Capítulo 13 - ¡Feliz disparo?

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Nos levantamos un poco temprano para estar a tiempo en la fiesta de cumpleaños de Regina, prima de Johana. Ella siempre ha sido nuestra amiga, nos divertimos mucho con ella, estuvo viviendo un tiempo en Argentina, pero está aquí en Río desde hace unos meses y así mismo aprovechó para estar presente en el cumpleaños de su prima.

Nos subimos a la camioneta Keila, Fiore, Gaby, Michelle y yo junto a Max, al parecer Caleth se irá dentro de unas horas, no nos comentó nada al respecto pero algo nos hace pensar que se irá junto a Moritz.

—¿Estás bien? —me pregunta Max acercándose a mí.

—Sí, no te preocupes, sólo estaba pensando en Caleth y su repentina ida, ¿Tú sabes algo más?

—La verdad no, pero Keila recuerda haber escuchado que hablaba con una tal Alisson, nada más —me responde Max.

—En fin, y estoy segura que Moritz tuvo algo que ver con eso, hacía mejor pareja con Oswaldo.

—Sí, pienso lo mismo, pero pues cada quien ¿Nos vamos?

—Vámonos —le respondo y nos damos un beso muy cuidadosamente sin que nos miren, Max sonríe y se dirige al volante.

—Vámonos chicas —Grita mientras la camioneta avanza hacia adelante

Max ha puesto la radio y suena Dámelo To' y yo voy mirando por la ventana el panorama.

***

Narra Don Pepe:

Le di ciertas indicaciones a mi socio Antonio para que sea él el que le informe que debe irse de allí cuanto antes mejor, podría correr mucho peligro si en esa fiesta está Juan Carlos, él es prácticamente mi enemigo y sabe perfectamente mi árbol genealógico, de hecho, sospecho que hay de su gente por aquí y están observando todo a nuestro alrededor. Antonio sabe qué es lo que tiene que hacer, por suerte hace un par de momentos se comunicó conmigo para hacerme saber que vio a Ivania brevemente a través de la ventana de una van, estoy seguro que se dirigían hacia la casa de Reina la madre de Regina, prima de Johana que es amiga muy cercana de ellos, lo relevante es que hace unos años Reina empezó a vivir con Juan Carlos en Mato Grosso, sin embargo luego se mudaron a Río después de ser casi descubierto por otros traficantes de droga, y por el hecho de que entre sus colegas sospecharan de que él había sido participante de una reunión en la cual hace años asesinaron alrededor de veinte chicos para quitarle sus órganos, obviamente vender droga hasta ese punto no era algo tan serio como el hecho de asesinar con el fin de extraer los órganos de las víctimas y sobre todo porque era algo con lo que no se tenía nada que ver y en eso existía una gran diferencia, pero no puedo exponer a Ivania a un peligro como ese. Antonio es mi única y última esperanza, no querré ser yo el que viaje a Rio, algo me dice que de ser así no iré a darle besos a Ivania.

***

—Muchas felicidades Regina, mis amigas te trajeron presentes también, ellas son Keila, Fiorella, Gabriela e Ivania —le indica Max a Regina, una chica bastante hermosa como también su prima, Regina a pesar de vivir en Rio no es de piel negra, su cabello es rizado y rubio, realmente luce muy amable, ha sido muy agradable con nosotros desde que llegamos hace casi media hora.

—¡Feliz cumpleaños! —Exclama Gaby —Tienes un hermoso cabello.

—Gracias, también me gusta mucho tu cabello —responde Regina de forma muy amable.

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