XXXVIII

171 27 4
                                    

ARISTÓTELES

Siendo sinceros aquí solo puedo ir a casa de mis padres y estoy muy consiente que es el primer lugar donde me buscarán pero si tengo suerte papá nos protegerá de ellos y no tendré que verlos nunca más, en verdad confíe en los dos, creí que me amarían como en las historias de mamá pero de nuevo la realidad llegó a mi, la vida no es como los cuentos, la vida es más cruel y dolorosa, no se puede confiar en nadie y absolutamente todos terminan lastimandote, solo espero eso no esté en su naturaleza porque no quiero que mi bebé sea malo como ellos, quiero que mi bebé sea mucho mejor.

Tome un taxi hasta el edificio de mi familia, gracias al dinero que Pancho me dio y que he guardado pude pagarle al señor, fui hasta el piso donde vivía y toque un par de veces la puerta, mi hijo despertó pero no quiso caminar así que estuvo abrazando su león de peluche todo el camino, yo no soy fuerte y se que si en este momento no lo tuviera en mis brazos habría llorado como si no hubiera un mañana en cualquier lugar pero no lo hice porque no quiero que el vea lo débil que soy y piense que no puedo protegerlo.

Polita: Mis niños, pasen (carga al niño)
Aristóteles: Gracias mamá
Polita: No me avisaste que venían, ¿Los chicos vienen atrás?
Aristóteles: Estoy solo
Polita: ¿Otra vez discutían como niños?
Aristóteles: No con el aquí
Polita: Es grave, esposito
Audifaz: Dime
Polita: ¿Puedes llevarlo al parque por un helado?
Audifaz: Si, ven
Xabiani: Papá
Aristóteles: Ve con tu abuelo bebé, nosotros vamos a preparar la comida
Polita: ¿Quieres enchiladas?
Xabiani: Si
Audifaz: Vamos por un helado y volvemos para comer
Xabiani: Si
Aristóteles: No vallas a soltar a tu abuelo, hazle caso y si juegas no te alejes mucho
Xabiani: Si papá

Papá se llevó a mi hijo, mamá preparó un té y yo solo pude quedarme en la sala, mi pecho dolía mucho desde que salimos y en el momento en que mi bebé se fue con papá ese dolor solo aumentó, ¿Por qué fui tan iluso y seguí creyendo en las historias de mamá?, Desde que Xabiani nació era obvio que mi vida no sería de cuento y aún así me aferre a la idea de ser amado por mi alfa pero me doy cuenta que podré tener un millón de destinados y ninguno me amará porque soy alguien que no debe ser amado de esa forma... En momentos como este es que me arrepiento de no quedarme y haberme casado, mi vida no sería feliz tampoco pero mi destino no estaría condenado a solo tener la compañía de mi bebé.

Polita: ¿Que paso Aris?
Aristóteles: ¿Has visto los deportes dónde lanzan o golpean pelotas de un lado a otro entre varios?
Polita: Si
Aristóteles: Soy esa pelota...
Polita: (acomoda su cabello) ¿Que te hicieron ese par de niños?
Aristóteles: ¿Algún día alguien me amara de verdad?
Polita: ¿Por qué lo preguntas mi Aris?
Aristóteles: Porque ya no quiero esto (comienza a llorar) ellos no me quieren, todo el día pelearon por ver quién se quedaba conmigo, los dos me quieren rechazar... Me sentí como una pelota, una carga que ninguno quiere tener y duele mucho...
Polita: (lo abraza) Dime, ¿Qué pasó exactamente?
Aristóteles: No entendí todo pero todo el tiempo decían cosas como a quien debería rechazar y quién debía quedarse conmigo, mami si no me quieren solo podían decirlo, no soy tan estúpido... El no me quiere por haberme alejado para dejar de quererlo y ella igual me dejaría... Me sentí como una pelota con la que podían jugar, ella me dijo débil... ¡Les conté todo de mi y mi bebé!... Confíe en ellos
Polita: Ellos fallaron no tu mi amor (limpia sus lágrimas) ellos son los idiotas, tú no lo eres mi Aris
Aristóteles: Los alfas son malos (solloza)
Polita: No mi Aris, no todos son así
Aristóteles: Natalia parecía diferente, parecía que me quería y mintió... Le creí, ¡Ella conoció a mi lobo!
Polita: Te duele y no te pediré que no llores, eso no es malo, es liberador
Aristóteles: No quiero volver a verlos...
Polita: Pueden quedarse aqui hasta que deban volver
Aristóteles: No quiero volver... El problema es que Pancho me ayuda a estudiar y es el papá de Temo... Ahorita ni siquiera quiero volver a Toluca...
Polita: Tranquilo mi Aris ya encontraremos una solución a esto, ahorita no te abrumes pensando en lo que pasará después, solo relájate, aquí van a estar seguros, está vez no fallaremos protegiendolos
Aristóteles: Gracias mami (la abraza)
Polita: (besa su frente) Me gusta tenerte aquí otra vez hijo, me habías hecho mucha falta
Aristóteles: Y tú a mí
Polita: Vamos a despejar esa cabecita y ayúdame a preparar la comida, no creo que con lo que pasó hayan comido algo
Aristóteles: No, solo lo cargue y nos salimos
Polita: Eso pensé.

Quiero ser tu compañía (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora