Lisa: -Debo mostrarte algo.
Jennie: -¿Tienes un hijo aparte?
Lisa: -¡No!
Jennie: -Entonces ¿Qué?
Lisa: -Acompáñame- me tomó de la mano y caminamos, hasta que llegamos
Jennie: -¿Qué es esto?
Lisa: -Es un castillo antiguo.
Jennie: -¿Por qué me trajiste aquí?
Lisa: -Está vacío, lo rente para nosotras.
Jennie: -Pero..¿Y la fiesta?
Lisa: -La fiesta la haremos tú y yo aquí solas.
Jennie: -Wow, ya vas aprendiendo a ser despreocupada.
Lisa: -Estaremos muy ocupadas ahora.
Me tomó de la mano y me dirigió hasta adentro
Lisa me tomó de la cintura por la espalda y apartó mi cabello, me empezó a besar suavemente en el cuello, mi piel se erizó, me levantó y sacó los tacones de mis pies.Desabrochó uno por uno con lentitud los botones de mi vestido y lo dejó caer en el suelo, yo me volteé para desprender con suavidad su chaqueta y su corbata, se miraba perfecta con traje, pero juraba que se miraría mejor sin él, desabroché su camisa mientras ella me daba dulces besos en el oído, desabroché su pantalón y lo dejé caer, ella me tomó de la cintura y me recostó sobre la cama. Me miró con sus ojos profundos como siempre lo hacía antes de comenzar.
Lisa:-Te amo, mi hermosa esposa- susurró. El movimiento suave de sus labios al pronunciar esas palabras me hizo estremecer y por un segundo pensé que estaba soñando.
Jennie: -Y yo a tí- uní mis labios con los suyos y comenzamos a frotar nuestras pieles con suavidad, nuestro calor se juntaba y hacía más cálido este encuentro. Terminamos de deshacernos de toda nuestra ropa. Besamos cada centímetro de nuestro cuerpo, Lisa acariciaba mis piernas con suavidad mientras se adentraba a mí con intensidad, besaba mis pechos y me llevaba a la cumbre del placer, todo era perfecto hasta que...mi teléfono sonó.
Lisa: -Ni se te ocurra contestar.
Jennie: -Sólo déjame ver quien es.
Lisa: -No importa quien sea, estamos aquí sólo tú y yo.
Jennie: -Por si no recuerdas ya no sólo somos sólo nosotras dos, hay dos personitas más tambien.
Lisa: -Tu madre los está cuidando con Denise, disfrutemos de nosotras -el teléfono dejó de sonar.
Jennie: -Entonces imagino que quieres disfrutar algo- la recosté y comencé a besar cada centímetro de su cuerpo, el teléfono volvió a sonar. Lisa lo tomó mientras yo seguía en mi labor.
Lisa: -¿Hola?- dijo en un gemido- ¡Suegra!- me detuve.
Jennie: -¿Qué pasó?
Lisa: -Habla tú, a mí me da miedo- me dio el teléfono.
Jennie: -Mamá ¿Qué pasa? ¿Lili y Robert están bien?
Lucía: -Sí, ellos están bien...el único problema es que esta es una celebración de bodas y ¡No está ninguna de las que se casaron!
Jennie: -¿Qué? ¿Dónde está Rosé y Suzy?
Lucía: -¡No lo sé! No se han aparecido aquí igual que ustedes, debes venir ya o tu hija matará a su hermano.
Jennie: -¿Qué le está haciendo?
Lucía: -No deja que Robert toque a Bella y lo va a matar ¡Ven de una vez!