El calor de sus brazos

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-Yamaguchi?- mierda mierda mierda...porque a mi?...rápidamente me solte de los brazos de terushima y me acerque con mucho cuidado al ahora muy pálido Tsukishima.
-tsukki, cálmate...si?- su cara me daba indicios que eso no iba a pasar.-oye, mírame...aun estoy aquí- le sonreí.
-dime que no es cierto- ví como caía de espalda quedando sentado en el blanco piso.
-Yamaguchi?- sentí la mano de otra persona a mi lado, pero realmente solo era capaz de concentrarme en mi destrozada pareja que reposaba en el piso.- Yamaguchi...es grave?- era terushima el que me interrogaba ahora.
-es cierto tsukki...y si terushima...realmente- no se si sea capaz de resistir lo que estoy a punto de decir- es grave...no creo pasar el invierno- jure haber escuchado los dientes de Tsukishima sonar.
-porque no me lo dijiste antes?- se levanto lentamente el rubio y llegó frente a mi.
Es cierto, recuerdo cuando intente decírselo.

2 años atrás.

-hoy volverás temprano verdad?- le pregunte mientras acomodaba su chaquetón.
-por supuesto, es nuestro aniversario- me beso en los labios y salió por la puerta, mientras, yo me preparaba mentalmente para informarle sobre la enfermedad que recorría por mis venas y decidir qué es lo que sería de mi, si le gustaría convivir con un cuerpo maltratado y lejos de él pero con mas años de vida o con un cuerpo que lentamente se pudrirá pero seguiré estando a su lado hasta que llegue mi hora.

Las horas seguían pasando, ya estaban dando las diez de la noche.
-vamos tsukki, se que no me fallarás, de ti depende mi decisión- comenté para mí mismo.

El cerrojo de la puerta sonó a las 23:47 de la noche, me asomé en dirección a la puerta para encontrarme con mi pareja completamente borracha.
-oye, porque vienes borracho...debiste tomar conmigo, estaba realmente preocupado, es divertido jamás te había visto borracho en mi v- me corto acorralándome demasiado rápido para reaccionar contra la pared y empezó a besarme de una manera...asquerosa.
-quítate la maldita ropa de una puta vez- qué está pasando?
-no...espera, no así- intente sacármelo de encima, pero me acorralo una vez más contra la muralla, pero esta vez haciendo que me golpeara la cabeza, sentí como la sangre recorría mi mentón, noté que Tsukishima estaba borracho al punto de no sentir la sangre mezclándose con nuestras salivas entrando dire a su boca...sentí miedo y asco, odio la sensación de la sangre recorriendo nuestra piel...sentí asco de mi mismo.
-quítate la ropa- me levanto y llevo a la cama y muy bruscamente comenzó a quitarme la ropa, sentí como sonaban las costuras.
-espera porfavor- le implore susurrando. No obtuve respuesta, a cambio solo abrió mis piernas y sin humectarme siquiera entro en mi...me dolía...no es así como quiero celebrar nuestro primer aniversario.
-basta- las lagrimas entraban a mi boca y se mezclaban con el oxido sabor de la sangre.
-tsukki- deje de sentir cuando me silencio volteándome para que enterrara mi rostro en la almohada...quiero morir.

**
Si, fue ahí cuando decidí que realmente no quería curarme, siempre lo supe, pero muy dentro de mi tenía la esperanza de que Tsukishima me rogara que decidiera curarme.
-una vez...lo intente, pero decidiste no escucharme- sus ojos se abrieron con miedo y pasaba su mirada de mi a mi amigo para volver a mi.
-a que te refieres?- tomo mis manos con desesperación.
-esa vez, como siempre, decidiste irte con kuroo- me solté de su agarre y evité su mirada, ¿como me estará mirando ahora?
-como?...cómo fue que supiste?- ví un par de gotas caer a la nieve...no eran mías, levante la mirada y ahí estaba...se veía roto y...frágil.
-me enteré hace más de 2 años más o menos- hoy era el momento de dejar todo claro.
-y porque jamás dijiste nada?- estaba más cerca de mi.
- porque...de todas formas moriria, realmente me bastaba con morir junto a ti- baje la mirada otra vez- o eso creía- susurré.
-eso...creías?- es hora Yamaguchi...dile como te sientes. Escuche la voz de mi cabeza hablar.
-yo...yo ya no te amo- mis rodillas temblaron, creí que moriria ahi.
-ah, de que hablas amor?- me tomo de los hombros y me obligo a mirarlo.- oye...mírame, sigo estando a tu lado, estamos juntos porque nos amamos- la desesperación se sentía a kilómetros.
-tsukki...estoy cansado- intente irme, busque a terushima con la mirada, pero ya se había ido, supuse que la noticia de que Tsukishima y yo estamos saliendo le disgusto hasta ese punto...pero ya no me importa, ya nada me importaba...mis piernas pesaron...

-oye bebé...abre tus ojos porfavor- una dulce voz me susurraba.
-donde estoy?- me intente levantar, pero mi cabeza punzo.
-estás en casa mi amor, mira...te prepare una sopa- cuando mi conciencia estuvo más clara logré ver a tsukki sentado en la cama.
-porque estoy aquí, qué pasó?- pregunte aún intentando sentarme.
-te desmayaste en el parque, estabas hirviendo en fiebre- pasó mi mano por mi frente, pero me alejé.
-oye...pecoso?...mi amor- intentaba conseguir que lo mirara, pero no quería, sabía que volvería a caer si lo hacía.-perdóname, Yamaguchi...realmente lo siento- algo era distinto esta vez, en su voz, mirada y cuerpo se sentía...culpa.
-puedo dormir?- evite la respuesta.
-claro bebé- un beso se sintió en mi frente y sentí como salía del cuarto dejándome completamente solitario y confundido, lágrimas salieron de mis ojos... sabía que le daría la oportunidad de cambiar, solo...espero que lo logre antes de que me vaya.

-qué pasa pequitas?- sentí como abría la puerta tsukki...sin darme cuenta había empezado a quejarme.
-tengo frío...me duele- me quejaba casi sin que se pueda entender.
-tu fiebre ya había bajado...pero ahora estás hirviendo otra vez- su mano se posó en mi frente.- no puedo ponerte más mantas...córrete un poco amor- no se si realmente fue la fiebre que causó que todo lo que me dijera mi pareja fueran órdenes para mi, me corrí y lentamente se acomodó a mi lado.
-ven...deberías sentirte mejor ahora, averigüé todo sobre tus medicinas, aún no te puedes tomar la que corresponde, es en una hora más- sus brazos me rodearon y un sentimiento que se me hacía muy familiar y que extrañaba mucho se hizo presente en mi corazón.
-no me dejes...Tsukki...no lo soportaré- llore desesperadamente en su pecho.
-jamás...cometí un terrible error...pero estaré aquí para ti- su cabeza se apoyó en la mía y la beso tres veces. Mis lagrimas dejaron de caer, el dolor desapareció...no se si realmente amo a Tsukishima kei o no, pero lo necesito...mas que mi propia vida.

















Espero que les guste, perdón  por tan poco, gracias por leer, nos vemos el miércoles<33 🍙

siempre cuenta conmigo  (tsukkiyama)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora