Capitulo 6:

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Capítulo 6:

*Dos partículas que en algún punto estuvieron unidas, siguen estando de algún modo relacionadas. No importa la distancia entre ambos, aunque se hallen a dos extremos opuestos del universo, la conexión será instantánea *

POV Niall. 

Decir que no estaba preocupado por Edward cuando se fue por la mañana, sería una total falacia. Podía sentir el remordimiento y la culpa creciendo en mi interior como una gran pelota que oprimía mi pecho y me hacía estar nervioso. 

Edward había terminado nuestra apuesta y él se había ido a encontrarse con aquel hombre. Si, paga muy bien. Tal vez incluso mejor que bien, sin embargo el problema con él, era que aunque te llevara a lugares carísimos, te hiciera obsequios preciosos y te sonriera con ternura, es una completa bestia en la cama. Más de una vez yo me he ausentado al trabajo, debido a que él es completamente difícil de complacer. 

Pongámoslo de esta forma.

Mi relación con Edward es una amistad y entendimiento por nuestros empleos. Entre él y yo lo único que existe es una gran amistad, una lealtad inquebrantable y un profundo sentimiento de agradecimiento. 

Jamás eh tenido sexo con Edward; no puedo negar que si nos hemos besado en algunas ocasiones y lo he visto completamente desnudo teniendo sexo con algún cliente, pero sé lo satisfactorio que es tenerlo tendido en la cama y jadeando por más.

La mitad de nuestros clientes besarían el piso por dónde camina Edward, solo porque él les hiciera un descuento de un millón de wons.  Imagina lo que pasaría si ese hombre; el cual tiene como pasatiempo ganar dinero, decidiera que quiere a Edward en su cama cada vez que a él se le antoja. 

Para empezar Madame elevaría la tarifa de Edward por los cielos y algunos de sus clientes semanales tendrían que dejar de ir tan seguido para juntar el dinero. Lo cual dejaría más tiempo libre a Edward y no podría negarse si Nick lo pide 

Exhalo el tabaco que hasta ahora me doy cuenta, había estado reteniendo y mis ojos enfocan a una pequeña niña de cabellos negros. 

-¡Niall!- se queja ella- eso huele horrible- Hago una mueca de descontento y apago el cigarrillo. No tiene caso que me quiebre la cabeza en pensar lo que le espera a mi amigo, no puedo hacer nada por él, sin embargo si puedo hacer algo cuando vuelva y para eso debo estar preparado. Pero enseguida mi cerebro capta a la chica que tengo delante.

-¡Pequeña Gemma!- exclamo- ¿Qué demonios haces aquí? Deberías estar en la escuela

-Mi hermano no estaba para despertarme y me he levantado tarde. Además no tengo dinero para irme a la escuela- Oh Dios. Si Gemma no va a la escuela estará aquí para cuando llegue Edward y hará preguntas…. ¡Edward va a matarme! 

Me levanto y saco el billete que mi amigo dejó para la pequeña Gemma. Rápidamente camino hasta donde está la mochila de Gemma y la llevo hasta la cocina, abro el refrigerador en busca de lo más práctico y maldigo mi suerte al recordar que aún no tenemos dinero suficiente para víveres.  

-¿Por qué Harry se fue tan temprano? 

-Tenía que ir a trabajar…- murmuro rápidamente y saco más dinero de mi billetera. Encamino a la pequeña hasta la puerta y me quedo de piedra al escuchar su siguiente pregunta.

-¿Algún día podre maquillarme como lo hizo Harry hoy?

-Tú aun eres una niña Gemma. Solo los adultos hacen eso…- Abro la puerta y lo saco del apartamento. Estoy casi seguro que si no la tuviera cogido de la mano, la pobre habría caído en el segundo escalón que bajamos. 

Cuando los ángeles lloran (Larry Stylinson) EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora