No me importa compartirte.

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Eran las nueve de un miércoles y Nines aún hacía rondas, estaba a punto de volver al departamento de policías cuando Mathilda llamó. Algo inusual, la niña siempre le mandaba mensajes que no respondía y nunca llamaba por lo que no dudó en contestar.

-¿Aló? -Respondió con tono inquieto al escuchar un sollozo del otro lado de la línea.

"Nines... Ven..." Gemía con un llanto ahogado.

-¿Dónde está? ¿Qué pasó? -Preguntó rápido al detener la patrulla.

"Me duele mucho..."

-Mathilda ¿Dónde estás? -Preguntó en un gruñido intentando rastrear la llamada pero la ubicación del teléfono no estaba conectada.

"...Estoy en casa..."

-Voy para allá -Respondió y prendió la sirena mientras giraba en la calle de doble tránsito para ir a la casa de la niña- ¿Qué pasó? ¿Dónde está tu papá?

La niña pareció tragar saliva, suspiró y sollozó antes de responder.

"Papá dijo que iría al bar... Y sentí hambre y quise sacar..." Sollozó un poco más antes de continuar "Quise sacar dinero que oculta sobre un mueble y me caí"

-¿Tienes alguna contusión? ¿Alguna lesión? -Preguntó y apretó el acelerador saltándose algunas luces rojas.

"Hay mucha sangre... y papá no contesta..."

-Estoy en diez minutos en tu casa ¿Dónde es la herida?

"...En mi cabeza y mi brazo..."

-Bien, recuéstate en el suelo y pon tu mano sobre la herida ¿Lo hiciste? -Preguntó para intentar tranquilizarla ya que sus sollozos le impedían hablar.

"Sí..."

-Muy bien, eres una chica valiente ¿Te duele algo más? ¿Tienes nauseas o visión borrosa?

"No"

-Eso es bueno ¿cómo está tu brazo?

"No... No quiero mirar, duele mucho... Y... Y tengo frío"

-Tranquila princesa, ya estoy llegando, ahora cuéntame ¿Hace cuánto te caíste? ¿Perdiste el conocimiento?

"No... No sé"

-No importa ¿Caíste al piso? ¿Te golpeaste con algo? Cuéntame -Preguntó y comenzó a buscar información de ambulancias, pero la mayoría tardaría unos veinte o treinta minutos en llegar, si la herida no era tan grave sería mucho más rápido llevarla él a un hospital para que la trataran- ¿Mathilda?

"Me golpeé con la mesa..." Sollozó "Quiero vomitar"

-Escúchame -Ordenó con voz firme- Ponte de lado muy lento, si quieres vomitar vomita, no pasa nada y no quites la mano de la herida, no te levantes -Apretó fuertemente la mandíbula al sentir el sollozo y la arcada -¿Mathilda? ¿Mathilda, me escuchas?

"Sí..." Una arcada la ahogó y se logró escuchar como expulsaba.

-Estoy llegando a tu casa, linda ¿Está la puerta abierta?

"N... No... Pero la ventana..."

-Estoy fuera de tu casa, tranquila -Interrumpió y colgó la llamada frenando de golpe haciendo que la patrulla deslizara sus ruedas hacia un lado.

El androide corrió hacia la entrada y corrió la ventana saltando por ella viendo a la niña en el suelo temblando.

-Nines... -Llamó e intentó levantarse.

-Tranquila, no te levantes -Pidió y puso una mano en su pecho para devolverla al suelo mientras la escaneaba rápidamente tomándole la mano para quitarla de su cabeza.

Un Juego De TresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora