Lisa se levantó inmediatamente muy nerviosa
Lisa: -¡Señor, No es lo que piensa! ¡Ella se me lanzó encima y...
Seung: - Lisa, nos explicaste el incidente en la limusina y te creímos...pero ¡esto!
Lisa: -¡Se lo juro! ¡Yo tomo enserio mi trabajo!
Seung: -¡Jennie! ¿Es cierto lo que dice Lisa?
Jennie: -Papi yo me quité la ropa para bañarme y justo cuando iba a entrar al baño, ella se me lanzó encima y yo grité.
Lisa: -¡Eso no es verdad! ¡Tú te me lanzaste a mí!- se defendió.
Seung: -Manoban, no quiero que esto esté pasando en el internado todos los días.
Lisa: -No será así, usted sabe cómo es su hija y como soy yo. Conoce la fama de cada una de las dos, por favor.
Mi padre me miró dudoso y miró a Lisa después.
Seung: -Jennie hija ¿Te gusta Lisa?
Jennie: -¿Que?
Seung: -Ven- salió de la habitación, yo lo seguí.
Jennie: -¿Qué pasa?
Seung: -No me engañes, princesa.
Jennie: -¡¡Papá!! ¡No me gusta! ¡La odio!
Seung: -¿Y por qué tanta pasión con ése ''odio''?
Jennie: -¿Cuál pasión?
Seung: -Hagamos un trato.
Jennie: -Amo tus tratos, siempre gano algo caro- sonreí.
Seung: -Ve al internado voluntariamente...
Jennie: -Ok, nada vale eso...-me volteé.
Seung: -¿Ni vivir sola con Rosé en cualquier país que quieres?
Jennie: -¡¡¿Es enserio?!!- me emocioné.
Seung: -Si- me tomó de las manos- Tú vas a ése internado y te estás ahí durante seis meses y cuando salgas te financio cada centavo que necesites para vivir sola.
Jennie: -¿Qué tal si no acepto?
Seung: -¿Te quieres quedar aquí sola mientras Rosé está en el internado?
Jennie: -Ok, está bien...iré.
Seung: -Admite que vas porque no quieres dejar de ver a Lisa - me toco las costillas.
Jennie: -¡¡Papá!!- me volteé y entré de nuevo a la habitación, y sí, seguía semidesnuda.Lisa estaba sentada en la cama, me miró cuando entré, hice un gesto con mi mano fingiendo un látigo y sonreí, Lisa rodó sus ojos. Me di un baño y me envolví en la toalla, al salir me vestí como acostumbraba hacerlo
Lisa: -Wowow, Tranquila que no vamos a un casino de tu ciudad adorada.
Jennie: -Cierra esa linda boquita o te clavaré un tacón en el ojo.
Lisa: -¡Que tierna!Tomó mis maletas y salimos en la limusina, hasta que llegamos al aeropuerto privado de la familia, subimos.
Entramos y me acomodé dentro.
Noté que sólo viajábamos Lisa y yo, esto iba a estar bueno
Jennie: -¿Seguridad?
Lisa: -No creo que te lances del avión, pero por si acaso nos deshicimos de los paracaídas.
Jennie: -No importa si Seúl me da la bienvenida con una balacera si no que me suicide en un avión.
Lisa: -Eres más peligrosa que un ataque terrorista.
Jennie: -Gracias.
Lisa: -¿Ya habías viajado en esto?
Jennie: -¡No! ¡Odio volar en esas cosas diminutas!
Lisa: -No me dormiré, no vaya a ser que asesines al piloto y pilotees al avión a una isla desierta.
Jennie: -No vuelo jets...-me levanté.
Lisa: -¿a Dónde vas?
Jennie: - Lisa- me agaché a la par de su asiento.
Lisa: -¿Perdón?- Dí una carcajada.
Jennie: -Esto será divertido.
Lisa: -Siéntate.
Jennie: -¿Cuántas horas son de vuelo?
Lisa: -Ocho ¿Por qué?
Jennie: -¡Ocho horas aquí! Debemos buscar algo que hacer.
Lisa: -¿Qué quieres hacer?
Jennie: -¿Empacaste mi caja de objetos personales?
Lisa: -Tu madre hizo las maletas.
Jennie: -Bien- fui a traer la maleta y de ella saqué un juego de cartas.
Lisa: -¡No me digas!
Jennie: -Póker...pero a mi estilo.
Lisa: -¿Apostando virginidades? No, gracias.
Jennie: -¡No seas tonta! Ven, siéntate.Se levantó y nos sentamos en el piso.
Jennie: -Apostamos confesiones.
Lisa: -Está bien,reparte.Repartí las cartas, yo era un as del póker, era uno de mis hobbies.
Como imaginé gané la primera ronda.
Jennie: -Ok, dime ¿Qué confesión tienes para mamá?
Lisa: Me gustan los colores de sostén que usas- rio.
Jennie: -¿A quién no?