siempre cuenta conmigo (tsukkiyama)

por ultima vez

-buenos días pequitas- sentí un beso en mi ojo y luego en mi nariz.
-y eso?- pregunte curioso por lo anterior apenas abrí mis ojos.
-qué acaso no te puedo decir buenos días?- el rubio me abrazo y se levanto.
-hoy yo te cuidaré, así que no hay necesidad de que te levantes- me ordeno antes de salir de la pieza. Ya llevamos una semana en la misma situación.
-oh! casi se me olvida, hoy iremos al doctor- se asomo por la puerta.
-porque? Fui hace una semana?- me levante de la cama y me acerque a él.
-porque vamos a ver qué podemos hacer- no entendí.
-a que te refieres?- lo mire atento.
-tenemos que ver si puedes hospitalizarte o si puedes seguir algún tratamiento-lo corte.
-no tomare el tratamiento- le dije antes de salir del cuarto.
-a que te refieres con que no vas a tomar el tratamiento?, es que acaso quieres morir así de pronto?- tomo mi brazo y me volteo para quedar mirándole a la cara, su expresión cambio de enojo a asombro.
-no lo sé...es solo que, ya es muy tarde...tsukki- esa frase definía más que solo mi enfermedad.
Me solté de su agarre y me metí al baño.

Al salir escuche a Tsukishima acercarse a mi
-Salgamos a comer algo o prefieres que pida algo a la cas...- deje de oír.

-yams...resiste Yamaguchi- la voz de tsukki iba y venía a mis oídos.
-donde estoy?- mire a mi alrededor, era un auto.
-una amiga nos lleva al hospital, ahora intenta no esforzarte demasiado- una amiga?

-hola amor...por fin abres los ojos- la mano de tsukki acariciaba suavemente mi mejilla, se sentía fría pero muy tibia a la vez.-el doctor acaba de irse, iré por el- comentó y salió casi corriendo de la sala. El verme recostado en la sala de un hospital me dio...miedo, sabía que moriría, pero no quería que fuera en la blanca sala donde la gente va a terminar su vida.
Intente levantarme, pero fue imposible, ya no podía mi cuerpo, el tiempo corría por mis venas, ya estaba muriendo. Fue entonces cuando le tome el peso a la importancia de mi vida.
-hola joven, es bueno verle despierto-la voz del doctor me saco de mis pensamientos.
-hola doctor- le salude de vuelta sin mucho ánimo.
-te revisaré y luego haremos un examen de sangre para ver cómo avanza- me indicó y continuó con lo antes dicho.
-claro- mi cuerpo pesaba y dolía.

Cuando el doctor había terminado me saco sangre y me dejo ahí con mi pareja.
-estás bien?- preguntó mientras se acercaba a mi.
-si, solo estoy muy cansado, creo que dormiré un poco- el se acercó a mi y me hizo cariño en el cabello y caí completamente dormido.
~su cuerpo no resistirá mucho, es un milagro que hasta el día de ayer pudiera ponerse de pie~escuchaba hablar a lo lejos al doctor~aunque le hagamos la quimioterapia, a esta altura de su enfermedad, no creo que dure más de un año~ la voz provenía desde fuera del cuarto.
~entiendo, de todas formas si dice que Yamaguchi escogió esa decisión la respetaré, aunque eso no quiere decir que no voy a intentar persuadirlo de tomar la quimioterapia- ambos entraron al cuarto y quedaron sorprendidos de verme despierto.
-oye..-se acercó el rubio- despertaste, estabas muy cansado?- sus manos pasaban por mi rostro cada vez que podía.
-si lo estaba- le sonreí y tome su mano.
-Yamaguchi, ya te di lo necesario para que te sientas bien los siguientes tres días, pero yo te recomiendo que te quedes aquí por un tiempo- el doctor anotaba algo en una hoja.
-si decides quedarte...yo me quedaré contigo, y si tomas la quimioterapia estaré junto a ti- el rubio poso su mano en mi hombro.
-Gracias tsukki, pero quiero ir a casa, de todas formas voy a morir, me gustaría que fuera en un lugar más...cálido- comenté en un tono positivo.
-pero- lo corte.
-vámonos por favor, amor?- le susurre para que el doctor no escuchara.
-mmm...está bien-.

Un auto nos vino a recoger y nos llevó a casa.
-estás bien?...te duele algo?- mi cabeza, me pesa mucho.
-no realmente- le volví a sonreír y me apoye en su hombro. El clima era frío al otro lado de la ventana.
-hablaste con tu mamá?- me preguntó mientras acomodaba mi chaleco que no cubría por completo mi pecho.
-no mucho últimamente- Mamá se había mudado a Canadá cuando yo me mude con tsukki, a ella le quedaba más cómodo por su trabajo, pero eso no quita el hecho de que siempre nos mandamos mensajes, de todas formas, desde que se enteró de mi relación con el rubio, nuestra relación se hizo más...lejana.
-ya llegamos, vamos amor- tomo mi mano y me ayudo a salir del auto.

Nos encontrábamos abrazados en nuestra cama, veíamos una película, no sé realmente cual, no le tomaba atención, solo me concentre en el calor que me entregaba el cuerpo del rubio, el estaba ahí...conmigo, estaba respirando, dentro de él corría sangre sana y limpia, y me imaginé nuestra situación al revés, cómo sería si tsukki fuera el enfermo a punto de morir, que haría yo entonces?, estaría tan tranquilo como el?, no estoy seguro, espera, de algo si estoy seguro, lo besaría a todo momento, tomaría su mano el mayor tiempo que pueda, lo abrazaría con desesperación cada vez que lo sienta lejano, mi corazón dolió de solo pensarlo. Me aferré más a él haciendo que me mirara.
-qué sucede??...te duele algo?- se asusto y reacciono rápido, pero lo detuve.
-no...nada duele, solo quería...besarte- corrí la mirada por vergüenza causando que una risa de mi novio recorriera mis oídos.
-bésame entonces- acercó lentamente su rostro a mi, sin pensarlo dos veces lo bese, no fue un beso suave, era apasionado, sabía que sería la última vez que podría besarlo así...pase una de mis piernas sobre él, arrodillándome dejándolo entre mis piernas, pase mis brazos sobre sus hombros.
-quiero hacerlo- le dije rápido...sus ojos reaccionaron al instante.
-no- contestó seco -con esto basta por hoy, aún estás muy débil y yo...no quiero lastimarte mas- titubeó y agacho la mirada...entendí a que se refería en más de un sentido.
-por favor tsukki- lo volví a besar para empezar las cosas, pero me volvió a detener.
-yams...detente- intentó apartarme suavemente.
-tu me dices que no, pero tu cuerpo dice otra cosa- mire hacia el bulto en su pantalón.
-mierda- susurró...la verdad, es que realmente no quería hacerlo, pero no se si el día de mañana sea capaz, solo quiero que Tsukishima me recuerde hasta el último momento.
-es que acaso sientes asco por mi apariencia- intente manipularlo.
-qué?...claro que no- me respondió al instante y me rodeo la cintura con sus dos manos
-realmente no quiero hacerte daño- me susurro y me volvió a besar, había caído.
Pose mi mano en su bulto y comencé a moverla lentamente, sentí como su mano se posaba en mi, fue así como lentamente tuvimos nuestro momento sexual, solo tocándonos, mi oportunidad de estar con tsukki por completo se había ido, pero esta situación se sentía, diferente, era más romántico, solo nosotros dos mirando nuestros cuerpo y corriéndonos juntos, nuestras respiraciones se volvieron una en un momento, y fue así como me di cuenta que realmente desde hoy nada volvería ser igual...lo volvía a besar.
-te voy a extrañar...amor- le dije entre besos y sentí un sabor salado mezclarse con mi saliva.
-cállate...Yamaguchi- las lagrimas del rubio me sabían a gloria, y nos besamos más y más hasta que nuestros labios se cansaron, incluso nosotros, sus brazos me rodearon dándome hogar en su pecho y así dormimos, tranquilos y juntos...si, juntos.

Gracias por seguir leyendo y perdón por no estar tan activa, de verdad gracias <33
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