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Capítulo 8

El plan de Eddie se empezó a ejecutar cuando el jueves llegó. Me encontraba en el coche de Dominic esperando por mi pequeño hermano, ya le había comentado, sin contarle ciertas cosas, el plan con el que me ayudaría.

Eddie me envió un mensaje avisándome de que ella junto a sus dos amigos iban hacia la puerta mientras que él esperaría allí y la detendría.

Todo esto por un amor adolescente

Salí del coche buscando a una chica pelirroja, una chica rubia y un chico con el pelo castaño medio rubio, vaya trío extraño. Encontré a mi hermano en la puerta y cuando él me hizo una señal, me acerqué hacia el trío.

Hice como que me tropezaba frente a ellos, la pelirroja se acercó a mi para ayudarme a recoger los supuestos apuntes que se me habían caído.

—¿Se encuentra bien? —habló con una voz inocente, la miré detenidamente y ella era muy bonita, más con sus ojos azules y el contraste que hacía con su melena.

— Sara, vámonos —gritó la rubia, levantando la mano mientras seguían caminando.

Hemos fallado, señores. El plan debía ser que ellos dos debían ayudarme, no la chica que tengo a mi lado.

—¿Está bien? —vuelve a preguntar confundida.

—S-sí —dije mientras me incorporaba y ella me entregaba los papeles perfectamente ordenados.

—Aquí tiene —soltó con dulzura y se giró para marcharse, pero la cogí del brazo para detenerla —¿Quiere algo?

La dureza se escuchó en su voz.

Piensa, piensa...

—¿Te gusta leer? —pregunté cuando vi lo que me podía ayudar, ella asintió confundida —no te estoy acosando ni nada, solo he visto tu pegatina sobre corazones rotos —dije con una voz emocionada.

—¿Conoces el libro? —asentí realmente emocionada

—Sí, quiero decir es mi libro favorito de la trilogía corazones, después de él venía...

—Corazones cicatrizados —dijimos las dos al unísono.

—Oh, dios. No me lo puedo creer, por fin alguien que conoce la trilogía, mi mejor amigo, Alex, no quiere leerla porque dice que es una aberración y mi mejor amiga, Hannah no lee, así que nunca he podido hablar con nadie sobre la trilogía, y mira, por donde, he encontrado alguien que si lo hace —empieza a hablar emocionada.

Lo siento, Eddie, pero ella me ha caído bien.

Pasamos un rato hablando sobre nuestros personajes de la trilogía, concordando en los odiados y casi llorando cuando hablamos de los que murieron y eran los favoritos. La chica tenía para hablar durante un rato y conmigo, pues hacíamos un dúo de lo más extraño.

—¿Claudia? —habló Eddie acercándose a nosotras, estaba un poco sonrojado al ver a quien tenía a mi lado —¿Os conocéis?

—Oh, hola, Eddie —le saludó Sara con una sonrisa bastante tierna.

—No, no la conozco querido hermanito —solté con dulzura —ella me ha ayudado con unos papeles cuando me tropecé, ha sido realmente muy amable —dije actuando.

Gracias, Emily por tus actuaciones en mi casa.

—¿Eres hermana de Eddie Amery? —pregunta ella y yo asiento —Vaya qué casualidad —dijo sonriendo —. No sabía que tenías una hermana, Ed. — Le dijo y cuando soltó ese nombre, mi hermano puso una sonrisa atontada.