su espalda- El resto de esta tarde te haremos pruebas y cuando estés listo te dejaremos ir.

-¿Cuánto tiempo llevo aquí?

-Poco más de una semana –Respondió Elijah viendo que el androide sólo bajaba la mirada algo pensativo.

El día transcurrió lento para Nines, entre pruebas de memoria, pruebas físicas y análisis completos, las horas pasaban y el día acababa con cada prueba. Estaban siendo demasiado minuciosos con él, algo que no le gustaba del todo, si eran así de minuciosos era porque había hecho algo, quizás algo malo ¿Acaso había dañado a alguien? O aún peor ¿Había herido o matado a alguien en algún estado de inconciencia?

El día se hizo corto para los técnicos entre pruebas para el androide, por lo que debió quedarse toda la noche para concluir con cada examen exigido por Elijah y cuando por fin todas las pruebas concluyeron que Nines podía volver a sus labores, lo dejaron ir.

El androide vio la mañana, era un día frío como muchos, pero deseaba sentirlo, deseó más que nunca abrazar a sus seres amados, que lo reconfortaran en aquella mañana, por lo que revisó la hora en su sistema interno y sonrió al ver que aún era temprano y alcanzaría a llegar a la estación antes de Gavin y Connor, por lo que sin esperar un minuto, llamó un taxi y subió a este en cuando llegó frente a él.

Por alguna razón Nines se sentía extraño, miró sus manos sintiéndolas diferentes, incluso sentía que su memoria no retenía la misma información, como si le hubieran quitado parte de sus recuerdos o quizás los hubieran acomodado en otro sitio, por lo que intentó buscar en su memoria sin lograr encontrar lo que buscaba, aunque tampoco tenía muy claro que era lo que había olvidado. Miró a través del vidrio e intentó recordar lo último que había vivido, pero sólo estaba en su mente la mirada asustada de Gavin al verlo, recordaba que había algo mal en su imagen, pero tampoco tenía muy claro qué era aquello que perturbó el día del detective.

Al llegar a la estación bajó del taxi sonriendo al ver que el auto de Gavin aún no estaba, por lo que entró con una gran sonrisa en el rostro, quería sorprenderlo, a él y a Connor con su llegada. Avanzó por la estación sintiendo la mirada de todos en el lugar, se detuvo un momento y vio a Tina verlos casi con horror por lo que bajó la mirada para verse y asegurarse de no llevar nada extraño.

-¿Qué haces aquí? –Preguntó la oficial de policía mientras se acercaba enfurecida empujando el pecho del androide, quien debió sostenerse de un escritorio para no caer- ¡Qué hace aquí! –Exclamó con furia y entre lágrimas que caían por su rostro.

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⏰ Última actualización: Sep 14, 2021 ⏰

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